Ir al contenido principal

¿Feminismo en Podemos?

OPINIÓN de Beatriz Gimeno.- Es obvio que Podemos tiene un problema con el feminismo. Y es curioso que lo tenga cuando no paramos de hablar de feminismo, cuando es uno de los ejes de esta campaña interna y cuando, además, en este partido hay más feminismo organizado internamente que en ningún otro. Y, sin embargo, seguimos teniendo un problema con el feminismo. Desde fuera no se ve ese feminismo. No hemos atraído a las académicas, ni las mujeres del movimiento cuentan con Podemos, ni Podemos es conocido por la pujanza de su feminismo. Tenemos un muro delante nuestro. Podemos debería estar en este momento convirtiéndose en un referente del feminismo, a todos los niveles, pero no lo está haciendo.

Creo que la razón está en que el feminismo de Podemos se ha construido hasta ahora como un espacio aislado de todo otro feminismo. Un espacio construido por feministas, desde luego, pero sin contacto con las bases feministas del partido, y sin contacto tampoco con el movimiento feminista o la academia. Se ha pretendido construir como si se pudiera partir de cero, como si pudiéramos inventar el feminismo, como si supiéramos cómo llevar el feminismo a cumbres nunca antes conocidas. Ahora vamos a inventar un feminismo ganador, ahora vamos a inventar un feminismo para todas las mujeres, ahora vamos a explicar al mundo qué es el feminismo y cómo se hace.

En las elecciones que se van a celebrar en Vistalegre II hay muchos documentos de Igualdad y hay que reseñar que si estas propuestas presentaran programas electorales, seguramente coincidirían en el 90% de las mismas, todas somos feministas y todas estamos de acuerdo en las cuestiones esenciales. Lo que ahora presentamos son documentos políticos y organizativos para construir el feminismo en Podemos. Y ahí es dónde hay alguna diferencia importante. En primer lugar, las tres corrientes principales en cuestiones de feminismo se quedan en dos. Podemos en Movimiento y Podemos Para Todas hemos asumido el documento presentado por el Círculo de Feminismos Estatal. Nos diferencia con Recuperar la Ilusión la manera en qué pensamos que hay que construir el feminismo en Podemos, o cómo construir un partido de verdad feminista.

Recuperar la Ilusión propone seguir por la senda ya probada en estos tres años. Un feminismo “institucional” (ya institucional sin haber llegado siquiera a gobernar), vertical, atrincherado en lo orgánico y que no ha tenido capacidad en todo este tiempo de traspasar los muros de Podemos. Un feminismo que es femocracia, cargos feministas, gente trabajando en feminismo pero incapaz de construir desde abajo, de relacionarse con el feminismo organizado, dentro y fuera del partido. Se supone que Vistalegre 2 iba a relanzar los círculos. Sin embargo, cuando hay un Circulo que funciona bien, que lleva funcionando contra viento y marea desde el minuto uno del partido, no se aprovecha. El documento de RLI apenas concede importancia a las bases feministas de Podemos. ¿No íbamos a ser un partido-movimiento? Parece que hay miedo a construir un contrapoder feminista que pueda enfrentarse al feminismo de cargos. En realidad, dar poder a las bases feministas lo que hace es fortalecer no sólo el feminismo, sino también a la propia organicidad feminista.

Porque el feminismo siempre es frágil y nunca tiene poder por sí solo, a menos que las bases sean lo suficientemente fuertes como para sostenerlo. Un feminismo aislado dentro del partido no tiene capacidad para imponer o sostener nada. Para poder hacer feminismo para todas, para que el feminismo llegue a todas las mujeres, hay que construir un partido feminista y un partido feminista sólo puede construirse con unas bases movilizadas y activas que sean capaces, cuando haga falta, de sostener y defender esas políticas. De lo contrario, las políticas más radicalmente feministas no se harán. Y no se harán porque el feminismo, nos pongamos como nos pongamos, y lo vistamos como lo vistamos, siempre es impugnador y, por tanto, molesto. Construir con el Círculo no es construir un contrapoder feminista sino, en realidad, apuntalar el poder del feminismo y el poder también de la organicidad feminista.

Esa es la diferencia fundamental con la propuesta que presenta el Círculo Feminista y que asumen Podemos en Movimiento y Podemos Para Todas. Si queremos construir una sociedad más feminista necesitamos un partido feminista y para eso, por muchas feministas que tengamos colocadas arriba, si no hay un abajo, no va a servir. Si no hay un afuera, tampoco. Y en estos tres años de andadura, fuera de Podemos no hemos conseguido que todo ese feminismo vivo y pujante, diverso y militante, que ya hay se haya visto. Claro que se han hecho cosas, y cosas bien, pero el partido sigue sin percibirse como un partido feminista porque no lo es; porque lo que hay son feministas ocupando cargos feministas y eso es lo que tenemos que cambiar. Y la verdad es que no es tan complicado porque el cambio está ahí, en los círculos, en los miles de jóvenes feministas que se acercan a Podemos a través de esos círculos feministas activos que hay en todas las comunidades y en todos los territorios. Ese es el poder feminista de Podemos que hay que aprovechar, desde ahí hacia arriba y hacia afuera. Toda esa potencia no la podemos intentar detener o controlar, sino que tenemos que sumarnos a ella, y tratar de empoderarla aún más. Por eso desde Podemos en Movimiento hemos asumido esta propuesta del círculo porque pensamos que esta oportunidad que tenemos ahora de ir todas juntas no la podemos dejar pasar.

*https://beatrizgimeno.es/




">


ARCHIVOS

Mostrar más


OTRA INFORMACIÓN ES POSIBLE

Información internacional, derechos humanos, cultura, minorías, mujer, infancia, ecología, ciencia y comunicación

El Mercurio Digital (elmercuriodigital.es) se edita bajo licencia de Creative Commons
©Desde 2002 en internet
Otra información es posible




AI FREE: DIARIO LIBRE DE INTELIGENCIA ARTIFICIAL