Ir al contenido principal

Nosotras / Gu geu

No os qued茅is en el margen. Que las aguas os lleven
sobre finas arenas o afilados guijarros.
Que os penetren las sales. Que las zarzas os hieran-
Y, acerando la quilla, remontad la corriente
hacia el puro misterio donde el r铆o se inicia
    脕ngela Figuera Aymerich

El libro Nosotras / Gu geu recorre, a trav茅s de la biograf铆a de cuatro mujeres transgresoras, el Bilbao de inicios de siglo XX, del minero, de la ciudad en la posguerra y en el franquismo, y tambi茅n de la Transici贸n. Otros muchos proyectos y mujeres siguen haciendo hoy cultura cr铆tica en la ciudad.


Ilustraci贸n de 脕ngela Figuera Aymerich en el libro ‘Nosotras / Gu geu’.

Marian Puertas hizo un taller de moldes de tetas, mezclando la simbolog铆a, la transformaci贸n social, la cr铆tica y lo art铆stico. Elba Ru铆z Morales y Zahira Montalvo Herrero, las payasas que conforman Kancaneo Teatro, han compartido t茅cnicas de improvisaci贸n. ‘Inundaci贸n’, una obra de teatro sobre la autopsia feminista de una ruptura amorosa lesbiana, se va a estrenar en el marco del festival de cine Zinegoak. Desde hace semanas, Mai Serrano ofrece citas peri贸dicas en su ‘Caf茅 para madres’ y su ‘Caf茅 para gordas’, con los que pretende, a trav茅s del discurso y la conversaci贸n distendida, poner patas arriba los conceptos sobre la feminidad.

Histeria Kolektiboa, un colectivo formado por mujeres en torno al arte, la cultura y la transformaci贸n social, arropa estas actividades (y otras muchas, que llevar铆a todo el texto describirlas). Est谩n en Bilbao, en el barrio de San Francisco, una red de calles, en pleno centro, por el que mucha gente evita pasar. Migraci贸n, gente moderna, cultura, arte, poblaci贸n gitana o periodismo se entremezclan en una de las zonas con m谩s solera de la capital vizca铆na. Ah铆, en la calle Las Cortes, la de la prostituci贸n, est谩 La Karpinter铆a, una antigua serrer铆a que las creadoras de Histeriak convirtieron en un hueco imprescindible para la cultura cr铆tica en Bilbao.

“Es una comunidad que camina sola, que se relaciona con el espacio para crear. Aqu铆 la gente se siente libre. Con este proyecto intentamos saltar la barrera del miedo, desmontar lo pol铆ticamente correcto, dar luz sobre cosas evidentes pero que mirarlas supone accionar”. Habla Ver贸nica M谩s Checa, una de las fundadoras del colectivo. La iniciativa naci贸 de un grupo de mujeres, de diversas disciplinas y capacidades, que ofreci贸 al barrio y a la ciudad un sitio diferente e inclusivo. “Empezamos a programar cosas de mujeres porque normalmente los hombres tiene m谩s f谩cil visibilizarse. A nosotras nos cuesta pedir el espacio, siempre vamos con el perd贸n y las gracias”, apunta M谩s. Y a帽ade: “Es que incluso a las mujeres nos han querido quitar el arte. Hay genio, pero no genias”.

El lenguaje sexista ha intentado apropiarse del discurso y, por extensi贸n, de la construcci贸n de los imaginarios. Pero no lo ha conseguido. Hay muchas ‘genias’. De algunas se hace eco el proyecto ‘Nosotras / Gu geu’, de las librer铆as La Vor谩gine, de Santander, y Louise Michel, de Bilbao, que ahonda en la subversi贸n feminista de la cultura. A trav茅s de un libro y diferentes charlas han recordado y reescrito la historia y la trayectoria de varias mujeres cuya impronta fue fundamental en su 茅poca, pero que el paso del tiempo, y el olvido de la cultura ‘oficial’, ha suavizado.
Desigual reconocimiento

“Fueron valoradas entonces, pero con el tiempo se ha perdido su memoria”, subraya Cristina S谩ez, de la librer铆a feminista Louise Michel. Un claro ejemplo es 脕ngela Figuera Aymerich, poeta social bilba铆na de la postguerra. Coet谩nea de Blas de Otero y Gabriel Celaya, su nombre era habitual en la mitad del siglo XX cuando se hablaba de poes铆a; pero, ¿qui茅n la conoce hoy?

