OPINI脫N de Eduardo Madro帽al
La r谩pida expansi贸n del virus tristemente conocido como Covid-19 ha supuesto para Espa帽a, y para el resto del mundo, una grav铆sima crisis sanitaria, pero adem谩s conlleva una crisis econ贸mica y social de enorme e incierta magnitud, pero con seguridad de consecuencias devastadoras. Espa帽a ya ha perdido 900.000 empleos desde la activaci贸n del Estado de Alarma. El FMI ya prev茅 una ca铆da del 8% del PIB para este a帽o, y las estimaciones hablan de una ca铆da de entre un 15% y un 20% del PIB para los pr贸ximos a帽os.
Se va a necesitar una inmensa cantidad de recursos financieros, tanto para resolver la emergencia sanitaria, como para atenuar las grav铆simas consecuencias que ha generado el par贸n de la actividad productiva. De hecho, el gobierno de Espa帽a ya ha previsto unos 200.000 millones de euros -un impresionante 20% del PIB-, pero otros c谩lculos de economistas de diversas tendencias lo elevan m谩s del doble, unos 250.000 millones de euros adicionales, el coste de la reconstrucci贸n econ贸mica tras el desastre sanitario.
Por lo que siendo realistas debemos considerar que para salir de esta crisis se necesitar谩n, al menos, medio bill贸n de euros. Pero, ¿hay recursos para que Espa帽a pueda salir de la crisis? ¿Hay o no dinero, y d贸nde? Y, sobre todo, ¿qui茅n va a pagar la factura? El problema clave reside en que las respuestas a estas preguntas no es una cuesti贸n t茅cnica, es una cuesti贸n pol铆tica. Es decir, no se puede responder sin una previa toma de partido. Porque las respuestas se contestan desde una posici贸n pol铆tica, se explicite o no.
Nosotros vamos a dejarla clara. ¿Cu谩l es la realidad? Que no partimos de cero. Venimos de una crisis financiera, la de 2008, que hemos pagado dolorosamente el 90% de la poblaci贸n. Una crisis de la que la inmensa mayor铆a todav铆a no nos hemos recuperado. Una crisis en la que hemos visto c贸mo nuestros salarios reales, pensiones y rentas han ca铆do -como poco- un 25%. Hemos sufrido recortes en educaci贸n y sanidad, que ahora han revelado todo su devastador da帽o. Hemos visto como la precariedad, la desigualdad y la destrucci贸n de derechos laborales se hac铆an permanentes en nuestras vidas.
Parece, nos dicen, que dicha crisis acab贸 a mediados de 2014. Y en 2015 se comenz贸 la recuperaci贸n econ贸mica. Pero eso no es verdad para amplias capas de la poblaci贸n, esa recuperaci贸n nunca ha llegado, o apenas lo ha hecho. En cambio, para bancos, oligopolios nacionales y extranjeros, para la oligarqu铆a financiera espa帽ola y las clases dominantes de los pa铆ses centros de poder mundial y europeo, estos cinco a帽os de recuperaci贸n han sido muy beneficiosos. De 2015 a 2019, el total de bancos y grandes empresas del Ibex35 gan贸 m谩s de 164.000 millones de euros, volviendo a tener tasas de ganancia comparables (cuando no superiores) a las de antes de la crisis de 2008.
Por supuesto, su recuperaci贸n econ贸mica no ha sido ni milagrosa ni fruto de su competitividad y eficiencia econ贸mica. Su recuperaci贸n se ha levantado sobre nuestras espaldas. Se ha levantado sobre los recortes, los desahucios y la pobreza energ茅tica. Se ha levantado sobre las reformas laborales de Zapatero y Rajoy, es decir, sobre los bajos salarios, la temporalidad y la precariedad establecidos, sobre los despidos a bajo coste, sobre el profundo deterioro de los mecanismos de negociaci贸n colectiva y los derechos laborales. Y se ha levantado a costa de recortar el sistema p煤blico de pensiones y el poder adquisitivo de los pensionistas.
