OPINI脫N de Carola Ch谩vez, Venezuela.- El a帽o pasado eran el refer茅ndum, la renuncia, el abandono de cargo, la partida de nacimiento cucute帽a, calle, calle, calle y ¡zuaz! y Maduro caer铆a en 6 meses. Pasaron los d铆as y su embriaguez parlamentaria se convirti贸 en un enorme rat贸n. Nunca antes vi dilapidada una victoria como lo hizo la MUD con la 煤nica que ha tenido en los 煤ltimos 17 a帽os. En medio del reguero promesas rotas y botellas vac铆as, ahora la MUD, saca otra vez una carta amarillenta que lleva siempre asomada bajo la manga: La Carta Democr谩tica.

Esa carta desgracia pu帽o y letra de…
Luis Almagro, desde que lleg贸 a la secretar铆a general de la OEA, no ha tenido otra misi贸n que aplicar la Carta a Venezuela. Miren que en nuestro continente ha pasado de todo, y Almagro, cuando no est谩 pegado el Twitter despotricando contra el gobierno chavista, est谩 pegado a Aznar, Uribe, Marcos Rubio, Alejandro Toledo -que qui茅n sabe d贸nde andar谩-, Lilian Tintori, Lu铆s Florido, y cuanto vocero de la MUD se quiera montar en un avi贸n -y todos quieren- dando declaraciones y conferencias -adivinen- contra el gobierno chavista.
Lo de Almagro con Maduro es personal. Se conocieron como cancilleres, compa帽eros de la misma causa, por cierto, hasta que Almagro se sali贸 del cauce y se desbord贸 por la derecha. Almagro parece resentir que Nicol谩s llegara a la presidencia de su pa铆s antes que 茅l del suyo. ¡Qu茅 s茅 yo! Vainas de esa gente cuyos complejos los llevan a perder los estribos y la verg眉enza.
Con Almagro, la MUD siempre desatinada, siempre floja, busca que alguien desde afuera les haga el mandado. Qu茅 descaro, con el realero que les han dado, “give me money, give me money” -dec铆a Ramos Allup, seg煤n cuenta el ex embajador Brownsfield en los cables de la embajada gringa en Caracas wikilikeados. Se rumbearon esos reales, no sin dejar un reguero de muertos y heridos, no sin sembrar miles de sue帽os rotos en su gente, hasta el fracaso siempre, a hasta la desilusi贸n, hasta el a mi qu茅 me importa.
As铆, la dirigencia de eso que llaman MUD habla sola, poniendo todos sus huevos en la cesta de la OEA, y a la se帽ora de El Cafetal le importa tres pitos esa carta, lo que s铆 le importa es que los huevos est谩n por la nubes culpemaduro que no deja que el empresario huevero gane lo que tiene que ganar, porque nadie va a trabajar a p茅rdida, o algo as铆…
Y dale con la Carta y las giras 5 estrellas de los voceros opositores, porque de aplicarse, dicen, desprestigiar铆a al gobierno a nivel internacional, como si ya los medios hegem贸nicos no se hubieran encargado de esa parte, desde Ch谩vez hasta hoy. Como si las ma帽anas noticiosas en Espa帽a no fueran un rosario de chismes sobre Venezuela, como si CNN no llenara sus horas ConcluTumbando a Maduro, como si el Washington Post y el New York Times, no hubieran alertado a la opini贸n p煤blica gringa sobre la terrible amenaza inusual y extraordinaria que es Venezuela para ellos, no importa que no sepan por qu茅, ni c贸mo.
La verdad es que el impacto de la aplicaci贸n de la Carta Democr谩tica ser铆a poco o nada. Lo malo es que 茅sta es una pieza m谩s en el rompecabezas de la intervenci贸n extranjera. Puestas las piezas de la manipulaci贸n medi谩tica, ahora vienen las piezas institucionales: aqu铆 entran el saco de complejos de Almagro y sus panas de la MUD que, moviendo sus colitas, aplanan el camino que ya vinos recorrer en otros pa铆ses que se han negado a ser “perritos simp谩ticos echados en la alfombrita”.
Insisto, despu茅s les dices cachorros del imperio y se ofenden.

Esa carta desgracia pu帽o y letra de…
Luis Almagro, desde que lleg贸 a la secretar铆a general de la OEA, no ha tenido otra misi贸n que aplicar la Carta a Venezuela. Miren que en nuestro continente ha pasado de todo, y Almagro, cuando no est谩 pegado el Twitter despotricando contra el gobierno chavista, est谩 pegado a Aznar, Uribe, Marcos Rubio, Alejandro Toledo -que qui茅n sabe d贸nde andar谩-, Lilian Tintori, Lu铆s Florido, y cuanto vocero de la MUD se quiera montar en un avi贸n -y todos quieren- dando declaraciones y conferencias -adivinen- contra el gobierno chavista.
Lo de Almagro con Maduro es personal. Se conocieron como cancilleres, compa帽eros de la misma causa, por cierto, hasta que Almagro se sali贸 del cauce y se desbord贸 por la derecha. Almagro parece resentir que Nicol谩s llegara a la presidencia de su pa铆s antes que 茅l del suyo. ¡Qu茅 s茅 yo! Vainas de esa gente cuyos complejos los llevan a perder los estribos y la verg眉enza.
Con Almagro, la MUD siempre desatinada, siempre floja, busca que alguien desde afuera les haga el mandado. Qu茅 descaro, con el realero que les han dado, “give me money, give me money” -dec铆a Ramos Allup, seg煤n cuenta el ex embajador Brownsfield en los cables de la embajada gringa en Caracas wikilikeados. Se rumbearon esos reales, no sin dejar un reguero de muertos y heridos, no sin sembrar miles de sue帽os rotos en su gente, hasta el fracaso siempre, a hasta la desilusi贸n, hasta el a mi qu茅 me importa.
As铆, la dirigencia de eso que llaman MUD habla sola, poniendo todos sus huevos en la cesta de la OEA, y a la se帽ora de El Cafetal le importa tres pitos esa carta, lo que s铆 le importa es que los huevos est谩n por la nubes culpemaduro que no deja que el empresario huevero gane lo que tiene que ganar, porque nadie va a trabajar a p茅rdida, o algo as铆…
Y dale con la Carta y las giras 5 estrellas de los voceros opositores, porque de aplicarse, dicen, desprestigiar铆a al gobierno a nivel internacional, como si ya los medios hegem贸nicos no se hubieran encargado de esa parte, desde Ch谩vez hasta hoy. Como si las ma帽anas noticiosas en Espa帽a no fueran un rosario de chismes sobre Venezuela, como si CNN no llenara sus horas ConcluTumbando a Maduro, como si el Washington Post y el New York Times, no hubieran alertado a la opini贸n p煤blica gringa sobre la terrible amenaza inusual y extraordinaria que es Venezuela para ellos, no importa que no sepan por qu茅, ni c贸mo.
La verdad es que el impacto de la aplicaci贸n de la Carta Democr谩tica ser铆a poco o nada. Lo malo es que 茅sta es una pieza m谩s en el rompecabezas de la intervenci贸n extranjera. Puestas las piezas de la manipulaci贸n medi谩tica, ahora vienen las piezas institucionales: aqu铆 entran el saco de complejos de Almagro y sus panas de la MUD que, moviendo sus colitas, aplanan el camino que ya vinos recorrer en otros pa铆ses que se han negado a ser “perritos simp谩ticos echados en la alfombrita”.
Insisto, despu茅s les dices cachorros del imperio y se ofenden.