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En Mali, dar a luz puede significar la muerte

Fatoumata lleg贸 casi muerta al centro de salud de Dala, en Mali. Sufri贸 complicaciones severas tras dar a luz en casa. Seydou Camara/MSF

M茅dicos Sin Fronteras: Ninguna mujer deber铆a morir dando vida

"Debemos hacer todo lo posible para ayudarles durante el parto. Es nuestra labor en Mali, donde las mujeres n贸madas sufren hemorragias que pueden ser mortales"

Estas son las historias de Tala, Awa, Wanli, Aminatou y Fatoumata.


Tala camin贸 dos d铆as para salvar su vida

Tala tiene 17 a帽os y es originaria de una comunidad n贸mada entre Menaka y Ansongo, en el este de Mali. Tuvo que viajar 100 kil贸metrosdurante dos d铆as en condiciones terribles para llegar al Centro de Salud de Referencia de Ansongo. Padec铆a un caso de anemia grave debido a una hemorragia fruto de haber dado a luz en su hogar.

"Mi hija se puso enferma despu茅s de dar a luz. Se qued贸 muy d茅bil. Despu茅s del nacimiento de su hijo, perdi贸 mucha sangre. El centro de salud comunitario est谩 muy lejos de nuestra casa, a m谩s de 50 kil贸metros. El estado de la carretera deja mucho que desear y nos da miedo lo que nos pueda ocurrir en el camino”, explica Tahata, de 50 a帽os.






“Se vio obligada a dar a luz en casa, como la mayor铆a de las mujeres de aqu铆. Como no se acababa de recuperar, utilizamos medicinas tradicionales para curarla, pero no funcionaban. Fue entonces cuando decid铆 llevarla yo sola en carromato al centro de salud, porque los hombres estaban pastando con el ganado. Nos llevamos al beb茅 reci茅n nacido con nosotros”, a帽ade.

“El viaje dur贸 todo un d铆a, y fue muy duro. En el centro de salud, su estado empeor贸 todav铆a m谩s. El personal m茅dico nos habl贸 entonces de MSF y de su presencia en el Hospital de Ansongo. Nos volvimos a poner en marcha, otra vez en carromato. Con el calor, mi hija empez贸 a agonizar. Por suerte, nos encontramos con un veh铆culo que conseguimos parar y que amablemente nos llev贸 a Ansongo.

Cuando por fin llegamos, a altas horas de la noche, mi hija fue hospitalizada. Me dijeron que le faltaba mucha sangre. Me preguntaba c贸mo me las iba a arreglar para pagar la transfusi贸n y los cuidados. Aun as铆, los equipos de MSF hicieron un gran trabajo, y salvaron la vida de mi hija sin pedirme dinero. Incluso me dieron comida mientras me quedaba con ella. Ahora se encuentra mucho mejor y ya ha podido empezar a cuidar de su beb茅".

Awa no sab铆a que estaba embarazada

Awa sufri贸 una enorme hemorragia durante su parto prematuro, que tuvo lugar en casa y durante el cual no recibi贸 ninguna asistencia m茅dica. Para ayudarla a detener la p茅rdida de sangre, sus padres recurrieron en vano a la medicina tradicional. Durante ese tiempo, Awa sufr铆a, dej贸 de comer, se fue debilitando y lleg贸 a sufrir una anemia grave. No fue hasta despu茅s de pasar 20 d铆as en esta situaci贸n cuando acudi贸 en triciclo y a toda prisa al Centro de Salud de Referencia de Douentza. All铆 garantizamos su asistencia de forma gratuita.

"Somos de Douma, de un pueblo cerca de la ciudad de Douentza, donde no hay ni siquiera un centro de salud. Por eso, traje a mi esposa Awa aqu铆 para que recibiera tratamiento. Era la primera vez que estaba embarazada. Como estamos lejos del hospital, no asist铆a a las consultas prenatales. Aun as铆, cre铆amos que hab铆amos calculado correctamente los meses del embarazo y que todav铆a faltaba para el parto. Un d铆a, de repente, sinti贸 dolores en el vientre.

Fue entonces cuando nos dimos cuenta de que estaba a punto de dar a luz a nuestro primer hijo. Era demasiado tarde para llevarla al hospital. Adem谩s, no ten铆amos ning煤n centro de salud cerca. Era muy duro para nosotros ver lo que estaba ocurriendo: perdi贸 demasiada sangre y el beb茅 hab铆a muerto. Fue muy duro.

