Ir al contenido principal

La vacuna de Moderna es buena, con viejos efectos políticos

La administración Biden refuerza su presión sobre el gobierno




OPINIÓN de Sergio Ortiz

El sábado 17 arribaron a Buenos Aires dos vuelos con 3.5 millones de dosis de la vacuna de Moderna, uno de los tres laboratorios estadounidenses que no habían llegado a acuerdos con el gobierno argentino. Los otros dos son Pfizer y Johnson y Johnson, una trifecta de altas pretensiones, superiores a las garantías dadas a todos los laboratorios del mundo y plasmadas en la ley de vacunas aprobada en octubre de 2020.

Aquellas partidas no llegan por venta del laboratorio sino por donación del gobierno estadounidense. En el último año de Donald Trump y hasta un par de meses atrás su sucesor Joe Biden, acaparaban vacunas por hasta cinco veces su población total. Y ahora, que su situación sanitaria “mejoró” (las comillas lo relativizan porque son impactantes sus 34 millones de contagiados y 608.000 muertos), empieza a practicar cierta beneficencia con objetivos políticos definidos, también para Argentina.

Desde el punto vista sanitario, no hay casi objeciones contra la vacuna de Moderna; tiene una eficacia del 94,1 por ciento aplicadas las dos dosis. Aún se aguardan estudios para saber si se puede aplicar a menores de 18 años; posiblemente tendrá esa vía libre en poco tiempo, un aliciente para su uso en Argentina.

Numerosos países que la emplean no tienen objeciones importantes, aunque puntualizan algunos efectos secundarios: “La vacuna de Moderna provoca dolor en el área de la inyección en un 92% de los casos, fatiga en un 70% de ellos, cefalea en un 64,7%, mialgias (61,5%), artralgias (46,4%), escalofríos (45,4%), náuseas y vómitos (23%), fiebre (15,5%) e inflamación en el lugar del pinchazo (14,7%). Son efectos que suelen ser de intensidad leve o moderada, que se prolongan unos días después de la vacunación y que son más habituales tras la segunda dosis y a menor edad”.

Es positivo que lleguen al país esos cargamentos porque reforzarán la vacunación y pueden ser muy útil para menores, pero hay que puntualizar tres cosas.

1) Las donaciones llegaron el sábado 17. Antes, el domingo 11 de julio, el gobierno argentino firmó un contrato de compras con Moderna, por 20 millones de dosis. “Si me comprás, podés recibir algunas donaciones”…

2) Aunque no trascendió el precio de compra, es  una de las vacunas más caras del mercado. A países europeos las vendieron por 20 y 30 euros cada dosis, o sea hasta 60 dólares las dos para una persona.

3) Para que esas vacunas tuvieran luz verde desde el aeropuerto de Memphis, y las que vengan de Pfizer y Johnson y Johnson, el gobierno tuvo que modificar por decreto del PEN, avalado por el Senado el jueves 15, la ley de vacunas. Y tal como exigían esas multinacionales, salió de esa norma la causal de “negligencia” de los laboratorios. Éstos consiguieron que los pleitos se tramiten en tribunales extranjeros y recibieron garantías superiores a lo normal.

La buena vacuna de Moderna tiene efectos negativos más allá de una fatiga o náusea. Pueden reforzar una vieja dependencia política.


SE INCENDIA MACRI

Que vengan más vacunas es muy positivo. Urge acelerar los ritmos de esa vacunación para que los compatriotas con dos dosis superen largamente el 11 por ciento con que concluyó la semana. Crece en el mundo la preocupación por la variante Delta y una tercera ola. Haber llegado a 4.749.443 contagios y sobre todo a 101.434 fallecidos son un drama nacional. Esto no se cura con cinco días de luto no siempre cumplido, ni siquiera en el Estado. 

Ante esa durísima realidad uno no puede menos que indignarse con las declaraciones del turista Mauricio Macri que critica la performance oficialista de un 10 por ciento más de pobreza y la cota superada de 100.000 muertes. Se pone en comentarista, desde  Europa, un problema donde el PRO-Juntos por el Cambio fue parte por partida doble. Entre 2015-2019 ajustaron la economía, la educación, la salud, las jubilaciones, el empleo, los salarios y hasta el ministerio de Salud. Y comenzada la pandemia estuvieron lejos de poner el hombro para ayudar a pechar contra el coronavirus. Ni siquiera querían poner el hombro para recibir la Sputnik, que era “veneno” según la venenosa Elisa Carrió. Alentaron los banderazos contra la cuarentena e hicieron lobby para Pfizer.

Las críticas del macrismo son muy injustas y desubicadas, aún cuando meneen números o porcentajes ciertos de más pobres y más muertos. Ellos no podrán responder a sus nietos cuando les pregunten, ¿vos qué hiciste en la guerra contra el virus, abuelo?

Las declaraciones del expresidente tienen la intención de zafar de críticas que le llegan de varios flancos.

Una que le pegó en la mandíbula fue el fallo de la jueza Marta Cirulli decretando la quiebra del Correo Argentino, vaciado por el grupo Macri (Sideco y Socma). Esta runfla se negó a pagar durante 20 años una deuda con el Estado de más de 6.000 millones de pesos. Al final la jueza Cirulli aceptó que la apelación patronal-macrista tuviera efectos suspensivos de la quiebra, pero el decadente jefe del PRO, hoy en trámite sucesorio con el alcalde porteño, tuvo mucho descrédito.

