El Mont Blanc, la cumbre más alta de Europa occidental, ubicada en los Alpes franceses, ha perdido 91 centímetros en los últimos cuatro años y ha pasado de 4.808,72 metros en 2017 a 4.807,81 en 2021, según las estimaciones reveladas por los expertos este miércoles.
En la última medición oficial hasta ahora, de 2017, el conocido como “techo de Europa” presentó una altura de 4.808,72 metros, un centímetro menos que dos años antes, cuando se erigió hasta los 4.808,73, destacaron los medios franceses.
En 2019, el Mont Blanc se situó en los 4.806 metros, una cifra que se había mantenido en secreto hasta este miércoles pues los expertos consideran que no se trata de un dato significativo porque durante el verano de ese año no se registraron muchas nevadas.
Hay que remontarse al siglo XIX para encontrar medidas por debajo de los 4.808 metros, aunque según los cálculos registrados desde 2001, la mayor altitud, de unos 4.811 metros, data de 2007.
La altura del pico más alto de Europa ha variado en la última época, por eso los topógrafos del departamento francés de Alta Saboya, en el que se encuentra el Mont Blanc, se encargan de medir su altitud cada dos años, para lo que instalan sensores y realizan mediciones por satélites durante varias horas.
“Quitamos la última capa de nieve fresca de la cima y medimos la parte superior del hielo. Luego medimos toda la capa de hielo por encima de los 4.800 metros para determinar el volumen acumulado de hielo y nieve”, dijo el experto Jean des Garets en declaraciones recogidas por la emisora France Info.
Para la última estimación, que se hizo a mediados de septiembre de este año, un equipo de más de veinte personas tardó diez horas en llegar a la cumbre, con un desnivel de 1.700 metros.
El objetivo de estas mediciones periódicas es crear un banco de datos precisos y fiables que pueda ser utilizado por glaciólogos y climatólogos, y que se transmita a generaciones futuras, concluyeron estos expertos. EFEverde