"Personas encerradas en celdas infestadas con ratas y cucarachas. Una gran cantidad de reclusos disponen solamente de un metro cuadrado de espacio, algunos durmiendo sin colchones, en cemento o camas met谩licas, otros no cuentan con acceso a luz artificial, con instalaciones el茅ctricas y sanitarias rotas, sin acceso a los ba帽os durante la noche, y en casos extremos, sin acceso a la luz del sol durante per铆odos de hasta seis meses".
Tras visitar el pa铆s, un relator de la ONU asegura que existe una masificaci贸n de las c谩rceles, donde muchos reclusos est谩n encerrados en celdas de un metro cuadrado, infestadas de ratas y cucarachas y en las que no hay colchones para dormir. Por todo ello, el experto insta a las autoridades argentinas a mejorar las condiciones de vida de las personas presas.
El relator especial de la ONU sobre la Tortura se帽ala en una declaraci贸n que Argentina “ha recorrido un largo camino en el abordaje de su pasado” y destaca que “desde el juicio a las Juntas en 1985, hasta los veredictos en la causa de ´los vuelos de la muerte´ el a帽o pasado, la sociedad argentina ha ganado muchas batallas contra la impunidad, y con coraje ha defendido la democracia, la rendici贸n de cuentas y la dignidad humana·.
No obstante, Nils Melzer asegura que a煤n queda mucho por hacer a fin de evitar la impunidad de los cr铆menes cometidos durante la 煤ltima dictadura, con el fin de asegurar verdad, justicia, y reparaci贸n para las v铆ctimas y sus familias.
M谩s all谩 del pasado
“Sin embargo, a la sombra de estos logros ejemplares, sobreviven algunos remanentes estructurales, culturales e institucionales del pasado, que a煤n se encuentran enquistados en los sistemas penitenciarios y de seguridad del pa铆s”, expresa Melzer.
El relator se帽ala que a lo largo y ancho del pa铆s parece haber un endurecimiento de la pol铆tica penal, en respuesta a las inquietudes populares en relaci贸n con el delito violento y la seguridad p煤blica, lo que produce un incremento en los niveles de reclusi贸n y un deterioro dram谩tico de las condiciones de detenci贸n.
“Aun cuando aprecio genuinamente el sistema sofisticado de salvaguardas y mecanismos existentes para prevenir la tortura, asegurar condiciones adecuadas de detenci贸n y la dedicaci贸n personal de innumerables funcionarios/as en todos los niveles, la realidad es que dichas salvaguardas no han sido suficientemente traducidas en resultados pr谩cticos”, a帽ade el relator.
Sobrepoblaci贸n de los centros penitenciarios
Las c谩rceles y comisar铆as de Argentina se encuentran cr贸nicamente sobrepobladas, y las condiciones en varios lugares de detenci贸n son claramente incompatibles con la dignidad humana.
“Aunque existen diferencias importantes entre las diversas instituciones, me sorprende realmente que, en algunos lugares, las personas privadas de libertad se encuentran encerradas en celdas infestadas con ratas y cucarachas. Una gran cantidad de reclusos disponen solamente de un metro cuadrado de espacio, algunos durmiendo sin colchones, en cemento o camas met谩licas, otros no cuentan con acceso a luz artificial, con instalaciones el茅ctricas y sanitarias rotas, sin acceso a los ba帽os durante la noche, y en casos extremos, sin acceso a la luz del sol durante per铆odos de hasta seis meses”, observa el experto.
Adem谩s, en varios lugares, las personas detenidas se ven privadas de nutrici贸n, higiene y salud adecuada o reportaron haber estado expuestas a violencia o corrupci贸n por parte de otros reclusos y agentes penitenciarios.
Adolescentes y enfermos
El relator tambi茅n expres贸 su preocupaci贸n ante el hecho de que adolescentes privados de libertad residen en condiciones de seguridad excesivamente duras. Por otro lado, algunos pacientes psiqui谩tricos est谩n institucionalizados en condiciones completamente inaceptables.
“Mi opini贸n ponderada es que al permitir que esta situaci贸n surja, contin煤e y se exacerbe, a pesar de los reiterados pedidos por parte de la sociedad civil y los mecanismos internacionales, la Argentina ha pasado a ser responsable de una generalizada y persistente violaci贸n de la Convenci贸n contra la Tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes.”
