Despu茅s de una traves铆a que puede durar d铆as, semanas o hasta meses, o铆r la voz de un familiar cercano y querido representa un aliento, aunque sea a cientos o miles de kil贸metros de distancia.

Los migrantes llegan al en el puesto de recepci贸n y orientaci贸n para regularizaci贸n migratoria en Pacaraima, cercano a la frontera, y tienen la oportunidad de hablar por tel茅fono con sus familiares. Muchos no tienen tel茅fono, y para quienes tienen, el costo de las llamadas es muy alto. El servicio del CICR es gratuito. Foto: S.Lefcovich/CICR
Despu茅s de una traves铆a que puede durar d铆as, semanas o hasta meses, o铆r la voz de un familiar cercano y querido representa un aliento, aunque sea a cientos o miles de kil贸metros de distancia.
El llanto, la alegr铆a, la nostalgia, los sue帽os y las expectativas se combinan en conversaciones colmadas de emoci贸n. Algunas llamadas tambi茅n procuran resolver necesidades inmediatas, como la falta de documentos.

Foto: S. Lefcovich/CICR
Lorena H., de 39 a帽os de edad, dej贸 sus cinco hijos al cuidado de su madre y abuela de los ni帽os, y parti贸 con su marido hace ocho meses. En el puesto del CICR en Pacaraima, en la frontera de Brasil con Venezuela, consigui贸 hablar con su hijo de 13 a帽os de edad. Emocionada, cont贸 que extra帽aba mucho a su familia porque nunca se hab铆a separado de sus hijos. El ni帽o estaba asombrado al saber que su madre hab铆a llegado tan lejos, hasta Brasil. "Fue hermoso volver a escuchar a mi hijo porque hac铆a meses que no hablaba con 茅l", dijo.
Desde el mes de julio, cuando el CICR inici贸 el programa de restablecimiento del contacto entre familiares (RCF) en Pacaraima, se facilitaron m谩s de 20 mil llamados de migrantes a sus familiares. El promedio en octubre alcanz贸 400 llamadas por d铆a. A partir de septiembre, adem谩s de ofrecer el servicio en tres lugares de esa ciudad fronteriza, existe un puesto en Boa Vista, capital del Estado de Roraima, en el norte de Brasil.
Teresa R., de 19 a帽os de edad, es una de las 18 colaboradoras del CICR en el programa de RCF. "Es muy lindo poder ayudar a las personas de esta forma", afirma Teresa, que lleg贸 a Roraima en abril. "Se comunican con sus familiares y para m铆 eso es lo mejor del mundo", completa, con una sonrisa de satisfacci贸n.

"Es muy lindo ayudar a las personas de esta forma", dice Teresa. Ella atiende a los migrantes que acuden al puesto de priorizaci贸n (triage) en Boa Vista, donde pueden utilizar los servicios de RCF.
Los puestos de priorizaci贸n ofrecen servicios como solicitud de refugio, residencia temporaria, emisi贸n de registro de identificaci贸n fiscal, libreta de trabajo y vacunaci贸n. Foto: S.Lefcovich/CICR.
El servicio de RCF para migrantes incluye el uso gratuito del tel茅fono durante 3 minutos, de internet para llamadas por WhatsApp o Facebook y energ铆a para cargar la bater铆a del celular. "Muchos migrantes llegan a Brasil sin dispositivos ni l铆neas de tel茅fono o sin paquetes de datos que permitan hacer llamadas o contactos internacionales", explica Fernando Fornaris, jefe de la oficina del CICR en Boa Vista. El CICR tambi茅n difunde mensajes para prevenir la separaci贸n familiar a fin de que los migrantes sepan c贸mo mantener contacto con sus familiares.
No siempre es f谩cil establecer contacto. Luis F. M., que atiende a los migrantes junto con dos colegas, cuenta que 82 de las 102 llamadas que se realizaron en su turno –de 9 a 12.45– resultaron exitosas. Omar A., de 18 a帽os de edad, logr贸 conversar con su hermana. Quer铆a hablar con su madre, pero no fue posible.
En Pacaraima, el servicio de RCF se ofrece en el puesto de identificaci贸n –el primer lugar de acceso de los migrantes a Brasil– y en el puesto de priorizaci贸n (triage) o regularizaci贸n migratoria. Tambi茅n existe una unidad m贸vil que visita una vez a la semana el albergue ind铆gena "Janokoida", donde se refugian migrantes de la etnia Warao.
Amarilis F. es una de las colaboradoras que recibe a los migrantes en Pacaraima, ciudad donde vive hace m谩s de dos a帽os. "Hoy recib铆 un caso de un padre que no lograba localizar a su hija desde hac铆a tres d铆as. Pero finalmente lo logramos. Estaba muy contento y yo tambi茅n".

"¡Abuelita, tienes que dejar de fumar!" incluso de lejos, Dheret se preocupa con su abuela en Venezuela. En nuestro puesto en Pacaraima confirm贸 que estaba todo bien en casa. Foto: F.Fornaris/CICR
A Ezequiel C. tambi茅n le gusta ayudar a que las personas se comuniquen con sus familiares despu茅s de varios d铆as de viaje. "Les agradezco a estas personas porque expresan la gratitud que sienten por nuestro trabajo. Estamos aqu铆 para prestar un servicio y quiero seguir as铆", resume.

