OPINI脫N de Ollantay Itzamn谩.- Thelma Cabrera, de 49 a帽os de edad, y Vicenta Jer贸nimo, de 47 a帽os, son dos mujeres, madres y abuelas, maya mam. Defensoras autodidactas, forjadas en las luchas de las comunidades en resistencia por la nacionalizaci贸n de la energ铆a el茅ctrica en Guatemala. Aut茅nticas guerreras de la luz, en un pa铆s bendecido por el sol tropical, pero sumido en una eterna tiran铆a de la oscuridad.
Ambas mujeres fueron y son los pilares fundamentales del movimiento social Comit茅 del Desarrollo Campesino (CODECA), pero con un perfil medi谩tico muy sutil.
Ahora, ambas como candidatas a la Presidencia y a Diputada, respectivamente, desde el Movimiento para la Liberaci贸n de los Pueblos (MLP), disputan el poder a los ricos, en un pa铆s pensado y organizado para el gobierno de varones blancos y ricos.
Conoc铆 a ambas defensoras en el a帽o 2012, desde entonces, las acompa帽茅 en el sendero luminoso de las resistencias comunitarias en defensa de sus territorios, y por la recuperaci贸n de sus bienes privatizados.
Ellas, junto a cientos de comunidades organizadas en resistencia, vejadas por empresas transnacionales, desde hace m谩s de una d茅cada gritan a voz en cuello: “La energ铆a el茅ctrica es un derecho humano fundamental. No una mercanc铆a. Nacionalizarla es nuestro deber”. Pero, en la Guatemala oficial pudo m谩s la estridente guerra medi谩tica contra este movimiento que los termin贸 desprestigiando, criminalizando, y asesinando a sus integrantes. Pero, jam谩s fueron derrotados.
Las distribuidoras de electricidad, ENERGUATE y EEGSA, junto a la fiscal铆a contra CODECA (contra el hurto de electricidad), enjuici贸 penalmente a Vicenta Jer贸nimo, por cuatro a帽os, por delitos de “instigaci贸n a delinquir”, “actividades contra la seguridad interna de la naci贸n”…. Pero, en 2018, fue absuelta, junto a otro defensor de derechos de CODECA. Vicenta organiz贸 a la mayor cantidad de comunidades actualmente en resistencia en los territorios del suroriente del pa铆s.
Thelma Cabrera, como Presidenta, dirigi贸 por varios a帽os al movimiento CODECA, en especial en la 茅poca m谩s dif铆cil de criminalizaci贸n y persecuci贸n que vivi贸 este movimiento, hasta convertirla en el movimiento ind铆gena campesino m谩s potente de alcance nacional. Con hidalgu铆a acompa帽贸 personalmente todos los entierros de defensores asesinados en los territorios. Jam谩s titube贸 en se帽alar p煤blicamente a los responsables de los asesinatos.
Ambas nacieron en la exclusi贸n socioecon贸mica y cultural. Pero a ambas la vida las convirti贸 en “piedras angulares” no s贸lo del movimiento CODECA-MLP, sino de la nueva Guatemala que quiere existir.
A ambas se las vio en las comunidades organizar asambleas formativas comiendo aguacate y tortillas. Recorriendo palmo a palmo el territorio nacional para motivar el ejercicio y defensa de derechos colectivos e individuales, como aut茅nticas “monjas guerreras” anunciando a los pueblos la esperada “liberaci贸n de la luz” en un pa铆s secuestrado, y en penumbras.
Si las circunstancias sociopol铆ticas neoliberales del pa铆s obligaron a CODECA a transitar de la agenda de la “incidencia pol铆tica” a la propuesta de un proceso Constituyente Popular y Plurinacional para crear el Estado Plurinacional, tambi茅n esas recargadas circunstancias hicieron de estas dos mujeres mayas unas valerosas “guerras de la luz” y “profetizas” del nuevo d铆a que anuncia su amanecer para los pueblos de Guatemala.
Ambas mujeres fueron y son los pilares fundamentales del movimiento social Comit茅 del Desarrollo Campesino (CODECA), pero con un perfil medi谩tico muy sutil.
Ahora, ambas como candidatas a la Presidencia y a Diputada, respectivamente, desde el Movimiento para la Liberaci贸n de los Pueblos (MLP), disputan el poder a los ricos, en un pa铆s pensado y organizado para el gobierno de varones blancos y ricos.
Conoc铆 a ambas defensoras en el a帽o 2012, desde entonces, las acompa帽茅 en el sendero luminoso de las resistencias comunitarias en defensa de sus territorios, y por la recuperaci贸n de sus bienes privatizados.
Ellas, junto a cientos de comunidades organizadas en resistencia, vejadas por empresas transnacionales, desde hace m谩s de una d茅cada gritan a voz en cuello: “La energ铆a el茅ctrica es un derecho humano fundamental. No una mercanc铆a. Nacionalizarla es nuestro deber”. Pero, en la Guatemala oficial pudo m谩s la estridente guerra medi谩tica contra este movimiento que los termin贸 desprestigiando, criminalizando, y asesinando a sus integrantes. Pero, jam谩s fueron derrotados.
Las distribuidoras de electricidad, ENERGUATE y EEGSA, junto a la fiscal铆a contra CODECA (contra el hurto de electricidad), enjuici贸 penalmente a Vicenta Jer贸nimo, por cuatro a帽os, por delitos de “instigaci贸n a delinquir”, “actividades contra la seguridad interna de la naci贸n”…. Pero, en 2018, fue absuelta, junto a otro defensor de derechos de CODECA. Vicenta organiz贸 a la mayor cantidad de comunidades actualmente en resistencia en los territorios del suroriente del pa铆s.
Thelma Cabrera, como Presidenta, dirigi贸 por varios a帽os al movimiento CODECA, en especial en la 茅poca m谩s dif铆cil de criminalizaci贸n y persecuci贸n que vivi贸 este movimiento, hasta convertirla en el movimiento ind铆gena campesino m谩s potente de alcance nacional. Con hidalgu铆a acompa帽贸 personalmente todos los entierros de defensores asesinados en los territorios. Jam谩s titube贸 en se帽alar p煤blicamente a los responsables de los asesinatos.
Ambas nacieron en la exclusi贸n socioecon贸mica y cultural. Pero a ambas la vida las convirti贸 en “piedras angulares” no s贸lo del movimiento CODECA-MLP, sino de la nueva Guatemala que quiere existir.
A ambas se las vio en las comunidades organizar asambleas formativas comiendo aguacate y tortillas. Recorriendo palmo a palmo el territorio nacional para motivar el ejercicio y defensa de derechos colectivos e individuales, como aut茅nticas “monjas guerreras” anunciando a los pueblos la esperada “liberaci贸n de la luz” en un pa铆s secuestrado, y en penumbras.
Si las circunstancias sociopol铆ticas neoliberales del pa铆s obligaron a CODECA a transitar de la agenda de la “incidencia pol铆tica” a la propuesta de un proceso Constituyente Popular y Plurinacional para crear el Estado Plurinacional, tambi茅n esas recargadas circunstancias hicieron de estas dos mujeres mayas unas valerosas “guerras de la luz” y “profetizas” del nuevo d铆a que anuncia su amanecer para los pueblos de Guatemala.
