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135 años del nacimiento de Ortega y Gasset


Este miércoles se cumplen 135 años del nacimiento de José Ortega y Gasset, uno de los filósofos e intelectuales españoles más influyentes en la primera mitad del siglo XX.

 Ortega y Gasset, en la Ciudad Universitaria de Madrid en 1934


Ortega comenzó sus estudios de Filosofía y Derecho de manera simultánea en 1897, sin embargo, no llegó a acabar Derecho, una carrera que inició por indicaciones de su padre con la intención de poder entrar en política.

Esto no hizo que dejara de posicionarse ideológicamente ni impidió que entrara en la vida política del país. Mostró su deseo de europeizar España apostando por la ciencia y expresó su preocupación por el concepto de 'nación' de España. Decía que España como nación no existía y que lo que necesitaba el país era un proyecto de convivencia de futuro para que el término pudiera tener sentido. Llegó a ser ministro durante la monarquía de Amadeo de Saboya y diputado en las Cortes Constituyentes de 1931 en el partido Agrupación al Servicio de la República

En cuanto a su pensamiento, Ortega llamó a su corriente filosófica 'racio-vitalismo' ya que estaba en contra del vitalismo puro por ser "irracional" y de los excesos "antivitales" del racionalismo. Por tanto, según el filósofo, la realidad solo puede conocerse mediante la razón vital y la razón histórica.

Ortega y Gasset murió en 1955 en Madrid, la ciudad donde nació, y vio en sus últimos años el éxito internacional que había tenido su obra llegando a dar conferencias en Estados Unidos, Italia, Portugal o Alemania.

Biografía


Nació en una familia madrileña acomodada perteneciente al círculo de la alta burguesía de la capital. Era hijo de José Ortega Munilla y de Dolores Gasset Chinchilla.​ Entre 1891 y 1897 estudió primero en el Instituto Gaona y, más tarde, en el Colegio San Estanislao de Kostka de la Compañía de Jesús, ambos en Málaga. Su abuelo materno, Eduardo Gasset y Artime, había fundado el periódico El Imparcial, que después pasaría a dirigir su padre. Así, cabe destacar que Ortega y Gasset se crio en un ambiente culto, muy vinculado al mundo del periodismo y la política.

Su etapa universitaria comienza con su incorporación a los estudios de la Universidad de Deusto en Bilbao (1897-1898) y prosigue en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Central de Madrid (1898-1904).

Doctor en Filosofía de la Universidad de Madrid (1904) con su obra Los terrores del año mil. Crítica de una leyenda. Entre 1905 y 1907 realizó estudios en Alemania: Leipzig, Núremberg, Colonia, Berlín y, sobre todo, Marburgo. En esta última, se vio influido por el neokantismo de Hermann Cohen y Paul Natorp, entre otros.

De regreso a España es nombrado profesor numerario de psicología, lógica y ética de la Escuela Superior de Magisterio de Madrid (1909), y en octubre de 1910 gana por oposición la cátedra de metafísica de la Universidad Central, vacante tras el fallecimiento de Nicolás Salmerón.

En 1910 se casa con Rosa Spottorno (1884-1980). En 1911 nació su primer hijo, Miguel Ortega Spottorno, quien será médico. En el año 1914 nace en Madrid su hija, Soledad Ortega Spottorno, quien en 1978 creó la Fundación José Ortega y Gasset, de la que será su presidenta de honor. En 1916 nació su hijo José Ortega Spottorno, que fue ingenieroagrónomo y fundador del periódico El País.

Ortega y Gasset (Nuevo Mundo, 1920)

Fue el primer director del semanario España, en 1915, y colaborador del diario El Sol desde su fundación en 1917, donde publica bajo la forma de folletones dos obras importantes: España invertebrada y La rebelión de las masas. En 1923 funda la Revista de Occidente, siendo su director hasta 1936. Desde esta publicación promoverá la traducción y comentario de las más importantes tendencias filosóficas y científicas en nombres tales como: Oswald Spengler, Johan Huizinga, Edmund Husserl, Georg Simmel, Jakob von Uexküll, Heinz Heimsoeth, Franz Brentano, Hans Driesch, Ernst Müller, Alexander Pfänder, Bertrand Russell y otros.​


Ortega y Gasset funda la Escuela de Madrid, a partir del 15 de noviembre de 1910 cuando consigue su cátedra universitaria en filosofía, y como comenta José Gaos, a través de la coordinación espiritual de varias personas vinculadas a Ortega, en centros editoriales que había fundado o a los que aconsejaba el mismo Ortega.​ Mantiene un caudaloso epistolario con María de Maeztu, Fernando Vela (secretario de la Revista de Occidente), José Martínez Ruiz "Azorín", Francisco Giner de los Ríos, Miguel de Unamuno, Pío Baroja y otros muchos.​ En ese periodo también crea su tertulia en el café Granja El Henar.