Melzer sostiene que “no existe justificaci贸n alguna, sea econ贸mica, pol铆tica, legal o de otra 铆ndole, para exponer a seres humanos a condiciones tan intolerables”.
El experto se帽ala que tambi茅n ha recibido numerosas denuncias sobre el uso excesivo de la fuerza durante las manifestaciones, y sobre acoso, corrupci贸n y violencia policial arbitraria durante las requisas, los desalojos y arrestos.
“Algunas v铆ctimas alegaron haber recibido tiros, cachetazos, patadas, amenazas con armas de fuego, y haber sido sofocadas con bolsas pl谩sticas”, afirma.
“Estos abusos parecen estar dirigidos principalmente a los sectores marginados de la sociedad como, por ejemplo, los habitantes de los barrios m谩s carenciados, migrantes afrodescendientes, pueblos ind铆genas y minor铆as sexuales, entre otros”, agrega.
Violencia sin investigar
Esta violencia institucional no parece ser efectivamente investigada en la pr谩ctica, de acuerdo con el relator que insta urgentemente a las autoridades argentinas en todos sus niveles y poderes, a comprometer los recursos necesarios para mejorar las condiciones de detenci贸n en el pa铆s.
Medidas urgentes
El relator insta a las autoridades del pa铆s a tomar una serie de medidas urgentes:
A los jueces:
Evitar todo ingreso innecesario de internos en el sistema de detenci贸n existente
Facilitar su liberaci贸n o la implementaci贸n de medidas alternativas para cualquier recluso cuya detenci贸n no sea imprescindible.
Al parlamento
Brindar los fundamentos legales para permitir el alivio de la presi贸n que se ejerce sobre el sistema de detenci贸n
Al Ejecutivo
Prevenir y sancionar todo acto de corrupci贸n, extorsi贸n o maltrato por parte de los agentes penitenciarios o fuerzas de seguridad.
“En las 煤ltimas tres d茅cadas, se ha comprobado en repetidas ocasiones que la sociedad argentina ha sido capaz de expresarse contra la violencia, la tortura y el abuso. Hoy insto al pueblo argentino a honrar esa promesa en nombre de la humanidad.”
En marzo de 2019, el relator especial presentar谩 ante el Consejo de Derechos Humanos, un informe sobre el pa铆s con sus observaciones y recomendaciones.
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Penal de Marcos Paz |
El relator especial de la ONU sobre la Tortura se帽ala en una declaraci贸n que Argentina “ha recorrido un largo camino en el abordaje de su pasado” y destaca que “desde el juicio a las Juntas en 1985, hasta los veredictos en la causa de ´los vuelos de la muerte´ el a帽o pasado, la sociedad argentina ha ganado muchas batallas contra la impunidad, y con coraje ha defendido la democracia, la rendici贸n de cuentas y la dignidad humana·.
No obstante, Nils Melzer asegura que a煤n queda mucho por hacer a fin de evitar la impunidad de los cr铆menes cometidos durante la 煤ltima dictadura, con el fin de asegurar verdad, justicia, y reparaci贸n para las v铆ctimas y sus familias.
M谩s all谩 del pasado
“Sin embargo, a la sombra de estos logros ejemplares, sobreviven algunos remanentes estructurales, culturales e institucionales del pasado, que a煤n se encuentran enquistados en los sistemas penitenciarios y de seguridad del pa铆s”, expresa Melzer.
El relator se帽ala que a lo largo y ancho del pa铆s parece haber un endurecimiento de la pol铆tica penal, en respuesta a las inquietudes populares en relaci贸n con el delito violento y la seguridad p煤blica, lo que produce un incremento en los niveles de reclusi贸n y un deterioro dram谩tico de las condiciones de detenci贸n.
“Aun cuando aprecio genuinamente el sistema sofisticado de salvaguardas y mecanismos existentes para prevenir la tortura, asegurar condiciones adecuadas de detenci贸n y la dedicaci贸n personal de innumerables funcionarios/as en todos los niveles, la realidad es que dichas salvaguardas no han sido suficientemente traducidas en resultados pr谩cticos”, a帽ade el relator.
