OPINI脫N de Esther Lopez-Zafra*

“Me duele el alma”. Los psic贸logos Joffe y Sandler se帽alaron en 1967 que este tipo de dolor que a veces se siente se corresponde con el emocional, de origen psicol贸gico. Es mucho m谩s complejo de comprender que el dolor de espalda, costado o cualquier otro que tiene una duraci贸n concreta y se trata a nivel f铆sico.
El dolor emocional es m谩s duradero y, asimismo, su tratamiento debe ser psicol贸gico. Sin embargo, es un dolor que suele pasar desapercibido y que se produce en mayor medida en las mujeres que han sufrido violencia.
As铆, tal y como reconoce la ONU, no todos los tipos de violencia contra las mujeres son iguales, pero s铆 todos deben tratarse puesto que dejan una huella mucho m谩s negativa y duradera incluso que la f铆sica. De hecho, un estudio publicado en 2006 en la Journal of women´s health prueba que es m谩s f谩cil recuperarse del maltrato f铆sico que de la violencia psicol贸gica, y que esta produce un deterioro en la salud de la mujer que deja una huella duradera y que merece mucha m谩s atenci贸n de la que se le ofrece.
En este estudio comprobaron, tres a帽os m谩s tarde, que la salud f铆sica (somatizaciones) y mental de las mujeres que hab铆an sufrido violencia f铆sica hab铆a mejorado m谩s que en las v铆ctimas de violencia psicol贸gica.
Es la variante m谩s frecuente en la violencia de pareja
A pesar de ser considerado un problema de salud p煤blica por la OMS y de los esfuerzos legales para fortalecer los recursos de asistencia a las mujeres v铆ctimas de violencia de g茅nero, la realidad es que la violencia psicol贸gica es la variante m谩s frecuente entre las modalidades de violencia contra la pareja. Es m谩s, podemos afirmar que es el primer tipo de violencia, puesto que las conductas indicadoras de la existencia de violencia en la pareja comienzan con la intenci贸n de controlar a la v铆ctima atentando contra su integridad emocional, con la finalidad de producir intimidaci贸n, desvalorizaci贸n, sentimientos de culpa o sufrimiento, entre otros, que luego pueden ir aumentando hacia una violencia m谩s f铆sica.
En la sintomatolog铆a de mujeres maltratadas se observan diferentes tipos de afectaci贸n psicol贸gica, como mayor prevalencia de trastornos de ansiedad, fobias, depresi贸n, disfunciones sexuales y diversas alteraciones en los rasgos de personalidad que puede llegar al extremo del consumo de sustancias y los intentos de suicidio, que adem谩s se comprueba que se agrava en situaciones de emergencias sanitarias.
Pero ¿son todas las mujeres vulnerables a la violencia psicol贸gica? Una de las afectaciones m谩s silentes tiene que ver con la autoestima, que queda fuertemente afectada debido al abuso psicol贸gico y f铆sico. Sin embargo, tambi茅n es cierto que las mujeres que ya de partida tienen menor autoestima son a su vez m谩s vulnerables a sufrir violencia.
Esta autoestima se va construyendo desde la infancia, comprob谩ndose en las mujeres que las experiencias anteriores de violencia observada, sufrida o factores socioestructurales como una educaci贸n desigual o ense帽anza de valores de sumisi贸n en las mujeres, predicen la probabilidad de sufrir violencia en la edad adulta.
Estos da帽os psicol贸gicos no solo se producen en mujeres que sufren violencia de g茅nero. Kendall-Tackett et al. analizaron la afectaci贸n psicol贸gica de mujeres que sufren violencia, tanto en la infancia como de adultas, por violencia de g茅nero u otro tipo de violencias, y encontraron una ausencia de diferencias en los s铆ntomas manifestados. Es decir, la violencia psicol贸gica no distingue de edad, ni de forma, pero es m谩s frecuente, fuerte y duradera en las mujeres.
Esto ocurre debido a que tenemos modelos educativos y sociales basados en estereotipos en los que se espera de las mujeres que sean m谩s sumisas, dependientes, entregadas… aumentando su vulnerabilidad a sufrir violencia en distintas etapas de su vida.
As铆, no todas las mujeres son igual de vulnerables, pero s铆 es cierto que determinados contextos favorecen que las mujeres, m谩s que los hombres, sufran violencia, fundamentalmente violencia psicol贸gica. Entre estas situaciones est谩 el observar escenas de violencia o sufrir alg煤n tipo de abuso en la infancia o adolescencia.
