Una joven militante elegida para liderar el centro-izquierda
¿Podr谩 Elly Schlein acercar de nuevo los sectores populares a la pol铆tica?
Sergio Ferrari, desde Florencia, Italia
No alcanz贸 a ser un terremoto; sin embargo, el domingo 26 de febrero vibr贸 el piso institucional italiano. La joven candidata Elly Schlein, de apenas 37 a帽os, gan贸 las elecciones internas del Partido Democr谩tico y fue designada nueva secretaria general del mismo.
Con cerca de 600 mil votos, que representa el 53.75% de casi 1 mill贸n cien mil electores, se impuso a Stefano Bonaccini, el candidato “oficialista” de la principal fuerza de centro izquierda de Italia. El Partido Democr谩tico (PD), nacido en 2007 de la confluencia de comunistas y democristianos, (https://www.
Joven, lesbiana, dirigente at铆pica
Aunque las encuestas no le daban a Schlein grandes posibilidades de triunfo, los que concurrieron a estas primarias optaron mayoritariamente por ella. Elena Ethel “Elly” Schlein, nacida en Lugano (Suiza italiana) en 1985, vivi贸 un recorrido pol铆tico particular. Luego de su graduaci贸n como jurista en la Universidad de Bolonia, viaj贸 en 2008 y en 2012 a Estados Unidos (posee la triple ciudadan铆a italiana, suiza y estadounidense) para enrolarse como voluntaria en las campa帽as electorales de Barack Obama.
En 2013 trabaj贸 en la producci贸n del documental Anija-La nave de Roland Sejko, que trata sobre el 茅xodo alban茅s a Italia en la d茅cada de 1990 y que obtuvo en 2013 el premio David di Donatello.
Un a帽o antes, en 2012, se afili贸 al Partido Democr谩tico de Italia, y en 2014 gan贸 en un esca帽o en las elecciones para el Parlamento Europeo. All铆 trabaj贸, en particular, en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y la cooperaci贸n internacional, as铆 como en la Comisi贸n de Investigaci贸n sobre los Panama Papers, la lucha contra las mafias, las pol铆ticas migratorias y la reforma del Reglamento de Dubl铆n, instrumento que define la restrictiva pol铆tica inmigratoria europea.
Ya en ese tiempo sobresali贸 por su oposici贸n a Mateo Renzi, camarada de Schlein en el mismo PD, y por entonces primer ministro de Italia. La hoy secretaria general, combati贸 el conjunto de leyes que impulsaba Renzi para favorecer la liberalizaci贸n del mercado de trabajo.
En 2015 particip贸 activamente en la campa帽a «Occupy PD», iniciativa impulsada por j贸venes militantes del partido que intervinieron diversas sedes de la organizaci贸n para exigir pol铆ticas m谩s de izquierda. Desilusionada por la visi贸n partidaria dominante, Schlein abandon贸 el PD, al cual regres贸 hace apenas unos meses para disputar y ganar una banca de diputada nacional en las legislativas de septiembre pasado y candidatearse al puesto de secretaria general, que conquist贸 el 煤ltimo domingo de febrero.
El cotidiano progresista Il Manifesto present贸 el perfil de esta joven militante en su edici贸n del 28 de febrero (https://ilmanifesto.it/la-
En su comentario en Il Manifesto, la periodista Norma Rangeri recuerda que en alg煤n momento se pens贸, equivocadamente, que el Partido Democr谩tico podr铆a promover la convergencia unitaria de todas las organizaciones m谩s peque帽as a su izquierda, algo que no se concret贸. Seg煤n ella, la inesperada afirmaci贸n --o confirmaci贸n-- de Schlein reaviva la esperanza de la gente de izquierda, dispersa entre el PD, el Movimiento 5 Stelle (Movimiento 5 Estrellas), la Sinistra Italiana (Izquierda Italiana), los Verdes y las dem谩s formaciones peque帽as. Para la editorialista, Elly Schlein podr铆a convertirse en la l铆der de un amplio frente progresista, “capaz de volver a poner en marcha aparatos partidarios ahora inactivos y oxidados, estimular pasiones pol铆ticas apagadas, devolver la confianza a un ej茅rcito de descontentos, empujar a los m谩s j贸venes a participar y reactivar a un pueblo duramente herido por la victoria electoral de la peor derecha de la Italia de posguerra”.
