OPINI脫N de Eduardo Madro帽al Pedraza
Si hay algo venenoso en los medios de comunicaci贸n monopolistas -salvo honradas excepciones- es la colaboraci贸n en la persistente confusi贸n creada para que la gente nos miremos el ombligo, para que no seamos conscientes del verdadero peligro, del aut茅ntico enemigo. Y sin embargo los centros de poder estadounidense y europeo vienen anunciado, a bombo y platillo, las ineludibles exigencias esenciales a las que tendr谩 que responder el nuevo gobierno, sea del color que sea. Tanto Washington como Bruselas coinciden en dos: la continuidad del atraco monopolista con la inflaci贸n y el expolio financiero con los tipos de inter茅s altos; y la obligaci贸n del gobierno de cumplir lo firmado con Bruselas aplicando los recortes necesarios para reducir el d茅ficit y la deuda.
Desde Washington, el Fondo Monetario Internacional (FMI) -en su informe sobre las perspectivas de la econom铆a mundial- pregona el fin de las medidas que se tomaron para paliar los efectos de la pandemia y la invasi贸n rusa de Ucrania -cuyos costes se cargaron como gasto p煤blico del Estado- para proteger a los bancos y los monopolios. Y se unifica con el Federal Reserve System (FED) -el banco central de Estados Unidos- y el Banco Central Europeo (BCE) fijando como “prioridad pol铆tica n煤mero uno, la inflaci贸n” y recomendando “que se mantengan los tipos de inter茅s altos el tiempo que sea necesario”, seg煤n ha declarado su directora Kristalina Georgieva, pese a reconocer el impacto negativo sobre los trabajadores y la asfixia de las familias.
Y ah铆 est谩 el veneno. Mantener los tipos de inter茅s altos para que la banca y los monopolios aumenten sangrantemente sus beneficios, mientras la inmensa mayor铆a social -pymes, aut贸nomos, trabajadores, pensionistas, familias y el resto de la gente- se empobrece y se asfixia.
El FMI asegura que a nivel mundial la econom铆a se ralentizar谩 en 2023, sobre todo en la Eurozona donde augura un crecimiento m铆nimo del 0,9% en 2023. Y aunque reconoce que Espa帽a podr铆a crecer por encima de la media europea, urge a los gobiernos -especialmente de los pa铆ses de la Eurozona con m谩s deuda y m谩s d茅ficit, entre ellos a nuestro pa铆s- a luchar contra la inflaci贸n recuperando una de sus viejas recetas: hacer recortes y subir impuestos al 90%; no a la banca y los monopolios, ¡dios nos libre!
Bruselas: el regreso a la disciplina fiscal, es decir, recortes a la mayor铆a
A partir de la primavera del pr贸ximo a帽o los pa铆ses de la Uni贸n Europea tendr谩n que volver a cumplir las reglas fiscales fijadas por Bruselas. El futuro gobierno, sea del color que sea, tiene que enfrentarse a las exigencias de la UE, y el dilema es obedecer o defender la soberan铆a nacional.
Bruselas acaba de aprobar una revisi贸n del Pacto de Estabilidad Fiscal. El nuevo pacto mantiene en el 3% los l铆mites del d茅ficit p煤blico y en el 60% del PIB el nivel de la deuda. Espa帽a, con un d茅ficit que ronda el 3,9% y una deuda p煤blica del 113% est谩 en el bloque de pa铆ses con mayores desequilibrios, junto con Francia, Italia, B茅lgica, Portugal y Grecia. Los pa铆ses con d茅ficit y deuda excesiva por encima de esas cifras deber谩n negociar con Bruselas una senda de ajuste adaptada a su coyuntura econ贸mica, pero con un ajuste m铆nimo anual del 0,5% del PIB. Bruselas adem谩s actuar谩 contra los pa铆ses que no respeten ese objetivo o no acaten las recomendaciones.
El gobierno de coalici贸n env铆o a finales de mayo una actualizaci贸n del Plan de Recuperaci贸n aprobado en 2021, donde se compromet铆a -entre otras cosas- a bajar el d茅ficit al 3% en 2024 para recibir los pagos pendientes de subvenciones y acceder a los 84.000 millones en pr茅stamos. Pero en Bruselas exigen m谩s con las “recomendaciones de obligado cumplimiento” que ha de cumplir Espa帽a.
A partir de la primavera de 2024 la Comisi贸n Europea iniciar谩 la apertura de procedimientos por d茅ficit excesivos sobre los datos de 2023. La Comisi贸n emplazar谩 al nuevo gobierno a un ajuste fiscal, no del 0,5%, sino del 0,7%, es decir: recortes por 9.450 millones de euros anuales que van a marcar los presupuestos del pr贸ximo a帽o que se aprueben. Y pedir谩 al nuevo gobierno que retire las medidas para contener la inflaci贸n -como las ayudas fiscales a los alimentos, a los combustibles o las ayudas del transporte y a los alquileres- y, adem谩s, pedir谩 “m谩s 茅nfasis” en el control de la deuda. A partir de 2024 tendr谩 cuatro a帽os para reducir el m铆nimo del 1% anual.
Y la OTAN exige m谩s gasto militar, es decir, recortes sociales
Las exigencias al nuevo gobierno no vienen s贸lo del FMI y Bruselas, tambi茅n la OTAN y EEUU presionan para que los miembros de la Alianza, incluida Espa帽a, aumenten sus gastos de defensa hasta el 2% del PIB. Un objetivo que el gobierno de coalici贸n se ha comprometido a cumplir progresivamente desde el 1,2% actual hasta alcanzar el 2% en 2029; lo que supondr谩 casi duplicar los gastos actuales de defensa, casi 11.000 millones de euros m谩s cada a帽o. Una exigencia que aumenta a煤n m谩s los recortes que se le van a reclamar al nuevo gobierno, y que supone m谩s los recortes sociales, de sanidad y educaci贸n.
La alternativa, redistribuir la riqueza y defender la soberan铆a nacional
La 煤nica alternativa es una reindustrializaci贸n de Espa帽a -no decidida por la inversi贸n extranjera-, una industria propia -decidiendo nosotros mismos en qu茅 invertimos-, con un proyecto de pa铆s, de redistribuir la riqueza, de invertir en educaci贸n, cultura y ciencia para que toda la juventud que estamos preparando no tenga que irse al extranjero. Pero para eso hace falta que paguen los bancos y los monopolios lo que no pagan -para que el Estado no se endeude con ayudas paliativas- eso es realmente redistribuir la riqueza y defender la soberan铆a nacional.
Eduardo Madro帽al Pedraza