Pero es tambi茅n una recuperaci贸n econ贸mica que esconde que las arcas p煤blicas se han endeudado de forma extraordinaria para rescatar a la banca, a las el茅ctricas, a las constructoras y las autopistas. Porque a la mayor铆a de los ciudadanos no han obligado a prestar una enorme cantidad de dinero p煤blico para socorrer a las entidades financieras en tiempos de necesidad. Y a pesar de los bancos y oligopolios han vuelto a tener beneficios, en lugar de devolver lo adeudado, nos han dicho que deb铆amos considerar como p茅rdida esa enorme cantidad de recursos p煤blicos.
Por eso, ahora, ante esta nueva y incalculable crisis, debemos exigir que la paguen ellos. Que la paguen los bancos y oligopolios, los oligarcas y las grandes fortunas. Es el momento de instarles a que nos devuelvan lo prestado, a que entreguen una parte de sus gigantescas ganancias para las necesidades de la inmensa mayor铆a social en Espa帽a. Porque el verdadero problema es si se redistribuye la riqueza o no.
Solo pedimos, para salir de esta crisis, una parte de sus beneficios actuales y retroactivos (solo desde 2015). No todos, solo, por ejemplo, el 25%. Es decir, apenas una cuarta parte. No exigimos que repartan todas sus riquezas. Porque la banca, los oligopolios nacionales y extranjeros tienen mucha, much铆sima m谩s riqueza acumulada en forma de capital y activos financieros. Solo un banco, el Santander, posee en activos financieros 1,3 billones de euros, m谩s que todo el PIB anual de Espa帽a. Y los activos financieros en manos de los 11 bancos espa帽oles triplican el PIB anual de nuestro pa铆s.
¿Por qu茅 el 25%? Bueno, en febrero de 2010, un tal Paul Krugman -Premio Nobel de Econom铆a 2008- sentenci贸 que “los espa帽oles deben comprender que han de rebajarse un 25% sus salarios”. Era -art铆culo de un conocido economista vinculado a Obama mediante- una orden del hegemonismo norteamericano, una se帽al p煤blica de lo que inmediatamente sucedi贸. A los tres meses Zapatero -despu茅s de la llamada de Obama- anunci贸 en el Congreso el inicio del dur铆simo plan de recortes del 25%.
¿Por qu茅 no aplicar la misma proporci贸n pero esta vez a la inversa? ¿Por qu茅 no aplicar un 25% de descuento a los beneficios olig谩rquicos nacionales y extranjeros? A continuaci贸n exponemos esquem谩ticamente las cuentas resultantes de aplicar ese 25% de reducci贸n a sus beneficios pero solo del periodo 2015-2019, y de sus ganancias hasta que dure la presente crisis.
Pero, antes de las cuentas, queremos destacar que la posici贸n previa, el hilo conductor, comparte y tiene en cuenta lo declarado por Rui Rio, presidente del conservador Partido Socialdem贸crata (PSD), la primera fuerza pol铆tica de la oposici贸n en Portugal similar al PP en Espa帽a, “si la banca presenta ganancias abultadas en 2020 y 2021 ser谩 una verg眉enza y una ingratitud para los portugueses”, y ha recomendando que las entidades financieras debieran tener beneficios cero en esos ejercicios para que las ganancias las dediquen a reinvertir en el pa铆s.
Tambi茅n hace unas semanas el Presidente de la Rep煤blica, el conservador Marcelo Rebelo de Sousa, presidente honor铆fico del PSD declar贸 que “cada portugu茅s contribuy贸 para hacer viables los bancos. En este momento, sabiendo que la banca est谩 estabilizada, es una ocasi贸n de retribuir a los portugueses lo que hicimos”. Y no olvidemos que el ya citado Rui Rio, presidente del conservador Partido Socialdem贸crata (PSD), dijo al primer ministro Costa, del Partido Socialista: “Todo lo que nosotros podamos, ayudaremos. Le deseo coraje, nervios de acero y mucha suerte. Su suerte es nuestra suerte”. As铆 como la carta remitida a los militantes de su partido, el PSD, en la que les avisa que cualquier ataque al Gobierno del socialista Ant贸nio Costa en estos momentos “no es patri贸tico” y les llama a promover la uni贸n del pa铆s.
