OPINIÓN de Samuel Schmidt
La empresocracia consiste en que la lógica y racionalidad de las decisiones y actos de gobierno están fundadas en la noción de que debe beneficiarse a las empresas y/o a los empresarios. Uno de los supuestos en que se basa esta forma de gobierno consiste en la creencia de que las empresas son las que crean riqueza, y los gobiernos, por lo general se ocupan de que la riqueza se distribuya concentrándose en unas pocas manos.
La economía tiende a la concentración y esto resulta en que las diez empresas con mayor valor en el mundo excede al del PIB de muchos países incluyendo a varios que no son de los más pobres. Los países hasta el número 17 tienen un PIB superior al de las empresas. En la tabla I se incluye la lista de las 10 empresas con mayor valor en el mundo comparadas con los países más ricos a partir del número 18 en el ranking mundial, ya no incluimos a los más pobres para evitar una comparación ridícula.
Los beneficios anuales de empresas como McKesson (191 mil millones de dólares) ExxonMobil (198 mil millones de dólares), Apple (208 mil millones de dólares), o Wal-Mart (470 mil millones de dólares) superan el PIB de países como Grecia, Irak, Hungría, Catar, Ecuador, Guatemala. Y pensar que Wal Mart prohibe la entrada de empacadores de la tercera edad a sus tiendas en México. Demasiado poder y utilizado para alimentar su profunda ambición.
Esta concentración de la riqueza se generó gracias a protecciones e intervenciones de los gobiernos, ya sea por medio de guerras y proyectos de reconstrucción de las economías que destruyeron, o por la imposición de modelos proteccionistas disfrazados de libre comercio. Como parte de su influencia mundial, encontramos que las organizaciones multi nacionales como el Banco Mundial o el Fondo Monetario Internacional impusieron modelos que beneficiaron a la gran banca internacional y propusieron diversos modelos de privatización que llegaron hasta al agua. Suez-Lyonnaise des Eaux (Ondeo) y Veolia Environnement (Vivendi) monopolizan más del 70% del agua existente en el mercado del agua mundial. Suez opera en 130 países y Veolia en más de 90; frente a la resolución de la ONU de que proveer agua y saneamiento es un derecho humano, Nestle opina que el agua debe verse como una mercancía más, y es que ese comercio le produjo ventas por 8,757,800,000 dólares en 2019. Los pobladores de Santa María Zacatepec en Puebla están seguros que el socavón gigante es resultado de la excesiva extracción de agua y eso que lograron cerrar una planta de bonafón.
La empresocracia no apoya prácticas democráticas, más bien todo lo contrario y sabe exigir muy bien, Entre sus demandas se encuentra:
Que el gobierno cree Empleos, que proteja a las empresas, que siga políticas fiscales e impositivas generosas (para ellos), que subsidie, y una exigencia muy importante es que el gobierno invierta en actividades necesarias pero no rentables, como el desarrollo de infaestructura y cuándo ellos entran deben hacerlo con todas las ventajas posibles. Una empresa en Ciudad Juárez reclamó la extensión de la concesión para explotar un puente internacional porque había hecho mal los cálculos de los vehículos que pasarían por ahí y el gobierno se lo concedió, ¡por supuesto!
El tema de los impuestos es interesante porque exigen no pagarlos y hasta inventaron una ingeniería administrativa y paraísos fiscales que les ayuden a evadir esa obligación, eso si, que los otros (empleados) paguen impuestos para que a ellos se les establezcan buenas condiciones.
Las grandes políticas mundiales que han impulsado para beneficiar a las empresas han resultado en mayor pobreza, más migración y mayor represión para los migrantes que huyen de violencias o ambientes arrasados por el apetito voraz de las empresas.
Han instituido el capitalismo salvaje y depredador, han arrasado con el medio ambiente y han propiciado/tolerado la difusión de discursos de odio (facebook, twitter, tiktok, instagram).
Se han negado a cooperar para mejorar la calidad de vida en el planeta, inventaron un mercado de polución para engañar a la sociedad sobre sus esfuerzos anti contaminantes que hacen peligrar la vida en el planeta.
Para la empresocracia el mejor trabajo es el peor pagado, mencionarles al judeofobo de Ford que decía que quería que sus empleados pudieran comprar sus productos, es un paso menos que mencionar a Marx que sostuvo que el trabajo es la fuente de valor, eso si es invocar al demonio. Así se convierte en responsabilidad del Estado garantizar la salud de los trabajadores para que la empresocracia los exprima.
La empresocracia es el peor gobierno posible, son egoístas, aprovechados, fomentan la desigualdad, la injusticia y no se tientan el corazón para tirar al gobierno que se atreve a limitar sus privilegios.
La empresocracia consiste en que la lógica y racionalidad de las decisiones y actos de gobierno están fundadas en la noción de que debe beneficiarse a las empresas y/o a los empresarios. Uno de los supuestos en que se basa esta forma de gobierno consiste en la creencia de que las empresas son las que crean riqueza, y los gobiernos, por lo general se ocupan de que la riqueza se distribuya concentrándose en unas pocas manos.
