OPINI脫N de Bruno Peron Loureiro, Brasil.- Un problema acuciante en Brasil es el de equilibrar el nivel educativo de sus j贸venes, porque aumenta la distancia entre los que saben poco y los que saben mucho. La educaci贸n tendr谩 que ser suficiente para que estos j贸venes tengan las condiciones para luchar por un pa铆s mejor. En esta ocasi贸n quisiera hacer unos comentarios sobre lo que se acostumbra a llamar “fuga de cerebros y talentos”.
Es fundamental entender que Brasil est谩 inserto en un sistema competitivo, de disputas de mercados y poder entre los pa铆ses. No quiero decir con eso que todo el mundo sea de esa forma. Con todo, el Brasil le hace el juego a los pa铆ses poderosos, que no tienen la menor consideraci贸n por nuestros problemas sociales. Todo entra dentro de un esquema de objetividad de nuestro comportamiento c铆vico. Por eso, tenemos que prepararnos para enfrentar esta realidad de las relaciones internacionales sin tener recelos con lo “ir al cielo”, porque nuestras religiones pregonan la abnegaci贸n y la servidumbre.
Es desde este punto de vista que alerto sobre el hecho que aumenta la distancia entre los que saben poco y los que saben mucho. Por ejemplo, becas millonarias del gobierno brasilero financian a estudiantes en el exterior, mientras los gestores de la Educaci贸n no abrieron todav铆a la puerta adecuada que llevar谩 a los j贸venes poco educados al camino de la claridad. A consecuencia de esto es que tenemos una formaci贸n de elites y una desatenci贸n de ignorantes, estos disponen de m铆nimos recursos.
El gobierno tiene dinero para hacer buenas pol铆ticas p煤blicas para la Educaci贸n, sin embargo sus gestores tienen miedo de dar un paso mayor que sus piernas.
En este formato, tenemos estudiantes en el exterior que investigan en 谩reas poco desarrolladas o inexistentes en Brasil, para que cuando retornen a su pa铆s de origen queden desempleados por la dificultad de su inserci贸n profesional. Pero debido a los compromisos firmados con agencias financiadoras de becas de estudio en el exterior, estos estudiantes vuelven a Brasil. Muchos de ellos entonces terminan ejerciendo actividades diferentes a las que corresponden a sus estudios. M谩s grave es que estas becas de estudio en el exterior le quitan dinero a un pa铆s pobre que m谩s lo necesita y lo depositan en un pa铆s rico que menos lo precisa. Por eso digo que ese dinero recorre el d贸lar-ducto en los Estados Unidos, el libra-ducto en Inglaterra y el euro-ducto en Europa.
Es as铆 que Brasil invierte en sistemas universitarios extranjeros (muchos de ellos sin la m铆nima “excelencia”, al contrario de lo que se cree) y deja el futuro de las elites formadas en “manos de Dios”. Hay un c铆rculo vicioso en las creencias de los estudiantes brasileros en que lo que se hace en el exterior es mejor (y de “excelencia” y de “primer mundo”); as铆 las becas para estos estudiantes terminan financiando puertas giratorias, vitrinas caras y sistemas automatizados en universidades cuyos “staff-members” tienen gran experiencia en “vender el pescado”.
Sin m谩s comentarios sobre las particularidades de estas becas de estudio, menciono algunos aspectos m谩s pertinentes a la “fuga de cerebros y talentos. Mientras que los ejemplos que di en los p谩rrafos anteriores se refieren a profesionales de los cuales se espera su retorno a Brasil por las inversiones educativas, la tal fuga ocurre tambi茅n con el cine, la literatura, la m煤sica, las artes y las ciencias.
La econom铆a y los 铆ndices sociales del pa铆s de origen sufren da帽os incalculables con la fuga de cerebros y talentos. Esta evasi贸n ocurre cuando profesionales destacados aceptan propuestas de estudio y de trabajo en el exterior y all谩 desempe帽an actividades que no mejoran las condiciones de su pa铆s de origen. Es as铆 que investigadores 谩rabes, chinos, hind煤es, coreanos, sudamericanos, africanos y europeos de elevada competencia hacen innovaciones cient铆ficas y tecnol贸gicas en instituciones universitarias de los Estados Unidos.
Es verdad que muchos estudiantes y profesionales brasileros necesitan tener v铆nculos fuertes (generalmente familiares y de amistades) con el pa铆s de origen o mucho patriotismo para aceptar un salario bajo o trabajar en un 谩rea distinta a su formaci贸n, y enfrentar una vida en medio de la violencia (hoy generalizada) en su pa铆s, para rechazar propuestas de empleo en pa铆ses con mejor infraestructura c铆vica y laboral.
Igualmente la cuesti贸n de la fuga de cerebros y talentos es tan preocupante que ella ocurre a煤n dentro del mismo territorio brasilero. Me refiero al fen贸meno de los “trainees¨” de empresas transnacionales. Estas hacen procesos selectivos para absorber cerebros y talentos de las mejores universidades brasileras. El aprovechamiento profesional de estos escogidos ocurre en funci贸n de los intereses particulares de estas empresas, que rinden cuentas a sus sedes en otros pa铆ses.
