Embajador de Irán ante la ONU Majid Takht-RavanchiPressTV.- El embajador de Irán en la ONU ha denunciado como "un crimen contra la humanidad" las sanciones unilaterales impuestas por los autoproclamados defensores occidentales de los derechos humanos a ciertos países, y ha pedido a la comunidad internacional que tome medidas inmediatas para ayudar a levantar las medidas restrictivas.
Majid Takht-Ravanchi hizo las declaraciones el miércoles en un discurso en la reunión de la Fórmula Arria del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, denominada "Poner fin a las medidas coercitivas unilaterales ahora".
Dijo que las medidas coercitivas, incluidas las sanciones, interrumpen el acceso a los sistemas financieros, las reservas de divisas e incluso los alimentos y los medicamentos.
Las prohibiciones, agregó, también están dirigidas a niños y pacientes, así como a ancianos y pobres, lo que genera graves consecuencias humanitarias que podrían convertirse en una crisis humanitaria.
Los estados occidentales afirman que las medicinas, los alimentos y otros suministros humanitarios están exentos de las llamadas sanciones inteligentes, pero la realidad es que las prohibiciones hacen el mayor daño a las personas inocentes y vulnerables, dijo además el enviado iraní.
La imposición de sanciones durante la epidemia de coronavirus es un movimiento muy peligroso ya que la seguridad de los países está interconectada ya que el virus puede propagarse y cobrar muchas vidas, dijo.
Takht-Rvanchi también criticó las sanciones como castigo colectivo para todas las personas y el terrorismo económico, que equivale a una guerra real en la que la economía se utiliza como arma.
Bajo cualquier criterio, las sanciones unilaterales son “inhumanas, inmorales, ilegales y un símbolo obvio de un crimen contra la humanidad”, enfatizó, instando a la comunidad internacional a tomar medidas inmediatas para asegurar la eliminación de las prohibiciones.
Refiriéndose a las sanciones impuestas por Estados Unidos contra la República Islámica durante los últimos 40 años, el embajador dijo que Irán ahora enfrenta las sanciones más extensas jamás aplicadas a un país.
Las sanciones contra Irán han obstaculizado gravemente la batalla del país contra el brote de coronavirus, dijo. Además, violan los principios de libertad de comercio y navegación.
Takht-Rvanchi dijo que las sanciones inhumanas han impedido que Irán utilice sus recursos financieros en el extranjero para el comercio de artículos humanitarios, incluidos medicamentos y equipos médicos necesarios para contener el coronavirus y tratar a los pacientes.
Impuestas por los países que afirman ser los principales defensores de los derechos humanos, las sanciones apuntan a los derechos de las personas a un nivel de vida digno, salud y bienestar adecuados, agregó.
Irán ha estado bajo una serie de sanciones ilegales impuestas por Estados Unidos desde 2018, cuando el presidente Donald Trump retiró a Washington del acuerdo nuclear de 2015, conocido oficialmente como el Plan de Acción Integral Conjunto (JCPOA).
Estados Unidos desató la llamada campaña de máxima presión y apuntó a la nación iraní con las medidas restrictivas "más duras de la historia".
En los últimos meses, Washington ha endurecido sus opresivas sanciones contra la República Islámica, desafiando las advertencias de Teherán y las organizaciones internacionales de derechos humanos de que las restricciones están obstaculizando la lucha del sector de la salud iraní contra la pandemia del coronavirus.
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