Durante la II República es elegido diputado por la provincia de León con la Agrupación al Servicio de la República. En el debate de totalidad del proyecto de la Comisión de Constitución celebrado entre los días 27 de agosto y 9 de septiembre de 1931 intervino como portavoz del grupo parlamentario de la Agrupación para decir que «nuestro grupo siente una alta estimación por el proyecto que esa Comisión ha redactado» («hay en este proyecto auténtico pensamiento democrático, sentido de responsabilidad democrática», añadirá más adelante) pero advirtiendo a continuación que «esa tan certera Constitución ha sido mechada con unos cuantos cartuchos detonantes, introducidos arbitrariamente por el espíritu de propaganda o por la incontinencia del utopismo». Entre esos «cartuchos detonantes» destacó dos, la forma como se había resuelto la cuestión regional («Si la Constitución crea desde luego la organización de España en regiones, ya no será la España una, quien se encuentre frente a frente de dos o tres regiones indóciles, sino que serán las regiones entre sí quienes se enfrenten, pudiendo de esta suerte cernirse majestuoso sobre sus diferencias el Poder nacional, integral, estatal y único soberano. Contemplad la diferencia de una solución y de otra») y la cuestión religiosa («el artículo donde la Constitución legisla sobre la Iglesia» le parece «de gran improcedencia») propugnando en su lugar «que la Iglesia, en la Constitución, aparezca situada en una forma algo parecida a lo que los juristas llaman una Corporación de Derecho público que permita al Estado conservar jurisdicción sobre su temporalidad»).

Permaneció en el escaño durante un año, tras criticar públicamente el curso que la República tomaba en su célebre discurso conocido como «Rectificación de la República» de diciembre de 1931.

José Ortega y Gasset alrededor de 1950.

Cuando comenzó la Guerra Civil Española en julio de 1936, Ortega se hallaba enfermo en su domicilio; apenas tres días tras el comienzo de la contienda, se presentaron en su domicilio varios comunistas armados de pistolas que exigieron su firma al pie de un manifiesto contra el Golpe de Estado y en favor del Gobierno republicano. Ortega se negó a recibirlos y fue su hija la que en una conversación con ellos —conversación que, como ella misma relató más tarde, llegó a ser muy tensa—, consiguió convencerlos de redactar otro texto muy corto y menos politizado y que, efectivamente, acabó siendo firmado por Ortega, junto con Gregorio Marañón, Ramón Pérez de Ayala y otros intelectuales. En su artículo En cuanto al pacifismo, escrito ya en el exilio, se refiere Ortega a este episodio. En ese mismo mes de julio y a pesar de su grave enfermedad, huyó de España (lo que consiguió gracias a la protección de su hermano Eduardo, persona de valimiento cerca de diversos grupos políticos de izquierda) y se exilió; primero en París, luego en los Países Bajos y Argentina, hasta que en 1942 fijó su residencia en Lisboa. A partir de 1945 su presencia en España fue frecuente, pero habiéndosele impedido recuperar su cátedra (aunque al parecer consiguió cobrar sus sueldos atrasados), optó por fundar un «Instituto de Humanidades» donde impartía sus lecciones. Durante estos años, y hasta su muerte en 1955, fue fuera de España —sobre todo en Alemania—, donde recibió el crédito y las oportunidades de expresión que correspondían a su prestigio.

Ortega y Gasset ejerció una gran influencia en la filosofía española del siglo XX no solo por la temática de su obra filosófica, sino también por su estilo literario ágil, descrito por algunos como próximo al Quijote, que le permitió llegar fácilmente al público general.

Falleció el 18 de octubre de 1955 en su domicilio del número 28 de la madrileña calle del Monte Esquinza​. Según se sugiere en una carta de la catedrática y escritora Carmen Castro al padre Donostia.​, murió reconciliado con la Iglesia, aunque esta versión de los últimos momentos del filósofo ha sido desmentida de forma rotunda por su familia, como su nieto Andrés Ortega Klein, quien la considera un «bulo» propagado «por la prensa nacional-católica».





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