La economía tiende a la concentración y esto resulta en que las diez empresas con mayor valor en el mundo excede al del PIB de muchos países incluyendo a varios que no son de los más pobres. Los países hasta el número 17 tienen un PIB superior al de las empresas. En la tabla I se incluye la lista de las 10 empresas con mayor valor en el mundo comparadas con los países más ricos a partir del número 18 en el ranking mundial, ya no incluimos a los más pobres para evitar una comparación ridícula.
Tabla I
Empresa | Valor. Mil millones dlls US | Ranking | País | PIB. Mil millones dlls US | Ranking mundial |
Apple | 856.8 | 1 | 824 734 | 18 | |
Alphabet (propietaria de Google) | 702.1 | 2 | Arabia Saudita | 804 921 | 19 |
Microsoft | 630.7 | 3 | Turquía | 794 530 | 20 |
Amazon | 545.02 | 4 | Taiwan | 759 104 | 21 |
504.56 | 5 | Irán | 682 859 | 22 | |
Berkshire Hathaway B | 468.86 | 6 | Polonia | 642 121 | 23 |
Johnson & Johnson | 365.33 | 7 | Suecia | 625 948 | 24 |
JP Morgan Chase & Co | 353.43 | 8 | Bélgica | 578 996 | 25 |
Exxon Mobil Corp | 339.15 | 9 | Tailandia | 538 735 | 26 |
Bank of America | 291.55 | 10 | Nigeria | 514 049 | 27 |
Los beneficios anuales de empresas como McKesson (191 mil millones de dólares) ExxonMobil (198 mil millones de dólares), Apple (208 mil millones de dólares), o Wal-Mart (470 mil millones de dólares) superan el PIB de países como Grecia, Irak, Hungría, Catar, Ecuador, Guatemala. Y pensar que Wal Mart prohibe la entrada de empacadores de la tercera edad a sus tiendas en México. Demasiado poder y utilizado para alimentar su profunda ambición.
Esta concentración de la riqueza se generó gracias a protecciones e intervenciones de los gobiernos, ya sea por medio de guerras y proyectos de reconstrucción de las economías que destruyeron, o por la imposición de modelos proteccionistas disfrazados de libre comercio. Como parte de su influencia mundial, encontramos que las organizaciones multi nacionales como el Banco Mundial o el Fondo Monetario Internacional impusieron modelos que beneficiaron a la gran banca internacional y propusieron diversos modelos de privatización que llegaron hasta al agua. Suez-Lyonnaise des Eaux (Ondeo) y Veolia Environnement (Vivendi) monopolizan más del 70% del agua existente en el mercado del agua mundial. Suez opera en 130 países y Veolia en más de 90; frente a la resolución de la ONU de que proveer agua y saneamiento es un derecho humano, Nestle opina que el agua debe verse como una mercancía más, y es que ese comercio le produjo ventas por 8,757,800,000 dólares en 2019. Los pobladores de Santa María Zacatepec en Puebla están seguros que el socavón gigante es resultado de la excesiva extracción de agua y eso que lograron cerrar una planta de bonafón.
La empresocracia no apoya prácticas democráticas, más bien todo lo contrario y sabe exigir muy bien, Entre sus demandas se encuentra:
Que el gobierno cree Empleos, que proteja a las empresas, que siga políticas fiscales e impositivas generosas (para ellos), que subsidie, y una exigencia muy importante es que el gobierno invierta en actividades necesarias pero no rentables, como el desarrollo de infaestructura y cuándo ellos entran deben hacerlo con todas las ventajas posibles. Una empresa en Ciudad Juárez reclamó la extensión de la concesión para explotar un puente internacional porque había hecho mal los cálculos de los vehículos que pasarían por ahí y el gobierno se lo concedió, ¡por supuesto!
El tema de los impuestos es interesante porque exigen no pagarlos y hasta inventaron una ingeniería administrativa y paraísos fiscales que les ayuden a evadir esa obligación, eso si, que los otros (empleados) paguen impuestos para que a ellos se les establezcan buenas condiciones.
Las grandes políticas mundiales que han impulsado para beneficiar a las empresas han resultado en mayor pobreza, más migración y mayor represión para los migrantes que huyen de violencias o ambientes arrasados por el apetito voraz de las empresas.
Han instituido el capitalismo salvaje y depredador, han arrasado con el medio ambiente y han propiciado/tolerado la difusión de discursos de odio (facebook, twitter, tiktok, instagram).
Se han negado a cooperar para mejorar la calidad de vida en el planeta, inventaron un mercado de polución para engañar a la sociedad sobre sus esfuerzos anti contaminantes que hacen peligrar la vida en el planeta.
Para la empresocracia el mejor trabajo es el peor pagado, mencionarles al judeofobo de Ford que decía que quería que sus empleados pudieran comprar sus productos, es un paso menos que mencionar a Marx que sostuvo que el trabajo es la fuente de valor, eso si es invocar al demonio. Así se convierte en responsabilidad del Estado garantizar la salud de los trabajadores para que la empresocracia los exprima.
La empresocracia es el peor gobierno posible, son egoístas, aprovechados, fomentan la desigualdad, la injusticia y no se tientan el corazón para tirar al gobierno que se atreve a limitar sus privilegios.