Afortunadamente, hoy se reconoce y se denuncia la necesidad de tratar la violencia psicol贸gica sufrida a trav茅s de la violencia vicaria. Esta violencia se entiende como una modalidad m谩s de violencia psicol贸gica, donde existen distintos mecanismos de coerci贸n como, por ejemplo, la violencia instrumental o violencia a la madre a trav茅s de un da帽o a los ni帽os y ni帽as, por lo que se convierte en una nueva estrategia y herramienta de violencia psicol贸gica sobre la mujer.
La dificultad, adem谩s, de detectar esta violencia tiene que ver con el uso de c贸digos que solo detecta la mujer, ya que reconoce que determinado discurso, cuestionamiento o palabras que utilizan sus hijos o hijas pertenecen al maltratador. Por tanto, esta violencia vicaria deja una huella con graves efectos psicol贸gicos tanto en las mujeres como en los hijos e hijas.
¿C贸mo afectar谩 a las relaciones futuras de la mujer?
Las mujeres que sufren violencia, si no reciben atenci贸n psicol贸gica suelen repetir el patr贸n de v铆ctima con otras personas, amigos, pareja, familia. Su baja autoestima, nivel de dependencia emocional y otras dificultades adquiridas en los episodios de violencia psicol贸gica perduran a la relaci贸n que lo provocara (padres, entorno social, primeras parejas…).
Son m谩s vulnerables a mantener relaciones de afectividad futuras donde exista una din谩mica de violencia, puesto que es lo que aprendieron como “normal” y lo han aprendido por imitaci贸n. Podemos preguntarnos si este aprendizaje no ser谩 igual en todos los hijos e hijas.
Efectivamente, este aprendizaje o percepci贸n de “normalidad” se produce tanto en hombres como en mujeres, pero las consecuencias m谩s probables en el caso de los hombres es tendencia aumentar el sexismo con la edad y una normalizaci贸n de los modelos disfuncionales presenciados; mientras que las mujeres tienden a perpetuar la conducta de sumisi贸n, pasividad y dependencia en generaciones posteriores.
Si no reciben ayuda psicol贸gica, esta huella perdurar谩 en sus relaciones futuras y tambi茅n en otros entornos, dado que esa afectaci贸n emocional y cognitiva o huella psicol贸gica les dificulta la adaptaci贸n social, generando problemas de interacci贸n y de rechazo social y laboral o incluso de relaci贸n materno-filial, en caso de tener hijos o hijas.
Sobreponerse con el paso del tiempo
Las personas tenemos una gran capacidad de recuperaci贸n, resiliencia y adaptaci贸n, pero el tiempo no lo cura todo. Podemos sobreponernos, reducir la huella de la violencia psicol贸gica, pero esto va a depender fundamentalmente de las fortalezas individuales y de las opciones de ayuda.
Se ha comprobado que una detecci贸n precoz y la intervenci贸n temprana especializada multidisciplinar es clave para la recuperaci贸n de las menores expuestas a la violencia de g茅nero. Hay distintos factores de protecci贸n que ayudan a reducir el da帽o.
La clave es la ayuda psicosocial e intervenci贸n psicol贸gica. Es necesario trabajar en la erradicaci贸n de los estereotipos de g茅nero (que fomentan la sumisi贸n y dependencia emocional de ni帽as y mujeres), en la visibilizaci贸n del problema y en el trabajo de recuperaci贸n de todas las v铆ctimas, atendiendo a las distintas secuelas en funci贸n del g茅nero.
Se ha comprobado que algunos factores psicosociales como contar con mayor resiliencia o inteligencia emocional ayudan a prevenir sufrir violencia y permiten recuperarse m谩s r谩pidamente.
Sin embargo, este problema es tan complejo e implica tantos actores y decisiones que es dif铆cil fijar un periodo de tiempo concreto (desde uno o dos a帽os despu茅s de una ruptura total con la persona abusiva, sea madre, padre, amigos o pareja, hasta toda la vida reconstruy茅ndose, o incluso recuperarse en solitario, pero de manera parcial) para superarlo. Pero lo que est谩 claro es que sin ayuda es mucho m谩s dif铆cil.
