Por Antonio Figueras Huerta
La ONU estima que cada a帽o se arrojan al mar 13 millones de toneladas de pl谩stico y que la mitad de este material producido a nivel mundial es para art铆culos de un solo uso. En el Mediterr谩neo, se vierten unas 570 000 toneladas de pl谩stico cada a帽o, el equivalente a 33 800 botellas de pl谩stico por minuto.
Si la mitad de la poblaci贸n de Espa帽a usa una nueva mascarilla quir煤rgica todos los d铆as, se utilizar铆an alrededor de 705 millones de mascarillas por mes. Si tan solo el 1 % de ellas no se eliminan adecuadamente durante un a帽o, se generar铆an aproximadamente unas 84,6 millones de mascarillas contaminadas, muchas de las cuales terminar谩n en el mar.
Aunque los guantes no se recomiendan oficialmente para el uso cotidiano, a menudo los supermercados y otras tiendas hacen que los compradores los utilicen para entrar. Los guantes tampoco se reciclan en Espa帽a.
Mascarilla en una playa. Ocean Asia
De hecho, varios municipios han establecido multas para los que no se deshagan de este material de forma adecuada. Van desde 100 € hasta 3 000 € en Toledo.
Seg煤n estimaciones de la Polit茅cnica de Tur铆n, durante el levantamiento de la fase de confinamiento, Italia necesitar谩 1 000 millones de mascarillas y 456 millones de guantes por mes.
En Kalamata, una ciudad griega al suroeste de Atenas, los guantes, las toallitas y los frascos de desinfectante desechados aparecen esparcidos en parques, aceras y carreteras.
Residuos similares est谩n causando problemas en metr贸polis m谩s grandes como Nueva York y Londres. Incluso han llegado hasta las deshabitadas islas Soko, a pocos kil贸metros de Hong Kong (China).
Mascarillas encontradas en las islas de Soko (Hong Kong). Ocean Asia
Seg煤n un informe de WWF, “si solo el 1 % de las mascarillas se desecharan de forma incorrecta y dispersa en la naturaleza, esto resultar铆a en que hasta 10 millones de m谩scarillas mensuales contaminar铆an el medioambiente”.
Adem谩s, el informe advierte que, teniendo en cuenta que el peso de cada mascarilla es de aproximadamente 4 gramos, m谩s de 40 000 kilogramos de pl谩stico acabar铆an en la naturaleza.
Las mascarillas importadas de China est谩n hechas de m煤ltiples capas de diferentes materiales o pol铆meros. Esta complejidad hace que sea dif铆cil reciclarlas.
Las mascarillas higi茅nicas deben constar de 5 partes con una gran cantidad de pl谩stico:
Seg煤n Claudia Brunori, qu铆mica de la Agencia para las Nuevas Tecnolog铆as, Energ铆a y Desarrollo Econ贸mico Sostenible italiana, “los pa铆ses deber铆an tratar de desarrollar productos hechos del mismo pol铆mero, que podamos rastrear y recolectar en contenedores desechables sellados, donde puedan desinfectarse y reciclarse”.
Esto est谩 sucediendo en Italia a peque帽a escala a nivel local. Las ONG, las instituciones y los investigadores han creado EPP reutilizables, donde se retiene la estructura de la mascarilla y solo se desecha el filtro.
Mike Bilodeau, director regional de Plastic Oceans para Europa, sugiere que en lugar de importar estos equipos, deben fabricarse localmente y de forma que los elementos pl谩sticos puedan reciclarse y reutilizarse.
La asociaci贸n europea de convertidores de pl谩sticos ya ha pedido que la legislaci贸n de la UE se retrase un a帽o debido a la COVID-19.
Sin embargo, Bruselas ha rechazado la petici贸n. Aun as铆, hay evidencias del regreso a los vasos de pl谩stico de un solo uso debido a la emergencia sanitaria por COVID-19. En Starbucks han prohibido las tazas reutilizables.
La Comisi贸n Europea est谩 desarrollando est谩ndares para pl谩sticos biodegradables. Pero incluso si los PPE estuvieran hechos de tales materiales, no servir铆an para evitar la contaminaci贸n marina.
Richard Thompson, profesor de biolog铆a marina en la Universidad de Plymouth, afirma que “un estudio reciente sobre pl谩stico biodegradable expuesto a diferentes ambientes mostr贸 que algunos art铆culos desaparecieron r谩pidamente, mientras que a煤n se pod铆an utilizar las bolsas para ir a la compra despu茅s de cuatro a帽os en el mar. Para cuando llegan al oc茅ano, es demasiado tarde”. Thompson acu帽贸 el t茅rmino micropl谩sticos en el 2004.