Para ello, especula Rangeri, “deber谩 derribar nada menos que la pir谩mide del PD, su cristalizada din谩mica interna y su propia visi贸n no conflictiva del pa铆s. Y tambi茅n romper con la historia de la izquierda, marcada por continuas escisiones, rupturas y divisiones”. “Si puede conseguirlo o no, pronto lo veremos”, concluye Rangeri.
Voces de abajo, desaf铆os program谩ticos
“Aunque estoy contenta y sorprendida con el resultado, no pienso que Schlein pueda lograr un cambio de l铆nea esencial del Partido Democr谩tico, que no es anti capitalista”, reflexiona Maria Agnese Cardini, durante a帽os empleada en el sector de los servicios sociales de la comuna de Florencia.
Cardini, una activa militante antiguerra y comprometida con los migrantes indocumentados, nunca vot贸 al PD, pero de todos modos tiene la esperanza de que la nueva secretaria general del partido pueda significar un cambio en la visi贸n del mismo con respecto a la defensa de derechos esenciales. “Derecho al trabajo; derecho a la diversidad y a favor de la causa LGBTIQ+ y, en particular, el derecho de los migrantes a trasladarse libremente a Italia y gozar de una acogida digna de un pa铆s civilizado”.
Mauro Rubichi, ex obrero portuario y ex dirigente sindical de la ciudad de Livorno, resalta un hecho significativo en la elecci贸n de Elly Schlein: “Pudo votar todo el mundo, no s贸lo los afiliados al Partido Democr谩tico, lo que permiti贸 una participaci贸n significativa de mujeres y j贸venes, que no son muchos en el PD”.
Seg煤n Rubichi, quien adem谩s es militante internacionalista y promotor desde a帽os de proyectos solidarios en el sector de la salud en Centroam茅rica, esta participaci贸n abierta “dio un vuelco al resultado”. Por otra parte, cree positivo que Schlein se haya pronunciado a favor de “superar las diferencias sociales”.
La crisis las ha aumentado, sostiene Rubichi, y en los 煤ltimos a帽os el PD poco hizo para superar esta brecha social creciente. “Superar dichas diferencias implica tambi茅n cambiar las relaciones entre el Norte enriquecido y el Sur global empobrecido. Esperamos que esta nueva etapa del PD signifique una mayor solidaridad internacional”, puntualiza.
Otro tema donde se identifica con los anuncios de la hoy secretaria general del PD es la reducci贸n del desempleo, en particular entre los j贸venes, que es muy alto. Y tambi茅n le reivindicaci贸n y continuidad de la lucha para proteger la Tierra del amenazante cambio clim谩tico. Para Rubichi, el planeta corre “un peligro grave de muerte si no intervenimos con decisiones inteligentes y coherentes”. Sin duda, agrega, la sensibilidad de Schlein con respecto a la crisis del clima “constituy贸 una de las razones por las que muchos j贸venes la hayan votado”. Y sostiene que si la nueva dirigente de centro-izquierda debe confrontase con un desaf铆o esencial, 茅ste consiste en “acercarse realmente a la gente, mucha de la cual hoy se muestra desilusionada con la pol铆tica, los partidos y las instituciones”.
