En el último mes, Polonia ha acogido a 2,3 millones de refugiados, más que cualquier otro país europeo.
Los costes de alojamiento, atención sanitaria y alimentación son cada vez mayores. El gobierno polaco pide ayuda.
Adam Niedzielski, ministro de Sanidad polaco, dijo en Bruselas:
"Los costes mensuales de la asistencia sanitaria de los refugiados ascienden a cientos de millones de zlotys. La solidaridad europea a este respecto no debería ser un eslogan declarativo, sino que debería traducirse en un apoyo real y financiero, porque Polonia está soportando los costes más altos, la carga más pesada".
Llegada de los refugiados a Polonia
Para los ucranianos que llegan a la frontera polaca hay una sensación de alivio al llegar a un lugar seguro.
"Tuvimos que huir cuando las tropas rusas ocuparon nuestra ciudad. Los niños ya no podían ir a la escuela ni a la guardería. Yo tampoco podía ir a trabajar porque mi empresa también fue ocupada", explica Olha Kovalyova, refugiada ucraniana.
Nikolay Nazarov, refugiado ucraniano, afirma: "Mi padre tuvo tres derrames cerebrales, no puede moverse por si mismo. Llegar aquí fue complicado, pero la gente nos ayudó durante el viaje, nos ayudaron con nuestro equipaje y eso hizo el viaje más fácil".
Desde Polonia muchos ucranianos marchan a otros países pero, para el resto, no hay más alternativa que quedarse y esperar la paz.
Euronews