Un nuevo informe de la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos publicado hoy describe un alarmante listado de violaciones a esas garantías en la República Centroafricana entre los años 2003 y 2015.
Una mujer y su hijo en Bambari, Ouaka, tras ser desplazada por la violencia en la República Centroafricana. Foto: OCHA/Gemma Cortes
El documento, ordenado por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y realizado en conjunto con la Misión Multidimensional Integrada de Estabilización de las Naciones Unidas en la República Centroafricana (MINUSCA), reporta 620 incidentes.
El subsecretario general de Derechos Humanos, Andrew Gilmour, explicó el propósito del informe.
“El objetivo clave es enviar un mensaje muy claro a los que han cometido los actos más horrendos: los hemos documentado y continuaremos vigilando para evidenciar sus terribles crímenes”, dijo.
Entre los diversos atropellos a los derechos humanos se incluyen asesinatos en masa, aldeas completas incendiadas, ejecuciones extrajudiciales y otras serias violaciones de las garantías fundamentales.
El reporte destaca como causas para explicar la larga crisis en el país africano el largo historial de pobreza, la inestabilidad política, la corrupción y el nepotismo, hechos que han conducido a esa nación a una larga sucesión de conflictos armados que continúan en la actualidad.
La inestabilidad regional y los conflictos internos en los países vecinos han incrementado las condiciones volátiles en el país, especialmente a través del flujo de armas y grupos rebeldes a través de sus fronteras porosas, añade el informe.
A pesar de ser un país rico en minerales la nación africana es una de las más pobres del mundo.
Aunque el informe reconoce la complicada situación en materia de seguridad, llama a tomar medidas para el establecimiento de procesos de justicia transicional que incluyan la investigación de las fuerzas de seguridad en materia de derechos humanos.
Una mujer y su hijo en Bambari, Ouaka, tras ser desplazada por la violencia en la República Centroafricana. Foto: OCHA/Gemma Cortes
El documento, ordenado por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y realizado en conjunto con la Misión Multidimensional Integrada de Estabilización de las Naciones Unidas en la República Centroafricana (MINUSCA), reporta 620 incidentes.
El subsecretario general de Derechos Humanos, Andrew Gilmour, explicó el propósito del informe.
“El objetivo clave es enviar un mensaje muy claro a los que han cometido los actos más horrendos: los hemos documentado y continuaremos vigilando para evidenciar sus terribles crímenes”, dijo.
Entre los diversos atropellos a los derechos humanos se incluyen asesinatos en masa, aldeas completas incendiadas, ejecuciones extrajudiciales y otras serias violaciones de las garantías fundamentales.
El reporte destaca como causas para explicar la larga crisis en el país africano el largo historial de pobreza, la inestabilidad política, la corrupción y el nepotismo, hechos que han conducido a esa nación a una larga sucesión de conflictos armados que continúan en la actualidad.
La inestabilidad regional y los conflictos internos en los países vecinos han incrementado las condiciones volátiles en el país, especialmente a través del flujo de armas y grupos rebeldes a través de sus fronteras porosas, añade el informe.
A pesar de ser un país rico en minerales la nación africana es una de las más pobres del mundo.
Aunque el informe reconoce la complicada situación en materia de seguridad, llama a tomar medidas para el establecimiento de procesos de justicia transicional que incluyan la investigación de las fuerzas de seguridad en materia de derechos humanos.