OPINIÓN de Teodoro Rentería Arróyave
La gobernabilidad del estado de Nuevo León está garantizada tras la renuncia del fiscal, Luis Enrique Orozco al interinato de la gubernatura que le había otorgado el Congreso de la entidad y de haber sido avalado por la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
En efecto, Luis Enrique Orozco, renunció a dicho interinato tras el regreso de Samuel García a la primera magistratura de ese estado norteño y explicó que su renuncia como gobernador interino es para garantizar la paz y la gobernabilidad en Nuevo León.
En Breves palabras está es la historia del affaire nuevoleonense, Dante Delgado presidente del partido Convergencia Ciudadana, invitó al gobernador Samuel García para que fuera el abanderado de dicho partido a la Presidencia de la República.
Tal decisión provocó una serie de especulaciones, la mayoría de ellas de chocantes aberraciones, como son entre otras, que tal precandidatura, ahora ya cancelada o superada, obedecía a directrices expresas del presidente, Andrés Manuel López Obrador para restarle a Xóchitl Gálvez, precandidata de la alianza opositora, el voto de la juventud sufragante.
Además, existe una regla no escrita pero siempre cumplida, en el sentido de que ante una licencia temporal o definitiva del Ejecutivo federal o de los gobernadores de las entidades federativa o estatales, siempre se nombra al interino o al sustituto a un personaje del mismo mismo partido.
Esta regla de oro, no fue respetada, el Congreso de Nuevo León nombró a Luís Enrique Orozco, antípoda de Samuel García, y de ahí el caos de la ingobernabilidad cuando Samuel García decidió regresar a la gubernatura que le había dado la ciudadanía en las urnas.
Lo menos que dijo, es que no permitiría que un gobernador “espurio”, asumiera el alto cargo. Desde el lunes pasado se vislumbró el arreglo de congruencia, cuando el presidente del Congreso. Mauro Guerra, después de una larga perorata ofreció al gobernador Samuel García un arreglo en base a la negociación.
Así sucedió, Luis Enrique Orozco renunció como gobernador interino de Nuevo León para “garantizar la paz y la gobernabilidad del estado”, tras el regreso de Samuel García, quien el pasado 2 de diciembre anunció que declinaba la licencia temporal y en consecuencia la postulación de candidato a la Presidencia de la República por Movimiento Ciudadano.
“He decidido, en ánimo de garantizar la paz y la gobernabilidad de este estado, hacerme a un lado y renunciar al cargo de gobernador interino”, anunció por su parte, Orozco en conferencia de prensa acompañado por el presidente del Congreso de Nuevo León, Mauro Guerra.
Luis Enrique Orozco solicitó ipso facto, licencia a su cargo como gobernador interino de Nuevo León, a fin de que sea aprobada por el Congreso local y que Samuel García pueda retomar el cargo de gobernador del estado. El exfuncionario pidió que dicho procedimiento sea atendido de manera urgente por los legisladores del estado.
“Lo que yo busco con esta decisión es zanjar el camino de la ingobernabilidad, de que los ciudadanos de Nuevo León piensen que hay dos personas en el cargo”, comentó en entrevista con medios.
Adelantó que tras dejar el cargo como gobernador interino podría dedicar tiempo a su familia, ya que por ahora está impedido para regresar a la Fiscalía del estado debido al cargo al que fue nombrado por el Congreso local tras la solicitud de licencia de Samuel García; sin embargo, dijo que, antes de asumir el interinato había recibido otras ofertas de trabajo, las cuales valorará.
Finalmente, el presidente del Congreso, Mauro Guerra, declaró textual; “Hoy queremos anunciar a la sociedad que previo diálogo y por común acuerdo, en un acto de profundo compromiso con Nuevo León, teniendo el aval de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y anteponiendo el interés público ha decidido el gobernador interino, Luis Orozco, hacerse a un lado con el fin de que se pueda procesar el regreso de Samuel García”.
Por su parte, Luis Enrique Orozco, aceptó que intercambió algunos mensajes con Samuel García y que estaba previsto que la tarde de este lunes 4 de diciembre se reunieran. Lo importante es que como personas civilizadas en base al diálogo y la negociación se zanjó el problema de ingobernabilidad. Que el ejemplo cunda para solucionar problemas tan graves como el del Estado de Morelos. DECISIÓN DE CONGRUENCIA PARA BIEN DEL ESTADO DE NUEVO LÉON.