Y ese desprestigio aumentó con la denuncia sobre su envío de gendarmes, armas y municiones a Bolivia, para ayudar en noviembre de 2019 a la flamante dictadora Jeanine Áñez. El gobierno, en base a los informes de Sabina Frederic, Martín Soria y Mercedes Marcó del Pont, promovió denuncia por contrabando agravado contra el expresidente, Patricia Bullrich y otros exfuncionarios. 

El límite es que esa denuncia se limita al contrabando y se tramita ante el fuero penal económico. Mejor hubiera sido que a ese delito se le sumara la acusación por violar  los derechos humanos de los hermanos del altiplano y hasta la ley de Defensa de la Democracia. 

Como sea, Macri recibió munición gruesa por haber contrabandeado armamento a favor de los golpistas bolivianos. Debe ser por eso que estuvo tuiteando en forma activa versus AF por la pandemia, y contra Cuba por contener las protestas alentadas desde Miami. Todo le venía bien para tratar de salir del mal paso, pero no pudo. Está al horno, incendiado políticamente.


IRÁN INOCENTE

Si bien no es asunto de esos que deciden la suerte de 45 millones de argentinos, fue muy importante que Cristina Fernández de Kirchner y sus abogados lograran que el Tribunal Oral Federal 8 aceptara una audiencia con transmisión pública el viernes, en la causa por el Memorando con Irán.

“Estamos acusados de ser encubridores del más terrible atentado terrorista que sufrió nuestro país. Es un disparate judicial, institucional y político esta acusación”, subrayó la vicepresidenta. Su exposición podía ser seguida por muchos canales de televisión, aunque TN y otros sólo pasaron un rato de su exposición de una hora.

Cristina dio muchos elementos para explicar que se trataba de un disparate. Eso fue  impulsado por la denuncia falsa del fiscal Alberto Nisman y los círculos más reaccionarios del sionismo local e internacional: la Daia, AMIA, embajada de Israel, Mossad, los “fondos buitres” y Benjamin Netanyahu.

La exposición cuestionó al jueces de esta causa, Claudio Bonadío, y otro, Julián Ercolini, a los que siempre le tocaba un “sorteo” de denuncias en su contra. Y les dio fuerte a los camaristas de Casación, Gustavo Hornos y Mariano Borinsky, los grandes contertulios del entonces presidente Macri. No podía faltar el palo para Martín Irurzún por su teoría de que los exfuncionarios K debían aguardar presos el proceso en su contra, por su “poder residual”.

Como lo aclaró mil veces el entonces canciller Héctor Timerman, recordado con emoción en la audiencia, el objetivo argentino con la firma del Memorando, era que los iraníes acusados de ser autores intelectuales del atentado pudieran declarar en Teherán ante jueces argentinos e internacionales.

La falsedad absoluta de Nisman fue que el objetivo real era levantar las “tarjetas rojas” de Interpol para esos iraníes. Y en consecuencia acusó a la entonces presidenta, varios exfuncionarios y políticos como Andrés Larroque, Luis D’Elía y Fernando Esteche, de encubrimiento de aquel terrible atentado que dejó 85 muertos y del que hoy se cumplen 27 años de impunidad.

La pieza oratoria de CFK fue impecable y justa, y lo justo sería la anulación de este juicio. El límite de su exposición fue que no se atrevió a decir una gran verdad: Irán no tuvo nada que ver con el atentado. Si ella y otros políticos sufrieron por una acusación falsa de Nisman y el Mossad, Irán como país y sus funcionarios sufrieron una tremenda e injusta demonización. Y la audiencia era una tribuna para decirlo.  

¿Por qué Cristina omitió hablar de la inocencia de Teherán? 

¿Tendrá que ver con que el sábado llegaban 3.5 millones de Moderna mandadas por Biden, que sigue agrediendo a Irán y a Cuba? Ahí en Ezeiza estaba la encargada de Negocios de la Embajada de EE UU, MaryKay Carlson, quien declaró que su país “es un socio sólido de Argentina y vamos a continuar trabajando en conjunto para combatir esta pandemia”.

¿Tendrá que ver con que el peronista más proestadounidense y proisraelí, Sergio Massa, está ocupando un rol cada vez más influyente en el gobierno, máxime en tiempos de elecciones y en territorio bonaerense?


Massa inauguró el jueves 14 un “Congreso Latinoamericano contra el Terrorismo”, organizado por Diputados y el Congreso Judío Latinoamericano, con participación de la Daia y la AMIA, que tenía como blanco a Irán.

El presidente de Diputados no es el único que cultiva la relación dependiente con Washington. El otro es Martín Guzmán, en la renegociación con las deudas con el FMI, donde la última palabra la tiene la Casa Blanca.

Por eso habrá que aguardar si este juicio amañado termina bien para Cristina y demás procesados. Ojalá. Lamentablemente Irán seguirá más tiempo como demonio, sin serlo. Delicias de un Poder Judicial que necesitaba decapitaciones y desde 2020 no tuvo siquiera una lavada de cara. La tímida reforma duerme en el cajón de Massa. El dicho es conocido: si tiene cuatro patas, ladra y mueve la cola, es perro.



https://plsergio.wixsite.com/lasemanapolitica/post/la-vacuna-de-moderna-es-buena-con-viejos-efectos-pol%C3%ADticos




">


ARCHIVOS

Mostrar más


OTRA INFORMACIÓN ES POSIBLE

Información internacional, derechos humanos, cultura, minorías, mujer, infancia, ecología, ciencia y comunicación

El Mercurio Digital (elmercuriodigital.es) se edita bajo licencia de Creative Commons
©Desde 2002 en internet
Otra información es posible




AI FREE: DIARIO LIBRE DE INTELIGENCIA ARTIFICIAL