La liturgia ha comenzado
Varias personas caminan junto a los carteles instalados en Ifema donde se celebra la COP25. EFE
Ra煤l Casado.- EFEverde.- El crono se ha detenido; la liturgia ha comenzado. Espa帽a ha luchado un mes contra el reloj para que arrancara hoy en Madrid la cumbre del clima, una de las citas de Naciones Unidas m谩s complejas, por su organizaci贸n y por su contenido.
COP25 en Madrid
Primer d铆a de cumbre. El estricto protocolo para agilizar la entrada de m谩s de cincuenta jefes de Estado y de Gobierno y de los principales organismos internacionales del mundo ha coincidido hoy las rigurosas medidas de seguridad ante el desembarco masivo de las miles de personas que integran las delegaciones oficiales de casi 200 pa铆ses.
La ma帽ana, g茅lida; pero tras los controles de acceso al recinto esperaba a los asistentes el tradicional chocolate con churros madrile帽o; con raz贸n las palabras m谩s repetidas durante la ma帽ana eran “calidez” y “hospitalidad” espa帽ola.
La pregunta m谩s recurrente al traspasar los rigurosos controles de seguridad casi siempre era la misma: “¿la wifi va con clave?”; hay que sincronizar los tel茅fonos, los ordenadores, las tabletas, y empezar a compartir documentos, correos, selfis, tuits y fotograf铆as, y el foco, hoy, estaba puesto en los l铆deres mundiales; no ha llegado todav铆a Greta.
Pr谩cticamente fortificado, el recinto ferial de Madrid se ha transformado en “territorio ONU” y toda la gesti贸n del recinto, incluida la seguridad, corresponde ya a Naciones Unidas, y por las instalaciones pululan etnias, razas y colores de los cinco continentes.
El protocolo y el boato propio de la ceremonia inaugural se ha mezclado hoy con los ecos del rodar de las maletas y los integrantes de las delegaciones agolpados frente a los “general map” para tratar de ubicarse y localizar su lugar en la COP.
Ifema
El recinto ferial de Madrid es hoy un lugar donde han proliferado los seis idiomas oficiales de la ONU (el ingl茅s, el espa帽ol, el 谩rabe, el chino, el franc茅s y el ruso), en el que abunda ya la est茅tica y la liturgia propia de las grandes conferencias mundiales, con sus galimat铆as, su jungla de siglas y su sopa de letras.
Galimat铆as porque casi todos los delegados se han familiarizado ya con la palabra COP25 (25 Conferencia de las Partes de la Convenci贸n de Cambio Clim谩tico de la ONU); pero es que adem谩s en Madrid se celebra el CM2 (la segunda sesi贸n de la Conferencia de las Partes del Acuerdo de Par铆s); el SBSTA51 (la 51 sesi贸n del 贸rgano subsidiario de Asesoramiento Cient铆fico y Tecnol贸gico); y hasta el CMP15 (la 15 Conferencia de las Partes de los firmantes del Protocolo de kioto).
¿Kioto?, Kioto, porque aunque puede parecer obsoleto, caduco o superado, ese protocolo, que fue el primer compromiso global para combatir el cambio clim谩tico y que sirvi贸 para que la sociedad se familiarizara con ese fen贸meno global, es todav铆a el que rige la lucha contra la crisis clim谩tica, antes de la plena entrada en vigor del Acuerdo de Par铆s el pr贸ximo a帽o.
La jerga clim谩tica propia de estas cumbres cunde ya en las instalaciones, y en sus discursos todos los l铆deres y representantes de las delegaciones oficiales hablan de los informes del IPCC (el ya popular grupo de cient铆ficos que asesora a la ONU en materia de cambio clim谩tico), de mercados de carbono, de mecanismos de desarrollo limpio o de las contribuciones nacionales o NDC.
Tambi茅n de c贸mo ayudar a los pa铆ses m谩s vulnerables -presentes tambi茅n en la cumbre- a hacer frente a los impactos clim谩ticos; de c贸mo afrontar una transici贸n econ贸mica y social que sea tambi茅n justa y equitativa en un futuro neutro en carbono donde las emisiones de gases de efecto invernadero sean “cero”.
Las soluciones son complejas y de ellas se debatir谩 en plenarios y m煤ltiples salas de reuniones, pero un “Pap谩 Noel” (canadiense) que visita todas las cumbres desde Par铆s (2015) aprovecha las fechas prenavide帽as para lanzar consejos sobre el consumo responsable y respetuoso con el medio ambiente.
Que es cumbre de la ONU, y que la mayor铆a de los participantes son extranjeros, lo demuestran las colas para comer, que se han comenzado a formar a partir ya de las 12.00 del mediod铆a, cuando muchos de los asistentes buscaban ya el sol en los pasillos exteriores del recinto ferial.
Doce d铆as para hablar de GEI (de gases de efecto invernadero), y del principal responsable del calentamiento, el ya maldito CO2 (di贸xido de carbono), pero sin olvidar el metano (CH4), el 贸xido nitroso (N2O), los hidrofluorocarbonos (HFC), los perfluorocarbonos (PFC), y el hexafluoruro de azufre (SF6).