*Esther Lopez-Zafra, Catedr谩tica de Psicolog铆a Social, Universidad de Ja茅n

“Me duele el alma”. Los psic贸logos Joffe y Sandler se帽alaron en 1967 que este tipo de dolor que a veces se siente se corresponde con el emocional, de origen psicol贸gico. Es mucho m谩s complejo de comprender que el dolor de espalda, costado o cualquier otro que tiene una duraci贸n concreta y se trata a nivel f铆sico.
El dolor emocional es m谩s duradero y, asimismo, su tratamiento debe ser psicol贸gico. Sin embargo, es un dolor que suele pasar desapercibido y que se produce en mayor medida en las mujeres que han sufrido violencia.
As铆, tal y como reconoce la ONU, no todos los tipos de violencia contra las mujeres son iguales, pero s铆 todos deben tratarse puesto que dejan una huella mucho m谩s negativa y duradera incluso que la f铆sica. De hecho, un estudio publicado en 2006 en la Journal of women´s health prueba que es m谩s f谩cil recuperarse del maltrato f铆sico que de la violencia psicol贸gica, y que esta produce un deterioro en la salud de la mujer que deja una huella duradera y que merece mucha m谩s atenci贸n de la que se le ofrece.
En este estudio comprobaron, tres a帽os m谩s tarde, que la salud f铆sica (somatizaciones) y mental de las mujeres que hab铆an sufrido violencia f铆sica hab铆a mejorado m谩s que en las v铆ctimas de violencia psicol贸gica.
Es la variante m谩s frecuente en la violencia de pareja
A pesar de ser considerado un problema de salud p煤blica por la OMS y de los esfuerzos legales para fortalecer los recursos de asistencia a las mujeres v铆ctimas de violencia de g茅nero, la realidad es que la violencia psicol贸gica es la variante m谩s frecuente entre las modalidades de violencia contra la pareja. Es m谩s, podemos afirmar que es el primer tipo de violencia, puesto que las conductas indicadoras de la existencia de violencia en la pareja comienzan con la intenci贸n de controlar a la v铆ctima atentando contra su integridad emocional, con la finalidad de producir intimidaci贸n, desvalorizaci贸n, sentimientos de culpa o sufrimiento, entre otros, que luego pueden ir aumentando hacia una violencia m谩s f铆sica.
En la sintomatolog铆a de mujeres maltratadas se observan diferentes tipos de afectaci贸n psicol贸gica, como mayor prevalencia de trastornos de ansiedad, fobias, depresi贸n, disfunciones sexuales y diversas alteraciones en los rasgos de personalidad que puede llegar al extremo del consumo de sustancias y los intentos de suicidio, que adem谩s se comprueba que se agrava en situaciones de emergencias sanitarias.
Pero ¿son todas las mujeres vulnerables a la violencia psicol贸gica? Una de las afectaciones m谩s silentes tiene que ver con la autoestima, que queda fuertemente afectada debido al abuso psicol贸gico y f铆sico. Sin embargo, tambi茅n es cierto que las mujeres que ya de partida tienen menor autoestima son a su vez m谩s vulnerables a sufrir violencia.
Esta autoestima se va construyendo desde la infancia, comprob谩ndose en las mujeres que las experiencias anteriores de violencia observada, sufrida o factores socioestructurales como una educaci贸n desigual o ense帽anza de valores de sumisi贸n en las mujeres, predicen la probabilidad de sufrir violencia en la edad adulta.
Estos da帽os psicol贸gicos no solo se producen en mujeres que sufren violencia de g茅nero. Kendall-Tackett et al. analizaron la afectaci贸n psicol贸gica de mujeres que sufren violencia, tanto en la infancia como de adultas, por violencia de g茅nero u otro tipo de violencias, y encontraron una ausencia de diferencias en los s铆ntomas manifestados. Es decir, la violencia psicol贸gica no distingue de edad, ni de forma, pero es m谩s frecuente, fuerte y duradera en las mujeres.
Esto ocurre debido a que tenemos modelos educativos y sociales basados en estereotipos en los que se espera de las mujeres que sean m谩s sumisas, dependientes, entregadas… aumentando su vulnerabilidad a sufrir violencia en distintas etapas de su vida.
As铆, no todas las mujeres son igual de vulnerables, pero s铆 es cierto que determinados contextos favorecen que las mujeres, m谩s que los hombres, sufran violencia, fundamentalmente violencia psicol贸gica. Entre estas situaciones est谩 el observar escenas de violencia o sufrir alg煤n tipo de abuso en la infancia o adolescencia.