“A pesar de la impetuosidad del resurgimiento po茅tico de las mujeres, capaz de borrar, en cuanto a calidad, inquietud y fuerza, cualquier l铆nea divisoria con la poes铆a escrita por los hombres, el reconocimiento y la valoraci贸n que reciben queda, todav铆a hoy, claramente discriminada y minusvalorada”, recoge precisamente el libro Nosotras / Gu geu, en el que, a trav茅s de la biograf铆a de cuatro mujeres, se habla del Bilbao de inicios de siglo XX, del minero, de la ciudad en la posguerra y en el franquismo, y tambi茅n de la Transici贸n. Para conocer el Bilbao actual bien vale una visita a La Karpinter铆a.


Ilustraci贸n de Dolores Ibarruri en el libro ‘Nosotras /Gu geu’

A trav茅s de la figura de Dolores Ibarruri se indaga, por ejemplo, en el Bilbao de la cuenca minera. Porque antes de ser una reconocida pol铆tica, esta mujer, nacida en Gallarta, denunci贸 la situaci贸n de los mineros y sus familias. Una lucha muy desconocida y que marc贸 su vida. Fue modista, sirvienta, esposa de preso, madre de seis criaturas -s贸lo una morir铆a despu茅s que ella-. “Primero rompi贸 con el papel tradicional de esposa para convertirse en una esposa militante, despu茅s su compromiso pol铆tico fue saliendo de la esfera privada y de su rol de esposa para ocupar el espacio p煤blico por s铆 misma”, escribe la investigadora Leticia Urretabizkaia en el libro. Luego, fue la Pasionaria.

Para Antonia Rodrigo, citada en la publicaci贸n, “Dolores Ubarruri enaltec铆a a las multitudes porque en ella estaban personificadas la madre, la hija, la novia, la hermana, la campesina, la minera, la obrera, la hero铆na”; seguramente tambi茅n la ‘genia’. Por ello, “Pasionaria no reneg贸 nunca de sus or铆genes, porque hubiera sido renegar de una buena parte de su personalidad”. Tampoco abjur贸 de su condici贸n de mujer en un espacio tan masculino como la pol铆tica. La conciencia de clase y de g茅nero atravesaron su trayectoria. Atacada por su rol de g茅nero, por su vida sentimental, por su origen humilde… Por todo fue atacada Dolores, sobre todo por tener pensamientos propios, valent铆a y arrojo.

“Es de vital importancia para el avance de la revoluci贸n la conquista de la mujer; nuestra principal tarea es darle una conciencia pol铆tica que le permita conocer a sus enemigos y que le capacite para ejercer sus derechos. Ocurre que son nuestros propios camaradas los que se oponen a que la mujer intervenga en la vida pol铆tica y social. Tenemos que empezar por conquistar nuestros hogares, arrojando al enemigo que tenemos dentro”, escribi贸 Ibarruri en Mundo Obrero, en 1933.

‘Nosotras / Gu geu’ tambi茅n dedica espacio a la pionera del reporterismo a trav茅s de la fotograf铆a, Eulalia Abaitua, quien a inicios del siglo XX visibiliz贸 con su c谩mara las actividades y lo que hac铆an las mujeres de entonces. Sus fotos son un gran ejercicio de documentaci贸n, como el que hace, desde la Transici贸n, el Centro de Documentaci贸n de Mujeres Maite Albiz. Montado por un grupo de mujeres, este espacio es un dep贸sito p煤blico de una colecci贸n ordenada de libros, revistas y DVD, pero que adem谩s, y tal vez sea esto lo m谩s importante, se encarga de la “custodia del patrimonio del movimiento feminista de Euskadi”, como explica Mar铆a Jos茅 Sola, la bibliotecaria. Entre sus archivos, destacan los carteles de los movimientos y manifestaciones feministas desde hace 40 a帽os.

Salvaguardar el conocimiento y el patrimonio cultural de las mujeres, ofrecer recursos y reconocer los saberes igualitarios, femeninos y feministas son los ejes del Centro. La documentaci贸n est谩 ah铆 y no deber铆a caer en el olvido para que, en unos a帽os, no sean necesarios proyectos como ‘Nosotras / Gu geu’, ni en Bilbao, ni en Santander, ni en ning煤n sitio. Porque las ‘genias’ est谩n ah铆. Ve谩moslas y nombr茅moslas.


Este reportaje forma parte del proyecto ‘Nosotras / Gu geu’ de las librer铆as La Vor谩gine, de Santander, y Louise Michel, de Bilbao.

pikaramagazine

ARCHIVOS

Mostrar m谩s


OTRA INFORMACI脫N ES POSIBLE

Informaci贸n internacional, derechos humanos, cultura, minor铆as, mujer, infancia, ecolog铆a, ciencia y comunicaci贸n

El Mercurio (elmercuriodigital.es), editado por mercurioPress/El Mercurio de Espa帽a bajo licencia de Creative Commons
©Desde 2002 en internet
Otra informaci贸n es posible