Las altas temperaturas, el viento y la falta de precipitaciones son combustible para las llamas que estos días asolan buena parte del sur del Viejo Continente
En Portugal, al menos 14 personas, entre ellas 11 bomberos, resultaron heridas tras declararse el domingo un incendio forestal en Cascais, cerca de la capital del país, Lisboa, según informa la prensa local.
Los 14 heridos fueron trasladados a un hospital para ser examinados después de haber inhalado humo, pero no necesitaron ningún tipo de tratamiento añadido, informaron los medios locales.
Al parecer, el incendio se declaró poco después del mediodía y causó daños en un centro ecuestre. Los bomberos procedieron a la evacuación de 30 caballos que se encontraban en la zona en ese momento.
Entretanto, en Macedonia del Norte siguen activos siete incendios forestales siguen activos. La situación es peor entre las ciudades de Štip y Negotino, donde las llamas se extienden hasta 30 kilómetros en el monte Serta, en el centro-este del país. Las autoridades afirman que 22 incendios han sido resgistrados o extinguidos.
Otro de los países balcánicos que lucha contra las llamas es Bulgaria. Allí, por séptimo día consecutivo continúan los esfuerzos para tratar de sofocar los incendios forestales localizados en la zona del municipio de Bolyarovo, cerca de la frontera con Turquía, en el sudeste del país.
De momento no hay peligro para las localidades cercanas, pero los focos entre los pueblos de Voden y Kraynovo siguen activos. Entretanto, han llegado a la región los primeros siete contenedores para facilitar el alojamiento temporal de los más necesitados. El fuego ha afectado a unas 73.000 hectáreas de terreno.