La tragedia ocurri贸 hace veinte d铆as. Para detener la sangre, utilizamos muchas medicinas tradicionales que tardaron mucho en actuar. Para nosotros, ya hab铆amos superado lo peor, pero Awa no estaba todav铆a en forma, no ten铆a apetito, estaba menos activa. Fue entonces cuando comenz贸 a tener hinchaz贸n en la piel, en la cara, en las manos... todo se le deform贸. As铆, empezamos a buscar una manera de traerla aqu铆. Cuando llegamos, la examinaron y, siguiendo el consejo de los m茅dicos, comi贸 alimentos que le permitieran recuperar algo de fuerza", relata Amadou, marido de Awa y granjero originario de Douentza, en Mali.

Wanli y Aminatou tem铆an emprender solas el camino

Aminatou fue llevada de urgencia, temprano por la ma帽ana, a la Unidad de Maternidad del Centro de Salud de Ansongo, 14 d铆as despu茅s de tener un parto en casa sin asistencia m茅dica. Ya moribunda, tuvo un total de cuatro crisis de eclampsia durante el examen cl铆nico. Gracias a la movilizaci贸n de todo nuestro equipo, su estado se estabiliz贸 y su vida dej贸 de correr peligro.

Como consecuencia de una serie de complicaciones despu茅s de dar a luz en casa, Aminatou fue hospitalizada y recibe atenci贸n gratuita.






"Todo comenz贸 a las cinco de la ma帽ana, mientras tomaba el desayuno. Ah铆 empez贸 la eclampsia. No paraba de desmayarse y de temblar. Buscamos un veh铆culo para traerla aqu铆, al hospital. Como era de noche, no hab铆a ning煤n hombre que nos acompa帽ara. Ten铆amos miedo de salir, de emprender solas el camino, por la falta de seguridad”, recuerda Wanli, t铆a de Aminatou.

A la ma帽ana siguiente, nos la llevamos al centro de salud comunitario donde hab铆a asistido a sus consultas durante el embarazo; su 煤ltima visita fue tres d铆as antes del parto. Mi sobrina sufre complicaciones relacionadas con haber dado a luz en casa sin asistencia m茅dica. S茅 que parir fuera del hospital a veces puede salir bien, pero otras veces puede suponer consecuencias nefastas. A causa de la inseguridad, las mujeres no tienen m谩s opci贸n que dar a luz en casa durante la noche", a帽ade.

Sidiki Amadou es m茅dico de MSF y se encarg贸 de asistir a Aminatou. "Gracias a los diferentes tratamientos, la crisis de eclampsia desapareci贸. El parto en casa es algo que hay que evitar a toda costa, especialmente para las personas de la localidad de Ansongo, porque despu茅s del parto a menudo hay complicaciones, como en el caso de esta madre. Para luchar contra esta realidad, MSF se comunica con las mujeres durante las visitas prenatales. Tambi茅n es importante concienciarles a gran escala: deben entender las consecuencias y los riesgos de antes, durante y despu茅s del parto”.

Fatoumata casi no sobrevive

Fatoumata es madre de cinco hijos y originaria de una comunidad n贸mada en Dala, a 5 kil贸metros de Douentza, en el centro de Mali. Estaba casi muerta cuando lleg贸 al Centro de Salud de Referencia en Douentza. Nuestro equipo la estabiliz贸 para que ya no estuviera en estado cr铆tico.






"Acompa帽茅 a mi esposa enferma. Llegamos a las 11 en punto de la ma帽ana; estaba completamente inconsciente. Sus dolores comenzaron unos tres d铆as antes. Me dec铆a que le dol铆a el pecho, pero no fuimos inmediatamente al hospital para ver qu茅 pasaba. Cuando su salud realmente se deterior贸, cogimos una motocicleta para ir al hospital, aqu铆 en Douentza.

Cuando llegamos aqu铆 al centro de salud, los doctores la atendieron. Ella ya no se mov铆a. Estaba realmente preocupado por si ella sobrevivir铆a o no. Varias comadronas la llevaron en brazos a una habitaci贸n y yo me qued茅 fuera de la habitaci贸n. Tras unos momentos, los m茅dicos me preguntaron si sab铆a qu茅 le pasaba y les dije que no.

Fue entonces cuando me dijeron que mi esposa estaba embarazada, de unos 5 o 6 meses. ¡Nadie en la familia lo sospechaba! Ni ella ni yo nos hab铆amos dado cuenta. El personal sanitario me dijo que su enfermedad se deb铆a al embarazo. Ahora su condici贸n ha mejorado y est谩 despierta. A partir de ahora vendr谩 aqu铆 para sus consultas prenatales".

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