Doce d铆as de jerga clim谩tica, de sopas de letras y de est茅tica cien por cien ONU. La liturgia ha comenzado. EFEverde
Especial informativo COP25 Madrid-Chile en EFEverde

Ra煤l Casado.- EFEverde.- El crono se ha detenido; la liturgia ha comenzado. Espa帽a ha luchado un mes contra el reloj para que arrancara hoy en Madrid la cumbre del clima, una de las citas de Naciones Unidas m谩s complejas, por su organizaci贸n y por su contenido.
COP25 en Madrid
Primer d铆a de cumbre. El estricto protocolo para agilizar la entrada de m谩s de cincuenta jefes de Estado y de Gobierno y de los principales organismos internacionales del mundo ha coincidido hoy las rigurosas medidas de seguridad ante el desembarco masivo de las miles de personas que integran las delegaciones oficiales de casi 200 pa铆ses.
La ma帽ana, g茅lida; pero tras los controles de acceso al recinto esperaba a los asistentes el tradicional chocolate con churros madrile帽o; con raz贸n las palabras m谩s repetidas durante la ma帽ana eran “calidez” y “hospitalidad” espa帽ola.
La pregunta m谩s recurrente al traspasar los rigurosos controles de seguridad casi siempre era la misma: “¿la wifi va con clave?”; hay que sincronizar los tel茅fonos, los ordenadores, las tabletas, y empezar a compartir documentos, correos, selfis, tuits y fotograf铆as, y el foco, hoy, estaba puesto en los l铆deres mundiales; no ha llegado todav铆a Greta.
Pr谩cticamente fortificado, el recinto ferial de Madrid se ha transformado en “territorio ONU” y toda la gesti贸n del recinto, incluida la seguridad, corresponde ya a Naciones Unidas, y por las instalaciones pululan etnias, razas y colores de los cinco continentes.
El protocolo y el boato propio de la ceremonia inaugural se ha mezclado hoy con los ecos del rodar de las maletas y los integrantes de las delegaciones agolpados frente a los “general map” para tratar de ubicarse y localizar su lugar en la COP.
Ifema
El recinto ferial de Madrid es hoy un lugar donde han proliferado los seis idiomas oficiales de la ONU (el ingl茅s, el espa帽ol, el 谩rabe, el chino, el franc茅s y el ruso), en el que abunda ya la est茅tica y la liturgia propia de las grandes conferencias mundiales, con sus galimat铆as, su jungla de siglas y su sopa de letras.
Galimat铆as porque casi todos los delegados se han familiarizado ya con la palabra COP25 (25 Conferencia de las Partes de la Convenci贸n de Cambio Clim谩tico de la ONU); pero es que adem谩s en Madrid se celebra el CM2 (la segunda sesi贸n de la Conferencia de las Partes del Acuerdo de Par铆s); el SBSTA51 (la 51 sesi贸n del 贸rgano subsidiario de Asesoramiento Cient铆fico y Tecnol贸gico); y hasta el CMP15 (la 15 Conferencia de las Partes de los firmantes del Protocolo de kioto).
¿Kioto?, Kioto, porque aunque puede parecer obsoleto, caduco o superado, ese protocolo, que fue el primer compromiso global para combatir el cambio clim谩tico y que sirvi贸 para que la sociedad se familiarizara con ese fen贸meno global, es todav铆a el que rige la lucha contra la crisis clim谩tica, antes de la plena entrada en vigor del Acuerdo de Par铆s el pr贸ximo a帽o.
La jerga clim谩tica propia de estas cumbres cunde ya en las instalaciones, y en sus discursos todos los l铆deres y representantes de las delegaciones oficiales hablan de los informes del IPCC (el ya popular grupo de cient铆ficos que asesora a la ONU en materia de cambio clim谩tico), de mercados de carbono, de mecanismos de desarrollo limpio o de las contribuciones nacionales o NDC.
Tambi茅n de c贸mo ayudar a los pa铆ses m谩s vulnerables -presentes tambi茅n en la cumbre- a hacer frente a los impactos clim谩ticos; de c贸mo afrontar una transici贸n econ贸mica y social que sea tambi茅n justa y equitativa en un futuro neutro en carbono donde las emisiones de gases de efecto invernadero sean “cero”.
Las soluciones son complejas y de ellas se debatir谩 en plenarios y m煤ltiples salas de reuniones, pero un “Pap谩 Noel” (canadiense) que visita todas las cumbres desde Par铆s (2015) aprovecha las fechas prenavide帽as para lanzar consejos sobre el consumo responsable y respetuoso con el medio ambiente.
Que es cumbre de la ONU, y que la mayor铆a de los participantes son extranjeros, lo demuestran las colas para comer, que se han comenzado a formar a partir ya de las 12.00 del mediod铆a, cuando muchos de los asistentes buscaban ya el sol en los pasillos exteriores del recinto ferial.
Doce d铆as para hablar de GEI (de gases de efecto invernadero), y del principal responsable del calentamiento, el ya maldito CO2 (di贸xido de carbono), pero sin olvidar el metano (CH4), el 贸xido nitroso (N2O), los hidrofluorocarbonos (HFC), los perfluorocarbonos (PFC), y el hexafluoruro de azufre (SF6).
Doce d铆as de jerga clim谩tica, de sopas de letras y de est茅tica cien por cien ONU. La liturgia ha comenzado. EFEverde
Especial informativo COP25 Madrid-Chile en EFEverde