Afortunadamente, hoy se reconoce y se denuncia la necesidad de tratar la violencia psicol贸gica sufrida a trav茅s de la violencia vicaria. Esta violencia se entiende como una modalidad m谩s de violencia psicol贸gica, donde existen distintos mecanismos de coerci贸n como, por ejemplo, la violencia instrumental o violencia a la madre a trav茅s de un da帽o a los ni帽os y ni帽as, por lo que se convierte en una nueva estrategia y herramienta de violencia psicol贸gica sobre la mujer.
La dificultad, adem谩s, de detectar esta violencia tiene que ver con el uso de c贸digos que solo detecta la mujer, ya que reconoce que determinado discurso, cuestionamiento o palabras que utilizan sus hijos o hijas pertenecen al maltratador. Por tanto, esta violencia vicaria deja una huella con graves efectos psicol贸gicos tanto en las mujeres como en los hijos e hijas.
¿C贸mo afectar谩 a las relaciones futuras de la mujer?
Las mujeres que sufren violencia, si no reciben atenci贸n psicol贸gica suelen repetir el patr贸n de v铆ctima con otras personas, amigos, pareja, familia. Su baja autoestima, nivel de dependencia emocional y otras dificultades adquiridas en los episodios de violencia psicol贸gica perduran a la relaci贸n que lo provocara (padres, entorno social, primeras parejas…).
Son m谩s vulnerables a mantener relaciones de afectividad futuras donde exista una din谩mica de violencia, puesto que es lo que aprendieron como “normal” y lo han aprendido por imitaci贸n. Podemos preguntarnos si este aprendizaje no ser谩 igual en todos los hijos e hijas.
Efectivamente, este aprendizaje o percepci贸n de “normalidad” se produce tanto en hombres como en mujeres, pero las consecuencias m谩s probables en el caso de los hombres es tendencia aumentar el sexismo con la edad y una normalizaci贸n de los modelos disfuncionales presenciados; mientras que las mujeres tienden a perpetuar la conducta de sumisi贸n, pasividad y dependencia en generaciones posteriores.
Si no reciben ayuda psicol贸gica, esta huella perdurar谩 en sus relaciones futuras y tambi茅n en otros entornos, dado que esa afectaci贸n emocional y cognitiva o huella psicol贸gica les dificulta la adaptaci贸n social, generando problemas de interacci贸n y de rechazo social y laboral o incluso de relaci贸n materno-filial, en caso de tener hijos o hijas.
Sobreponerse con el paso del tiempo
Las personas tenemos una gran capacidad de recuperaci贸n, resiliencia y adaptaci贸n, pero el tiempo no lo cura todo. Podemos sobreponernos, reducir la huella de la violencia psicol贸gica, pero esto va a depender fundamentalmente de las fortalezas individuales y de las opciones de ayuda.
Se ha comprobado que una detecci贸n precoz y la intervenci贸n temprana especializada multidisciplinar es clave para la recuperaci贸n de las menores expuestas a la violencia de g茅nero. Hay distintos factores de protecci贸n que ayudan a reducir el da帽o.
La clave es la ayuda psicosocial e intervenci贸n psicol贸gica. Es necesario trabajar en la erradicaci贸n de los estereotipos de g茅nero (que fomentan la sumisi贸n y dependencia emocional de ni帽as y mujeres), en la visibilizaci贸n del problema y en el trabajo de recuperaci贸n de todas las v铆ctimas, atendiendo a las distintas secuelas en funci贸n del g茅nero.
Se ha comprobado que algunos factores psicosociales como contar con mayor resiliencia o inteligencia emocional ayudan a prevenir sufrir violencia y permiten recuperarse m谩s r谩pidamente.
Sin embargo, este problema es tan complejo e implica tantos actores y decisiones que es dif铆cil fijar un periodo de tiempo concreto (desde uno o dos a帽os despu茅s de una ruptura total con la persona abusiva, sea madre, padre, amigos o pareja, hasta toda la vida reconstruy茅ndose, o incluso recuperarse en solitario, pero de manera parcial) para superarlo. Pero lo que est谩 claro es que sin ayuda es mucho m谩s dif铆cil.
*Esther Lopez-Zafra, Catedr谩tica de Psicolog铆a Social, Universidad de Ja茅n