Las cuentas en una primera aproximaci贸n para salir de esta crisis redistribuyendo la riqueza y siguiendo el criterio del 25% a los a帽os de su recuperaci贸n.
18.500 millones de euros de los beneficios de la banca.
25.125 millones de euros de los beneficios de los oligopolios del Ibex-35.
21.955 millones de euros del Impuesto de Sociedades y la lucha contra la evasi贸n fiscal.
10.000 millones euros de las grandes fortunas y Sicav.
8.755 millones de euros de los beneficios de la banca de los beneficios previstos de los pr贸ximos cuatro a帽os.
23.256 millones de euros de los beneficios de los monopolios del Ibex-35 del mismo periodo.
20.000 millones de euros de una reforma fiscal del Impuesto de Sociedades de igual periodo.
11.000 millones de euros de perseguir el fraude fiscal de bancos y oligopolios.
10.000 millones de euros de una Reforma fiscal progresiva en el IRPF.
25.000 millones de euros ahorrando un 25% de los gastos del Estado por los privilegios y gastos innecesarios, corrupci贸n y gastos superfluos de las administraciones p煤blicas.
28.000 millones de euros por la renegociaci贸n y moratoria de la deuda.
125.000 millones de euros de un fondo especial con los activos l铆quidos de calidad de la banca.
50.000 millones de euros de una Bankia p煤blica, porque es el momento de completar la nacionalizaci贸n de Bankia como germen de una gran banca p煤blica. Hay que paralizar y revertir la privatizaci贸n, poniendo al servicio de las necesidades del pa铆s sus recursos (Bankia tiene 208.500 millones en activos y 125.000 millones de dep贸sitos).
Total: 401.591 millones de euros.
La r谩pida expansi贸n del virus tristemente conocido como Covid-19 ha supuesto para Espa帽a, y para el resto del mundo, una grav铆sima crisis sanitaria, pero adem谩s conlleva una crisis econ贸mica y social de enorme e incierta magnitud, pero con seguridad de consecuencias devastadoras. Espa帽a ya ha perdido 900.000 empleos desde la activaci贸n del Estado de Alarma. El FMI ya prev茅 una ca铆da del 8% del PIB para este a帽o, y las estimaciones hablan de una ca铆da de entre un 15% y un 20% del PIB para los pr贸ximos a帽os.
Paul Krugman al rev茅s o el 25% a la inversa
Se va a necesitar una inmensa cantidad de recursos financieros, tanto para resolver la emergencia sanitaria, como para atenuar las grav铆simas consecuencias que ha generado el par贸n de la actividad productiva. De hecho, el gobierno de Espa帽a ya ha previsto unos 200.000 millones de euros -un impresionante 20% del PIB-, pero otros c谩lculos de economistas de diversas tendencias lo elevan m谩s del doble, unos 250.000 millones de euros adicionales, el coste de la reconstrucci贸n econ贸mica tras el desastre sanitario.
Por lo que siendo realistas debemos considerar que para salir de esta crisis se necesitar谩n, al menos, medio bill贸n de euros. Pero, ¿hay recursos para que Espa帽a pueda salir de la crisis? ¿Hay o no dinero, y d贸nde? Y, sobre todo, ¿qui茅n va a pagar la factura? El problema clave reside en que las respuestas a estas preguntas no es una cuesti贸n t茅cnica, es una cuesti贸n pol铆tica. Es decir, no se puede responder sin una previa toma de partido. Porque las respuestas se contestan desde una posici贸n pol铆tica, se explicite o no.
