OPINI脫N de Mauricio Casta帽o H., Colombia.- Si el poder quieres buscar, el dinero debes encontrar. Tras de cada hombre de poder se encuentra el due帽o de un gran capital. Evidente que en el mundo pol铆tico, la verdadera influencia la ejercen los ricos adinerados. Los pol铆ticos son tan s贸lo extensiones que gesticulan y se mueven seg煤n los gustos de sus patrones. Es ya com煤n decir que los empresarios son gobiernistas y no partidistas, esto es, con cualquiera que suba ganan, los gobiernos siempre dependen del poder del dinero, los pol铆ticos son solo funcionarios habilidosos en la demagogia para manipular a la mayor铆a pobre. Aunque existen casos en que no se delega el poder pol铆tico y son los mismos empresarios quienes toman las propias riendas, caso Silvio Berlusconi en Italia, ejemplos pueden encontrarse en criollos latinoamericanos y quedan a la imaginaci贸n de cada quien.
Gianni Versace, en el programa redes de poder de Discovery Civilization, al ser preguntado si en caso de pedir audiencia al Papa, al primer ministro, y a cual pol铆tico que quisiera, le ser铆a concedida, respond铆a que s铆, la clave se encuentra en que es el hombre m谩s adinerado de Mil谩n, de Italia. Vuestra Majestad es el dinero. La fortuna provee el poder, el mundo de la fortuna supedita al poder pol铆tico, el poder empresarial es m谩s perdurable, una empresa familiar puede durar d茅cadas incluso siglos, mientras que un gobierno es cambiante en los per铆odos cortos establecidos, pero el empresario siempre est谩 ah铆, siempre gana sin importar el vigente pol铆tico.
En la ciudad de los 脕ngeles, en ese programa de redes de poder, muestran las alfombras rojas de Hollywood y sobre ellas los pasos estilizados de la far谩ndula con sus trajes costosos quieren atraer alg煤n buen contrato pero all谩, detr谩s de los telones no se ocultan sus angustiosos rostros que develan vidas ruinosas gracias al mundo digital y la pirater铆a que parece estarle cavando la tumba a Hollywood. En otro punto de la ciudad se encuentra el alcalde, quien concede unos minutos de su apretada agenda al periodista. Su gran preocupaci贸n es medi谩tica, est谩 en que su asesor de imagen seleccione el mejor 谩ngulo de su rostro, la mejor sonrisa simp谩tica, por lo dem谩s todo aburrido, los mismos lugares comunes del demagogo: la ciudad mejorar谩 en v铆as, seguridad, oportunidades de empleo, y bla, bla, bla.
La expresi贸n redes de poder es com煤n escucharla tambi茅n en la clase media cuando refiere a contactos que ocupan posiciones privilegiadas en cargos p煤blicos y privados desde los cuales pueden influir y tender la mano a sus amigos y allegados necesitados. Para hacerse a un lugar de poder siendo un ciudadano de a pie o que no tiene influencia, basta con hacerse a un amigo, caerle en gracia a un hombre que tenga alguna porci贸n de poder, entonces tranzan relaci贸n haciendo una donaci贸n considerable a la campa帽a de alg煤n pol铆tico, o con aportarle alguna votaci贸n, favores estos que ser谩n regresados.
En los or铆genes de la democracia griega estaba el 谩gora y los civitas, la plaza p煤blica y los ciudadanos, reunidos en sinceridad para buscar soluciones racionales y argumentadas a sus problemas, la actitud parresiast茅s o decir la verdad a toda costa de cualquier riesgo. Hoy la diferencia es el aparecimiento del demagogo, quien enga帽a la voluntad general para beneficiar a unos pocos. En la historia cristiana el 谩ngel se cae, se vuelve maldito porque se guarda la informaci贸n, la retiene para s铆, para su provecho; y eso es el poder en la actualidad.
En el mundo futurista Borges se pregunta ¿Qu茅 sucedi贸 con los gobiernos? Seg煤n la tradici贸n fueron cayendo gradualmente en desuso. Llamaban a elecciones, declaraban guerras, impon铆an tarifas, confiscaban fortunas, ordenaban arrestos y pretend铆an imponer la censura y nadie en el planeta los acataba. La prensa dej贸 de publicar sus colaboraciones y sus efigies. Los pol铆ticos tuvieron que buscar oficios honestos; algunos fueron buenos c贸micos o buenos curanderos. La realidad sin duda habr谩 sido m谩s compleja que este resumen.