Sobrepoblaci贸n de los centros penitenciarios
Las c谩rceles y comisar铆as de Argentina se encuentran cr贸nicamente sobrepobladas, y las condiciones en varios lugares de detenci贸n son claramente incompatibles con la dignidad humana.
“Aunque existen diferencias importantes entre las diversas instituciones, me sorprende realmente que, en algunos lugares, las personas privadas de libertad se encuentran encerradas en celdas infestadas con ratas y cucarachas. Una gran cantidad de reclusos disponen solamente de un metro cuadrado de espacio, algunos durmiendo sin colchones, en cemento o camas met谩licas, otros no cuentan con acceso a luz artificial, con instalaciones el茅ctricas y sanitarias rotas, sin acceso a los ba帽os durante la noche, y en casos extremos, sin acceso a la luz del sol durante per铆odos de hasta seis meses”, observa el experto.
Adem谩s, en varios lugares, las personas detenidas se ven privadas de nutrici贸n, higiene y salud adecuada o reportaron haber estado expuestas a violencia o corrupci贸n por parte de otros reclusos y agentes penitenciarios.
Adolescentes y enfermos
El relator tambi茅n expres贸 su preocupaci贸n ante el hecho de que adolescentes privados de libertad residen en condiciones de seguridad excesivamente duras. Por otro lado, algunos pacientes psiqui谩tricos est谩n institucionalizados en condiciones completamente inaceptables.
“Mi opini贸n ponderada es que al permitir que esta situaci贸n surja, contin煤e y se exacerbe, a pesar de los reiterados pedidos por parte de la sociedad civil y los mecanismos internacionales, la Argentina ha pasado a ser responsable de una generalizada y persistente violaci贸n de la Convenci贸n contra la Tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes.”
Melzer sostiene que “no existe justificaci贸n alguna, sea econ贸mica, pol铆tica, legal o de otra 铆ndole, para exponer a seres humanos a condiciones tan intolerables”.
El experto se帽ala que tambi茅n ha recibido numerosas denuncias sobre el uso excesivo de la fuerza durante las manifestaciones, y sobre acoso, corrupci贸n y violencia policial arbitraria durante las requisas, los desalojos y arrestos.
“Algunas v铆ctimas alegaron haber recibido tiros, cachetazos, patadas, amenazas con armas de fuego, y haber sido sofocadas con bolsas pl谩sticas”, afirma.
“Estos abusos parecen estar dirigidos principalmente a los sectores marginados de la sociedad como, por ejemplo, los habitantes de los barrios m谩s carenciados, migrantes afrodescendientes, pueblos ind铆genas y minor铆as sexuales, entre otros”, agrega.
Violencia sin investigar
Esta violencia institucional no parece ser efectivamente investigada en la pr谩ctica, de acuerdo con el relator que insta urgentemente a las autoridades argentinas en todos sus niveles y poderes, a comprometer los recursos necesarios para mejorar las condiciones de detenci贸n en el pa铆s.
Medidas urgentes
El relator insta a las autoridades del pa铆s a tomar una serie de medidas urgentes:
A los jueces:
Evitar todo ingreso innecesario de internos en el sistema de detenci贸n existente
Facilitar su liberaci贸n o la implementaci贸n de medidas alternativas para cualquier recluso cuya detenci贸n no sea imprescindible.
Al parlamento
Brindar los fundamentos legales para permitir el alivio de la presi贸n que se ejerce sobre el sistema de detenci贸n
Al Ejecutivo
Prevenir y sancionar todo acto de corrupci贸n, extorsi贸n o maltrato por parte de los agentes penitenciarios o fuerzas de seguridad.
“En las 煤ltimas tres d茅cadas, se ha comprobado en repetidas ocasiones que la sociedad argentina ha sido capaz de expresarse contra la violencia, la tortura y el abuso. Hoy insto al pueblo argentino a honrar esa promesa en nombre de la humanidad.”
En marzo de 2019, el relator especial presentar谩 ante el Consejo de Derechos Humanos, un informe sobre el pa铆s con sus observaciones y recomendaciones.