Nosotros vamos a dejarla clara. ¿Cu谩l es la realidad? Que no partimos de cero. Venimos de una crisis financiera, la de 2008, que hemos pagado dolorosamente el 90% de la poblaci贸n. Una crisis de la que la inmensa mayor铆a todav铆a no nos hemos recuperado. Una crisis en la que hemos visto c贸mo nuestros salarios reales, pensiones y rentas han ca铆do -como poco- un 25%. Hemos sufrido recortes en educaci贸n y sanidad, que ahora han revelado todo su devastador da帽o. Hemos visto como la precariedad, la desigualdad y la destrucci贸n de derechos laborales se hac铆an permanentes en nuestras vidas.
Parece, nos dicen, que dicha crisis acab贸 a mediados de 2014. Y en 2015 se comenz贸 la recuperaci贸n econ贸mica. Pero eso no es verdad para amplias capas de la poblaci贸n, esa recuperaci贸n nunca ha llegado, o apenas lo ha hecho. En cambio, para bancos, oligopolios nacionales y extranjeros, para la oligarqu铆a financiera espa帽ola y las clases dominantes de los pa铆ses centros de poder mundial y europeo, estos cinco a帽os de recuperaci贸n han sido muy beneficiosos. De 2015 a 2019, el total de bancos y grandes empresas del Ibex35 gan贸 m谩s de 164.000 millones de euros, volviendo a tener tasas de ganancia comparables (cuando no superiores) a las de antes de la crisis de 2008.
Por supuesto, su recuperaci贸n econ贸mica no ha sido ni milagrosa ni fruto de su competitividad y eficiencia econ贸mica. Su recuperaci贸n se ha levantado sobre nuestras espaldas. Se ha levantado sobre los recortes, los desahucios y la pobreza energ茅tica. Se ha levantado sobre las reformas laborales de Zapatero y Rajoy, es decir, sobre los bajos salarios, la temporalidad y la precariedad establecidos, sobre los despidos a bajo coste, sobre el profundo deterioro de los mecanismos de negociaci贸n colectiva y los derechos laborales. Y se ha levantado a costa de recortar el sistema p煤blico de pensiones y el poder adquisitivo de los pensionistas.
Pero es tambi茅n una recuperaci贸n econ贸mica que esconde que las arcas p煤blicas se han endeudado de forma extraordinaria para rescatar a la banca, a las el茅ctricas, a las constructoras y las autopistas. Porque a la mayor铆a de los ciudadanos no han obligado a prestar una enorme cantidad de dinero p煤blico para socorrer a las entidades financieras en tiempos de necesidad. Y a pesar de los bancos y oligopolios han vuelto a tener beneficios, en lugar de devolver lo adeudado, nos han dicho que deb铆amos considerar como p茅rdida esa enorme cantidad de recursos p煤blicos.
Por eso, ahora, ante esta nueva y incalculable crisis, debemos exigir que la paguen ellos. Que la paguen los bancos y oligopolios, los oligarcas y las grandes fortunas. Es el momento de instarles a que nos devuelvan lo prestado, a que entreguen una parte de sus gigantescas ganancias para las necesidades de la inmensa mayor铆a social en Espa帽a. Porque el verdadero problema es si se redistribuye la riqueza o no.
Solo pedimos, para salir de esta crisis, una parte de sus beneficios actuales y retroactivos (solo desde 2015). No todos, solo, por ejemplo, el 25%. Es decir, apenas una cuarta parte. No exigimos que repartan todas sus riquezas. Porque la banca, los oligopolios nacionales y extranjeros tienen mucha, much铆sima m谩s riqueza acumulada en forma de capital y activos financieros. Solo un banco, el Santander, posee en activos financieros 1,3 billones de euros, m谩s que todo el PIB anual de Espa帽a. Y los activos financieros en manos de los 11 bancos espa帽oles triplican el PIB anual de nuestro pa铆s.
