OPINI脫N de Salvador Gonz谩lez Brice帽o, M茅xico.- La verdad sea dicha. Al gobierno de Pe帽a Nieto le urge cerrar el caso de los estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa. El tema Iguala se ha convertido en la pesada roca sexenal del Presidente. Como su sombra, que a todos lados lo sigue. En el pa铆s, y en el exterior.
¿Crimen de Estado? No. Porque el Estado no intervino. Siquiera el Ej茅rcito. Todo devino en acciones de la ma帽a. Pero la mafia act煤a sola. Los negocios del crimen organizado florecen por generaci贸n espont谩nea.
¿Del Ej茅rcito? De ellos, los soldados y sus generales, no hay duda. Sin antecedentes, la guerra sucia de los a帽os 60 y 70 en M茅xico nunca existi贸. Cero suspicacias. Esas son historias de otros pa铆ses con dictadorzuelos como Pinochet, Videla e tutti quanti. En M茅xico los presidentes son derechos, como Ordaz, Echeverr铆a. Y Calder贸n que solo hizo de la guerra contra el crimen un matadero.
¿De la guerrilla? No tiene trascendencia, son idealistas sin base popular. Un pleito sin justificaci贸n hist贸rica. Una mascarada sin sentido, como la del EZLN en Chapas, a favor del TLCAN de 1994, ese 铆dolo de las redes sociales y la globalizaci贸n en que devino con el tiempo el subcomandante Marcos.
Los estudiantes de Iguala eran unos revoltosos. Por eso los rega帽os de los militares la noche del 26 de septiembre, en aqu茅l hospital de donde fueron sustra铆dos, antes que recibir atenci贸n m茅dica. Es m谩s, mentira que el C4 informe a todas las autoridades de los movimientos que hac铆an los muchachos de la Escuela Normal Rural, Luis Ignacio Burgos.
Nadie sab铆a nada. Como el jefe militar que acompa帽aba al entonces presidente municipal, Jos茅 Luis Abarca, el d铆a de los acontecimientos por la tarde. Todo fue obra de los malosos. Los Guerreros Unidos que andaban (¿ya no?) en disputa con Los Rojos por la plaza. Fue un contrario que confundi贸 a los amigos con enemigos y dio el pitazo; El Gil y El Fercho, los l铆deres. Abarca dar铆a la contraorden “como sea”. Eso s铆. Nadie explica por qu茅 los polic铆as municipales entregaron a los estudiantes a la mafia, y estos a su vez los confundieron con sus enemigos Los Rojos.
Igualmente, el entonces gobernador 脕ngel Aguirre Rivero, quien corri贸 a refugiarse a su casa en el DF, no sab铆a nada. 脡l desconoce los antecedentes de violencia en su tierra natal. Como de los Figueroa, padre e hijo. Que Rub茅n no habr铆a consentido a guerrilleros como Lucio Caba帽as y Genaro V谩zquez.
Luego entonces, los Guerreros Unidos no trabajan en los negocios. Iguala no es el estado con potencial para el cultivo de amapola. Como tampoco lo es del oro. En Iguala solo hay artesanos de la plata. El oro brilla, pero por su ausencia. Es m谩s, Estados Unidos no demanda ni oro ni drogas. Como si fuera el principal mercado del mundo en consumo de enervantes para entretener a los j贸venes.
¿De Murillo Karam? La pura verdad. Los estudiantes fueron “privados de la libertad, de la vida y arrojados al r铆o”. As铆 lleg贸 a la conclusi贸n que la verdad primera es la buena. Lo confirmaron la UNAM y El Cepillo. Es la “verdad hist贸rica”, y cient铆fica. Por lo mismo, no hay que atraparse en eso. El 2015 no es un a帽o electoral. Ahora todo el mundo sabe lo que pas贸. Los padres son los primeros conformes. La sociedad tambi茅n.