OPINI脫N de Ram贸n Cotarelo/ Palinuro.- S铆, presidente en la parte del infiel. Pues, aunque el catolicismo es mayoritario en Bruselas, se trata de un catolicismo muy poco cat贸lico porque, por ejemplo, nunca gust贸 de la Inquisici贸n, gran organizadora de festejos y hogueras populares. Por eso hubo que decapitar a Egmont, para que sentara la cabeza. Decapitar en serio, no como esos descabezamientos de Rajoy que m谩s parecen descabezamientos de la Hidra. Nueve cabezas por cada una que corta. Diez indpendentistas cada vez que abre la boca.

La cuesti贸n de la investidura de Puigdemont como leg铆timo presidente de la Generalitat, sobre la que parecen devanarse los sesos los independentistas no es una cuesti贸n jur铆dica, sino pol铆tica. No es cosa de saber si tal o cual art铆culo del reglamento permiten una investidura in absentia, entre otras cosas porque para ello antes debe constituirse el Parlament y no est谩 claro que pueda con ocho diputados electos ausentes.
Se trata de posibilitar la aplicaci贸n del resultado de las elecciones para lo cual hay que retirar los cargos que se formulan contra los presos preventivos y los exiliados. De no hacerse as铆, pretextando una imaginaria separaci贸n de poderes, la 煤nica alternativa es que Rajoy otorgue un salvoconducto a Puigdemont para entrar en Catalunya al modo en que el Rey de los Romanos, Segismundo, se lo otorg贸 al hereje Juan Hus en tiempos que cada vez se parecen m谩s a estos. Y no creo que M punto Rajoy sea m谩s de fiar que Segismundo.
Una acusaci贸n frecuente al independentismo desde el bloque del 155 es la de jugar a hechos consumados. Es discutible e irrelevante desde el momento en que hecho consumado t铆pico es decirle a otro: "elige lo que quieras que yo har茅 lo que me d茅 la gana". Como hecho consumado fue encarcelar a los dirigentes independentistas. Y en ambos casos justificados con el mismo error: la seguridad de que, consumado el hecho, habr铆a una peque帽a reacci贸n y volver铆a la calma de inmediato. Fue falso, es falso y seguir谩 siendo falso.
Proseguir con el 155 en Catalunya es fomentar la inoperancia, la inestabilidad. Cuando no la turbulencia que no se produce a causa del car谩cter democr谩tico, c铆vico y pac铆fico del movimiento que se pretende sofocar.
Si el bloque del 155 retorna a la sensatez, tan invocada en sus discursos, reconocer谩 los resultados de las elecciones del 21D, liberar谩 a presos y exiliados pol铆ticos, allanar谩 el camino para la constituci贸n de un gobierno apoyado en una mayor铆a absoluta indpendentista. Y, luego, abrir谩 un di谩logo y una negociaci贸n con ese govern para encontrar una soluci贸n libremente aceptada por las dos partes.
La cuesti贸n de la investidura de Puigdemont como leg铆timo presidente de la Generalitat, sobre la que parecen devanarse los sesos los independentistas no es una cuesti贸n jur铆dica, sino pol铆tica. No es cosa de saber si tal o cual art铆culo del reglamento permiten una investidura in absentia, entre otras cosas porque para ello antes debe constituirse el Parlament y no est谩 claro que pueda con ocho diputados electos ausentes.
Se trata de posibilitar la aplicaci贸n del resultado de las elecciones para lo cual hay que retirar los cargos que se formulan contra los presos preventivos y los exiliados. De no hacerse as铆, pretextando una imaginaria separaci贸n de poderes, la 煤nica alternativa es que Rajoy otorgue un salvoconducto a Puigdemont para entrar en Catalunya al modo en que el Rey de los Romanos, Segismundo, se lo otorg贸 al hereje Juan Hus en tiempos que cada vez se parecen m谩s a estos. Y no creo que M punto Rajoy sea m谩s de fiar que Segismundo.
Una acusaci贸n frecuente al independentismo desde el bloque del 155 es la de jugar a hechos consumados. Es discutible e irrelevante desde el momento en que hecho consumado t铆pico es decirle a otro: "elige lo que quieras que yo har茅 lo que me d茅 la gana". Como hecho consumado fue encarcelar a los dirigentes independentistas. Y en ambos casos justificados con el mismo error: la seguridad de que, consumado el hecho, habr铆a una peque帽a reacci贸n y volver铆a la calma de inmediato. Fue falso, es falso y seguir谩 siendo falso.
Proseguir con el 155 en Catalunya es fomentar la inoperancia, la inestabilidad. Cuando no la turbulencia que no se produce a causa del car谩cter democr谩tico, c铆vico y pac铆fico del movimiento que se pretende sofocar.
Si el bloque del 155 retorna a la sensatez, tan invocada en sus discursos, reconocer谩 los resultados de las elecciones del 21D, liberar谩 a presos y exiliados pol铆ticos, allanar谩 el camino para la constituci贸n de un gobierno apoyado en una mayor铆a absoluta indpendentista. Y, luego, abrir谩 un di谩logo y una negociaci贸n con ese govern para encontrar una soluci贸n libremente aceptada por las dos partes.