¿Por qu茅 el 25%? Bueno, en febrero de 2010, un tal Paul Krugman -Premio Nobel de Econom铆a 2008- sentenci贸 que “los espa帽oles deben comprender que han de rebajarse un 25% sus salarios”. Era -art铆culo de un conocido economista vinculado a Obama mediante- una orden del hegemonismo norteamericano, una se帽al p煤blica de lo que inmediatamente sucedi贸. A los tres meses Zapatero -despu茅s de la llamada de Obama- anunci贸 en el Congreso el inicio del dur铆simo plan de recortes del 25%.
¿Por qu茅 no aplicar la misma proporci贸n pero esta vez a la inversa? ¿Por qu茅 no aplicar un 25% de descuento a los beneficios olig谩rquicos nacionales y extranjeros? A continuaci贸n exponemos esquem谩ticamente las cuentas resultantes de aplicar ese 25% de reducci贸n a sus beneficios pero solo del periodo 2015-2019, y de sus ganancias hasta que dure la presente crisis.
Pero, antes de las cuentas, queremos destacar que la posici贸n previa, el hilo conductor, comparte y tiene en cuenta lo declarado por Rui Rio, presidente del conservador Partido Socialdem贸crata (PSD), la primera fuerza pol铆tica de la oposici贸n en Portugal similar al PP en Espa帽a, “si la banca presenta ganancias abultadas en 2020 y 2021 ser谩 una verg眉enza y una ingratitud para los portugueses”, y ha recomendando que las entidades financieras debieran tener beneficios cero en esos ejercicios para que las ganancias las dediquen a reinvertir en el pa铆s.
Tambi茅n hace unas semanas el Presidente de la Rep煤blica, el conservador Marcelo Rebelo de Sousa, presidente honor铆fico del PSD declar贸 que “cada portugu茅s contribuy贸 para hacer viables los bancos. En este momento, sabiendo que la banca est谩 estabilizada, es una ocasi贸n de retribuir a los portugueses lo que hicimos”. Y no olvidemos que el ya citado Rui Rio, presidente del conservador Partido Socialdem贸crata (PSD), dijo al primer ministro Costa, del Partido Socialista: “Todo lo que nosotros podamos, ayudaremos. Le deseo coraje, nervios de acero y mucha suerte. Su suerte es nuestra suerte”. As铆 como la carta remitida a los militantes de su partido, el PSD, en la que les avisa que cualquier ataque al Gobierno del socialista Ant贸nio Costa en estos momentos “no es patri贸tico” y les llama a promover la uni贸n del pa铆s.
Las cuentas en una primera aproximaci贸n para salir de esta crisis redistribuyendo la riqueza y siguiendo el criterio del 25% a los a帽os de su recuperaci贸n.
18.500 millones de euros de los beneficios de la banca.
25.125 millones de euros de los beneficios de los oligopolios del Ibex-35.
21.955 millones de euros del Impuesto de Sociedades y la lucha contra la evasi贸n fiscal.
10.000 millones euros de las grandes fortunas y Sicav.
8.755 millones de euros de los beneficios de la banca de los beneficios previstos de los pr贸ximos cuatro a帽os.
23.256 millones de euros de los beneficios de los monopolios del Ibex-35 del mismo periodo.
20.000 millones de euros de una reforma fiscal del Impuesto de Sociedades de igual periodo.
11.000 millones de euros de perseguir el fraude fiscal de bancos y oligopolios.
10.000 millones de euros de una Reforma fiscal progresiva en el IRPF.
25.000 millones de euros ahorrando un 25% de los gastos del Estado por los privilegios y gastos innecesarios, corrupci贸n y gastos superfluos de las administraciones p煤blicas.
28.000 millones de euros por la renegociaci贸n y moratoria de la deuda.
125.000 millones de euros de un fondo especial con los activos l铆quidos de calidad de la banca.
50.000 millones de euros de una Bankia p煤blica, porque es el momento de completar la nacionalizaci贸n de Bankia como germen de una gran banca p煤blica. Hay que paralizar y revertir la privatizaci贸n, poniendo al servicio de las necesidades del pa铆s sus recursos (Bankia tiene 208.500 millones en activos y 125.000 millones de dep贸sitos).
Total: 401.591 millones de euros.