En 2022, Amnistía Internacional registró 883 ejecuciones en 20 países, lo que supuso un aumento del 53% respecto de las 579 ejecuciones registradas en 2021. Se trata del número más alto de ejecuciones documentadas por Amnistía Internacional en los últimos 5 años (desde 2017, cuando se registraron 993 ejecuciones).
China siguió siendo el principal ejecutor del mundo, aunque se sigue ignorando la verdadera magnitud del uso de la pena de muerte en ese país al estar este dato clasificado como secreto de Estado. La cifra global registrada por Amnistía Internacional excluye los miles de ejecuciones que se cree que se han llevado a cabo en China, así como las realizadas en Vietnam y Corea del Norte, donde Amnistía Internacional cree que se usó ampliamente la pena de muerte.
La mayoría de las ejecuciones conocidas se llevaron a cabo en China (miles), Irán (al menos 576), Arabia Saudí (196), Egipto (24) y Estados Unidos (18).
El 93% de las ejecuciones documentadas en el mundo (excluida China) en 2022 se llevaron a cabo en Oriente Medio y el Norte de África.
Las 196 ejecuciones registradas en Arabia Saudí representaron la cifra anual más alta conocida en el país en 30 años.
Se tuvo constancia de que fueron ejecutadas un total de 13 mujeres en el mundo: Irán (12), Arabia Saudí (1).
Amnistía Internacional documentó ejecuciones en 20 países frente a los 18 de 2021.
Violación del derecho internacional
Se documentaron 325 ejecuciones por delitos de drogas: 255 en Irán, 57 en Arabia Saudí, 11 en Singapur y en China. En el cálculo del total global de ejecuciones que se llevaron a cabo por delitos de drogas, se incluyeron 2 en China con arreglo a la metodología de investigación de Amnistía Internacional.
Se tuvo constancia de al menos 3 ejecuciones públicas en Afganistán (+1) e Irán (2).
En Irán, al menos 5 personas fueron ejecutadas por delitos que se habían cometido cuando eran menores de 18 años.
Reanudación de las ejecuciones
Se reanudaron las ejecuciones en cinco países: Afganistán, Kuwait, Myanmar, Palestina (Estado de) y Singapur.
Botsuana, Emiratos Árabes Unidos y Omán llevaron a cabo ejecuciones en 2021, pero no ejecutaron a nadie en 2022.
Se utilizaron durante 2022 los siguientes métodos de ejecución: decapitación, ahorcamiento, inyección letal y muerte por arma de fuego.
Condenas a muerte en el mundo
En 2022, se impusieron al menos 2.016 nuevas condenas a muerte en 52 países, frente a al menos 2.052 en 56 países en 2021.
Amnistía Internacional registró conmutaciones o indultos de la pena de muerte en 26 países.
Cinco países —Bahréin, Comoras, Corea del Sur, Laos y Níger— impusieron condenas a muerte después un periodo de interrupción.
Amnistía Internacional registró al menos 28 exoneraciones de personas condenadas a muerte en cuatro países: Estados Unidos (2), Kenia (20), Marruecos y el Sáhara Occidental (1), y Zimbabue (5).
Globalmente, al concluir 2022, había al menos 28.282 personas condenadas a muerte.
Abolición de la pena de muerte
En 2022, seis países abolieron la pena de muerte para todos los delitos (Kazajistán, Papúa Nueva Guinea, República Centroafricana y Sierra Leona) o parcialmente (Guinea Ecuatorial y Zambia, que la abolieron sólo para los delitos comunes).
Al concluir 2022, 112 países eran abolicionistas para todos los delitos y 9, sólo para los delitos comunes.