Zero Waste Europe advierte que los pa铆ses no deber铆an tener que elegir entre la protecci贸n del medioambiente o de la salud p煤blica, como asegura que est谩 sucediendo. “En el futuro tenemos que asegurarnos de estar preparados para pandemias como esta y enfrentarnos a ellas de una manera sostenible. No tiene por qu茅 ser una cosa a expensas de la otra”, concluye.
En Espa帽a, las directrices para gestionar estos residuos est谩n recogidas en la Orden SND/271/2020, de 19 de marzo, sobre gesti贸n de residuos.
No obstante, se han descrito los riesgos que otros pl谩sticos presentan para los animales de los oc茅anos. Pueden, por ejemplo, enredarse con ellos o confundirlos con alimentos. En diciembre de 2019, se descubri贸 que un cachalote hallado muerto en la isla escocesa de Harris ten铆a una bola de basura de 100 kilogramos en el est贸mago.
Adem谩s, la degradaci贸n de los fragmentos de pl谩stico en el mar libera paulatinamente contaminantes invisibles. Si permanecen intactos, se descompondr谩n en peque帽os trozos o micropl谩sticos.
Un estudio del proyecto SAPEA de asesoramiento cient铆fico a la pol铆tica europea se帽ala que altas concentraciones de micropl谩sticos causan da帽os en el medioambiente y a los seres vivos, como procesos inflamatorios y estr茅s.
Antonio Figueras Huerta, Profesor de investigaci贸n del Consejo Superior de Investigaciones Cient铆ficas, Instituto de Investigaciones Marinas (IIM-CSIC) v铆a The Conversation
Una versi贸n de este art铆culo fue publicada originalmente en el blog Ciencia marina y otros asuntos, de la Fundaci贸n para el Conocimiento madri+d.
Si la mitad de la poblaci贸n de Espa帽a usa una nueva mascarilla quir煤rgica todos los d铆as, se utilizar铆an alrededor de 705 millones de mascarillas por mes. Si tan solo el 1 % de ellas no se eliminan adecuadamente durante un a帽o, se generar铆an aproximadamente unas 84,6 millones de mascarillas contaminadas, muchas de las cuales terminar谩n en el mar.
Aunque los guantes no se recomiendan oficialmente para el uso cotidiano, a menudo los supermercados y otras tiendas hacen que los compradores los utilicen para entrar. Los guantes tampoco se reciclan en Espa帽a.

Consecuencias de una mala gesti贸n
Las ciudades espa帽olas ya han notado el creciente problema de la basura derivada de la protecci贸n frente al coronavirus.De hecho, varios municipios han establecido multas para los que no se deshagan de este material de forma adecuada. Van desde 100 € hasta 3 000 € en Toledo.
Seg煤n estimaciones de la Polit茅cnica de Tur铆n, durante el levantamiento de la fase de confinamiento, Italia necesitar谩 1 000 millones de mascarillas y 456 millones de guantes por mes.
En Kalamata, una ciudad griega al suroeste de Atenas, los guantes, las toallitas y los frascos de desinfectante desechados aparecen esparcidos en parques, aceras y carreteras.
Residuos similares est谩n causando problemas en metr贸polis m谩s grandes como Nueva York y Londres. Incluso han llegado hasta las deshabitadas islas Soko, a pocos kil贸metros de Hong Kong (China).

Seg煤n un informe de WWF, “si solo el 1 % de las mascarillas se desecharan de forma incorrecta y dispersa en la naturaleza, esto resultar铆a en que hasta 10 millones de m谩scarillas mensuales contaminar铆an el medioambiente”.
Adem谩s, el informe advierte que, teniendo en cuenta que el peso de cada mascarilla es de aproximadamente 4 gramos, m谩s de 40 000 kilogramos de pl谩stico acabar铆an en la naturaleza.
C贸mo facilitar su gesti贸n
Gran parte del equipo de protecci贸n personal (EPP) que usan los trabajadores de la salud, como guantes, mascarillas y batas, se emplea una sola vez antes de desecharse.Las mascarillas importadas de China est谩n hechas de m煤ltiples capas de diferentes materiales o pol铆meros. Esta complejidad hace que sea dif铆cil reciclarlas.
Las mascarillas higi茅nicas deben constar de 5 partes con una gran cantidad de pl谩stico:
- Dos capas de tejido que constituyen la parte exterior de la mascarilla. Es de tipo spunbond de 40 g/m², con un 100 % de polipropileno hidr贸fobo.
- Dos capas de tejidos spunlace de 40 g/m² con 80 % poli茅ster y 20 % viscosa que constituyen la parte media de la mascarilla.