Para retomar el punto inicial, es necesario equilibrar la Educaci贸n en Brasil en lugar de promover la formaci贸n de elites que ser谩n invitadas a huir de aqu铆. Si se logra un formato equilibrado, la posibilidad es mayor de que haya mucho m谩s cerebros y talentos y de que aunque algunos salgan, otros se queden.
As铆, sugiero que los tomadores de decisiones del gobierno inviertan mucho m谩s dinero p煤blico en la Ense帽anza B谩sica y Media e incentiven a los profesores de estos niveles de escolaridad. De esta forma 茅stos transmitir谩n a los j贸venes el conocimiento como una forma de libertad, de placer, de poder y de oportunidades.
http://www.brunoperon.com.br
Es desde este punto de vista que alerto sobre el hecho que aumenta la distancia entre los que saben poco y los que saben mucho. Por ejemplo, becas millonarias del gobierno brasilero financian a estudiantes en el exterior, mientras los gestores de la Educaci贸n no abrieron todav铆a la puerta adecuada que llevar谩 a los j贸venes poco educados al camino de la claridad. A consecuencia de esto es que tenemos una formaci贸n de elites y una desatenci贸n de ignorantes, estos disponen de m铆nimos recursos.
El gobierno tiene dinero para hacer buenas pol铆ticas p煤blicas para la Educaci贸n, sin embargo sus gestores tienen miedo de dar un paso mayor que sus piernas.
En este formato, tenemos estudiantes en el exterior que investigan en 谩reas poco desarrolladas o inexistentes en Brasil, para que cuando retornen a su pa铆s de origen queden desempleados por la dificultad de su inserci贸n profesional. Pero debido a los compromisos firmados con agencias financiadoras de becas de estudio en el exterior, estos estudiantes vuelven a Brasil. Muchos de ellos entonces terminan ejerciendo actividades diferentes a las que corresponden a sus estudios. M谩s grave es que estas becas de estudio en el exterior le quitan dinero a un pa铆s pobre que m谩s lo necesita y lo depositan en un pa铆s rico que menos lo precisa. Por eso digo que ese dinero recorre el d贸lar-ducto en los Estados Unidos, el libra-ducto en Inglaterra y el euro-ducto en Europa.
Es as铆 que Brasil invierte en sistemas universitarios extranjeros (muchos de ellos sin la m铆nima “excelencia”, al contrario de lo que se cree) y deja el futuro de las elites formadas en “manos de Dios”. Hay un c铆rculo vicioso en las creencias de los estudiantes brasileros en que lo que se hace en el exterior es mejor (y de “excelencia” y de “primer mundo”); as铆 las becas para estos estudiantes terminan financiando puertas giratorias, vitrinas caras y sistemas automatizados en universidades cuyos “staff-members” tienen gran experiencia en “vender el pescado”.
Sin m谩s comentarios sobre las particularidades de estas becas de estudio, menciono algunos aspectos m谩s pertinentes a la “fuga de cerebros y talentos. Mientras que los ejemplos que di en los p谩rrafos anteriores se refieren a profesionales de los cuales se espera su retorno a Brasil por las inversiones educativas, la tal fuga ocurre tambi茅n con el cine, la literatura, la m煤sica, las artes y las ciencias.
La econom铆a y los 铆ndices sociales del pa铆s de origen sufren da帽os incalculables con la fuga de cerebros y talentos. Esta evasi贸n ocurre cuando profesionales destacados aceptan propuestas de estudio y de trabajo en el exterior y all谩 desempe帽an actividades que no mejoran las condiciones de su pa铆s de origen. Es as铆 que investigadores 谩rabes, chinos, hind煤es, coreanos, sudamericanos, africanos y europeos de elevada competencia hacen innovaciones cient铆ficas y tecnol贸gicas en instituciones universitarias de los Estados Unidos.
Es verdad que muchos estudiantes y profesionales brasileros necesitan tener v铆nculos fuertes (generalmente familiares y de amistades) con el pa铆s de origen o mucho patriotismo para aceptar un salario bajo o trabajar en un 谩rea distinta a su formaci贸n, y enfrentar una vida en medio de la violencia (hoy generalizada) en su pa铆s, para rechazar propuestas de empleo en pa铆ses con mejor infraestructura c铆vica y laboral.
Igualmente la cuesti贸n de la fuga de cerebros y talentos es tan preocupante que ella ocurre a煤n dentro del mismo territorio brasilero. Me refiero al fen贸meno de los “trainees¨” de empresas transnacionales. Estas hacen procesos selectivos para absorber cerebros y talentos de las mejores universidades brasileras. El aprovechamiento profesional de estos escogidos ocurre en funci贸n de los intereses particulares de estas empresas, que rinden cuentas a sus sedes en otros pa铆ses.
Para retomar el punto inicial, es necesario equilibrar la Educaci贸n en Brasil en lugar de promover la formaci贸n de elites que ser谩n invitadas a huir de aqu铆. Si se logra un formato equilibrado, la posibilidad es mayor de que haya mucho m谩s cerebros y talentos y de que aunque algunos salgan, otros se queden.
As铆, sugiero que los tomadores de decisiones del gobierno inviertan mucho m谩s dinero p煤blico en la Ense帽anza B谩sica y Media e incentiven a los profesores de estos niveles de escolaridad. De esta forma 茅stos transmitir谩n a los j贸venes el conocimiento como una forma de libertad, de placer, de poder y de oportunidades.
http://www.brunoperon.com.br