OPINI脫N de Ra煤l Wiener, Per煤.- Los jueces del de la Sala Penal Nacional, han dictaminado algo m谩s que obvio: que la detenci贸n de miembros del MOVADEF en abril, se hizo sin pruebas de la comisi贸n de delitos reales. Es algo que dijimos varios en su oportunidad: que esta era una falsa victoria del gobierno contra los que ya fueron vencidos y un aprovechamiento de la sensibilidad de mucha gente que cree en la posibilidad de un nuevo ciclo de violencia pol铆tica, para desviarla de otros problemas.
Los magistrados, cumpliendo con su deber, han analizado la probabilidad de la existencia de un delito y de que los procesados sean autores de los mismos, y han encontrado luego de revisar los documentos fiscales y los argumentos del procurador: “que existe una merma en cuanto al grado de convicci贸n de la realizaci贸n del hecho punible y esto en m茅rito a la idoneidad de los elementos de prueba…” En otras palabras que ellos no pueden condenar en funci贸n de las personas sino del mandato de la ley.
¿Y qu茅 responde el bullicioso procurador Julio Galindo ante su fracaso para probar lo improbable? Que los jueces no han tomado en cuenta que Crespo estuvo preso por terrorismo (aunque lo condenaron por defender a Guzm谩n y la pena ya la cumpli贸 铆ntegramente), que Sendero hizo mucho da帽o al pa铆s, que MOVADEF no ha renegado del “pensamiento Gonzalo”, etc. Es decir, le exige a los jueces que miren a qui茅n est谩n juzgando, no los delitos que est谩n encargados de juzgar.
Seg煤n la acusaci贸n, el MOVADEF es terrorista no porque haga actos terroristas, sino porque parte de sus miembros estuvieron relacionados con Sendero Luminoso en el pasado. Eso lo sabemos todos y es rid铆culo que se diga que se hizo una larga investigaci贸n para llegar a una conclusi贸n como esta. El tema es si la nueva organizaci贸n que han formado para reclamar la amnist铆a est谩 orientada a producir nuevas acciones de violencia y terror o no.
La Sala analiza, adem谩s, el caso de los “colaboradores eficaces” (nueva versi贸n de los antiguos “arrepentidos”, que brindan testimonios an贸nimos a polic铆as y fiscales), y en la corroboraci贸n de sus declaraciones con la realidad se帽ala que los supuestos viajes de Crespo y otros al Huallaga en fechas determinadas, corresponden a fechas en que se encontraban en Lima en funciones de abogados.
Entonces Galindo insiste que han hecho marchas y declaraciones. Y vuelve la pregunta: ¿en alguna de ellas hubieron actos violentos generados por los denunciados?, ¿las declaraciones incitaban a la acci贸n armada contra el Estado? Como no es as铆, la acusaci贸n se cae. Y s贸lo queda la intenci贸n pol铆tica que es derrotar al derrotado. Los jueces del Colegiado F, son expl铆citos en su consideraci贸n: que por m谩s erradas o repudiables que les parezcan las declaraciones de los procesados no conducen a una convicci贸n de que est谩 juzgando a gente que haga terrorismo o que quiera hacerlo en el futuro.