- Una capa de tejido spunbond de 20 g/m², 100 % polipropileno hidr贸fobo, que constituye la parte interior de la mascarilla.
Seg煤n Claudia Brunori, qu铆mica de la Agencia para las Nuevas Tecnolog铆as, Energ铆a y Desarrollo Econ贸mico Sostenible italiana, “los pa铆ses deber铆an tratar de desarrollar productos hechos del mismo pol铆mero, que podamos rastrear y recolectar en contenedores desechables sellados, donde puedan desinfectarse y reciclarse”.
Esto est谩 sucediendo en Italia a peque帽a escala a nivel local. Las ONG, las instituciones y los investigadores han creado EPP reutilizables, donde se retiene la estructura de la mascarilla y solo se desecha el filtro.
Mike Bilodeau, director regional de Plastic Oceans para Europa, sugiere que en lugar de importar estos equipos, deben fabricarse localmente y de forma que los elementos pl谩sticos puedan reciclarse y reutilizarse.
Los l铆mites de la legislaci贸n sobre pl谩sticos
La UE introdujo el a帽o pasado regulaci贸n para abordar la basura marina. La directiva sobre pl谩sticos de un solo uso, que debe convertirse en ley a nivel nacional este a帽o, incluye la prohibici贸n de los pl谩sticos de un solo uso, como bastoncillos de algod贸n, cubiertos y pajitas. Las mascarillas y guantes m茅dicos no est谩n incluidos.La asociaci贸n europea de convertidores de pl谩sticos ya ha pedido que la legislaci贸n de la UE se retrase un a帽o debido a la COVID-19.
Sin embargo, Bruselas ha rechazado la petici贸n. Aun as铆, hay evidencias del regreso a los vasos de pl谩stico de un solo uso debido a la emergencia sanitaria por COVID-19. En Starbucks han prohibido las tazas reutilizables.
La Comisi贸n Europea est谩 desarrollando est谩ndares para pl谩sticos biodegradables. Pero incluso si los PPE estuvieran hechos de tales materiales, no servir铆an para evitar la contaminaci贸n marina.
Richard Thompson, profesor de biolog铆a marina en la Universidad de Plymouth, afirma que “un estudio reciente sobre pl谩stico biodegradable expuesto a diferentes ambientes mostr贸 que algunos art铆culos desaparecieron r谩pidamente, mientras que a煤n se pod铆an utilizar las bolsas para ir a la compra despu茅s de cuatro a帽os en el mar. Para cuando llegan al oc茅ano, es demasiado tarde”. Thompson acu帽贸 el t茅rmino micropl谩sticos en el 2004.
Zero Waste Europe advierte que los pa铆ses no deber铆an tener que elegir entre la protecci贸n del medioambiente o de la salud p煤blica, como asegura que est谩 sucediendo. “En el futuro tenemos que asegurarnos de estar preparados para pandemias como esta y enfrentarnos a ellas de una manera sostenible. No tiene por qu茅 ser una cosa a expensas de la otra”, concluye.
En Espa帽a, las directrices para gestionar estos residuos est谩n recogidas en la Orden SND/271/2020, de 19 de marzo, sobre gesti贸n de residuos.
Efectos en el medioambiente
Dado que el uso generalizado de EPP es un fen贸meno reciente, no existen estudios sobre el impacto de sus desechos en el entorno marino y sus habitantes.No obstante, se han descrito los riesgos que otros pl谩sticos presentan para los animales de los oc茅anos. Pueden, por ejemplo, enredarse con ellos o confundirlos con alimentos. En diciembre de 2019, se descubri贸 que un cachalote hallado muerto en la isla escocesa de Harris ten铆a una bola de basura de 100 kilogramos en el est贸mago.
Adem谩s, la degradaci贸n de los fragmentos de pl谩stico en el mar libera paulatinamente contaminantes invisibles. Si permanecen intactos, se descompondr谩n en peque帽os trozos o micropl谩sticos.
Un estudio del proyecto SAPEA de asesoramiento cient铆fico a la pol铆tica europea se帽ala que altas concentraciones de micropl谩sticos causan da帽os en el medioambiente y a los seres vivos, como procesos inflamatorios y estr茅s.
Antonio Figueras Huerta, Profesor de investigaci贸n del Consejo Superior de Investigaciones Cient铆ficas, Instituto de Investigaciones Marinas (IIM-CSIC) v铆a The Conversation
Una versi贸n de este art铆culo fue publicada originalmente en el blog Ciencia marina y otros asuntos, de la Fundaci贸n para el Conocimiento madri+d.