“No es un rostro nuevo”
Imposible de no reconocer algunos aspectos positivos del perfil de la nueva secretaria del PD, “joven, mujer y lesbiana. Lo que expresa que son temas que ya no pueden ser marginalizados del debate de sociedad en nuestro pa铆s”, afirma Maurizio Coppola, activista en Je so’pazzo (Soy loco) de N谩poles, antigua prisi贸n psiqui谩trica ocupada y transformada en centro socio-cultural alternativo.
Sin embargo, para Coppola, quien es tambi茅n uno de los fundadores de la organizaci贸n extraparlamentaria de izquierda Potere al Popolo (Poder al Pueblo). es incorrecto presentar a Schlein como una cara nueva, expresi贸n de renovaci贸n, ya que “ella est谩 en la vida pol铆tica desde a帽os, representa estructuras viejas y ha sido parte de los conflictos hist贸ricos del PD” (https://poterealpopolo.org/). Y se帽ala que no es adecuado exagerar el entusiasmo que su candidatura produjo en las masas y asombrarse por el n煤mero de votantes que participaron el 26 de febrero. Por el contrario, Coppola enfatiza que “lo que se observa es una ca铆da tendencial significativa de la participaci贸n en esas elecciones internas”. Su reflexi贸n coincide con un art铆culo reciente del cotidiano Il sole-24 Hore que confirma el descenso constante de los votantes en las internas del PD desde 2007 hasta la fecha. “De los 3.5 millones que participaron en la elecci贸n de Walter Veltroni, se pas贸 a 1.6 millones en 2019 para la elecci贸n de Nicola Zingaretti”, y se llega a 1.1 millones el 煤ltimo domingo de febrero. “Amplios sectores populares no se sienten representados ni por el Estado, ni en los partidos tradicionales”, reflexiona el militante de izquierda.
Y subraya que la crisis de confianza de la gente con respecto a la pol铆tica, desmitifica, adem谩s, un argumento que viene propag谩ndose en los 煤ltimos d铆as: “No es verdad que una sola persona, en este caso Elly Schlein, podr谩 introducir, por voluntad propia, cambios internos sustanciales. Si no logra reactivar la participaci贸n real desde abajo, de las clases populares a partir del territorio, desde las comunidades locales, desde la base, no podr谩 cambiar la pol铆tica partidaria. Incluso hay un gran riesgo, que desde ya lo observamos como una posibilidad cierta: que termine siendo totalmente absorbida por la estructura del partido”.
Al margen de los avances en temas sociales que Schlein puede intentar impulsar, hay un aspecto que Coppola considera esencial para desalentar las expectativas desmedidas que algunos medios de comunicaci贸n y partidarios asocian con ella: “no va a romper con la visi贸n atlantista y europe铆sta de militarizaci贸n de la confrontaci贸n Rusia-Ucrania, es decir, de la guerra de Rusia contra la Alianza Atl谩ntica (OTAN)”. Para el dirigente de Poder al Pueblo, “la l铆nea de la nueva secretaria general se corresponde con la militarizaci贸n creciente del conflicto y la continuidad del env铆o de armas al presidente Zelensky”. Es obvio que, en este plano de la geopol铆tica internacional, “Schlein no significa ni una ruptura con la pol铆tica del PD ni tampoco con la del Gobierno de Meloni”, concluye Coppola.
Las expectativas de renovaci贸n pol铆tica que desataron los comicios del domingo 26 de febrero al proyectar al primer plano a Elly Schlein, as铆 como las pol茅micas sobre su capacidad (y voluntad) para promover cambios estructurales, despertaron la adormecida vida pol铆tica italiana. Pase lo que pase, un hecho aparece como novedoso: por primera vez en la historia del pa铆s dos mujeres animar谩n la pulseada en lo m谩s alto de la c煤spide del poder. Meloni tiene, a partir del 26 de febrero, una nueva e inesperada contrincante, que aun en el caso de promover propuestas reformistas puede llegar a jaquear --e incluso hacer trastabillar-- a la hoy omnipotente extrema derecha italiana inspirada en el nost谩lgico glosario mussoliniano.