Los migrantes llegan al en el puesto de recepci贸n y orientaci贸n para regularizaci贸n migratoria en Pacaraima, cercano a la frontera, y tienen la oportunidad de hablar por tel茅fono con sus familiares. Muchos no tienen tel茅fono, y para quienes tienen, el costo de las llamadas es muy alto. El servicio del CICR es gratuito. Foto: S.Lefcovich/CICR
Despu茅s de una traves铆a que puede durar d铆as, semanas o hasta meses, o铆r la voz de un familiar cercano y querido representa un aliento, aunque sea a cientos o miles de kil贸metros de distancia.
El llanto, la alegr铆a, la nostalgia, los sue帽os y las expectativas se combinan en conversaciones colmadas de emoci贸n. Algunas llamadas tambi茅n procuran resolver necesidades inmediatas, como la falta de documentos.

Foto: S. Lefcovich/CICR
Lorena H., de 39 a帽os de edad, dej贸 sus cinco hijos al cuidado de su madre y abuela de los ni帽os, y parti贸 con su marido hace ocho meses. En el puesto del CICR en Pacaraima, en la frontera de Brasil con Venezuela, consigui贸 hablar con su hijo de 13 a帽os de edad. Emocionada, cont贸 que extra帽aba mucho a su familia porque nunca se hab铆a separado de sus hijos. El ni帽o estaba asombrado al saber que su madre hab铆a llegado tan lejos, hasta Brasil. "Fue hermoso volver a escuchar a mi hijo porque hac铆a meses que no hablaba con 茅l", dijo.
Desde el mes de julio, cuando el CICR inici贸 el programa de restablecimiento del contacto entre familiares (RCF) en Pacaraima, se facilitaron m谩s de 20 mil llamados de migrantes a sus familiares. El promedio en octubre alcanz贸 400 llamadas por d铆a. A partir de septiembre, adem谩s de ofrecer el servicio en tres lugares de esa ciudad fronteriza, existe un puesto en Boa Vista, capital del Estado de Roraima, en el norte de Brasil.
Teresa R., de 19 a帽os de edad, es una de las 18 colaboradoras del CICR en el programa de RCF. "Es muy lindo poder ayudar a las personas de esta forma", afirma Teresa, que lleg贸 a Roraima en abril. "Se comunican con sus familiares y para m铆 eso es lo mejor del mundo", completa, con una sonrisa de satisfacci贸n.

"Es muy lindo ayudar a las personas de esta forma", dice Teresa. Ella atiende a los migrantes que acuden al puesto de priorizaci贸n (triage) en Boa Vista, donde pueden utilizar los servicios de RCF.
Los puestos de priorizaci贸n ofrecen servicios como solicitud de refugio, residencia temporaria, emisi贸n de registro de identificaci贸n fiscal, libreta de trabajo y vacunaci贸n. Foto: S.Lefcovich/CICR.
El servicio de RCF para migrantes incluye el uso gratuito del tel茅fono durante 3 minutos, de internet para llamadas por WhatsApp o Facebook y energ铆a para cargar la bater铆a del celular. "Muchos migrantes llegan a Brasil sin dispositivos ni l铆neas de tel茅fono o sin paquetes de datos que permitan hacer llamadas o contactos internacionales", explica Fernando Fornaris, jefe de la oficina del CICR en Boa Vista. El CICR tambi茅n difunde mensajes para prevenir la separaci贸n familiar a fin de que los migrantes sepan c贸mo mantener contacto con sus familiares.
No siempre es f谩cil establecer contacto. Luis F. M., que atiende a los migrantes junto con dos colegas, cuenta que 82 de las 102 llamadas que se realizaron en su turno –de 9 a 12.45– resultaron exitosas. Omar A., de 18 a帽os de edad, logr贸 conversar con su hermana. Quer铆a hablar con su madre, pero no fue posible.
En Pacaraima, el servicio de RCF se ofrece en el puesto de identificaci贸n –el primer lugar de acceso de los migrantes a Brasil– y en el puesto de priorizaci贸n (triage) o regularizaci贸n migratoria. Tambi茅n existe una unidad m贸vil que visita una vez a la semana el albergue ind铆gena "Janokoida", donde se refugian migrantes de la etnia Warao.
Amarilis F. es una de las colaboradoras que recibe a los migrantes en Pacaraima, ciudad donde vive hace m谩s de dos a帽os. "Hoy recib铆 un caso de un padre que no lograba localizar a su hija desde hac铆a tres d铆as. Pero finalmente lo logramos. Estaba muy contento y yo tambi茅n".

"¡Abuelita, tienes que dejar de fumar!" incluso de lejos, Dheret se preocupa con su abuela en Venezuela. En nuestro puesto en Pacaraima confirm贸 que estaba todo bien en casa. Foto: F.Fornaris/CICR
A Ezequiel C. tambi茅n le gusta ayudar a que las personas se comuniquen con sus familiares despu茅s de varios d铆as de viaje. "Les agradezco a estas personas porque expresan la gratitud que sienten por nuestro trabajo. Estamos aqu铆 para prestar un servicio y quiero seguir as铆", resume.