“Lost and alone”: la lucha de los niños y niñas no acompañados y separados en el noroeste de Siria y el sur de Turquía tras los terremotos
Informe de World Vision tras cumplirse 18 meses de los seísmos
Madrid, 18 de septiembre de 2024: Un nuevo informe de World Vision revela el profundo impacto de los terremotos de 2023 en los niños y niñas no acompañados y separados en el noroeste de Siria y el sur de Turquía. El exhaustivo estudio muestra lagunas críticas en los datos y servicios que agravan las vulnerabilidades de la infancia:
El informe ha revelado, como una de las principales conclusiones, un aumento significativo del número de niños y niñas no acompañados y separados, muchos de los cuales perdieron el cuidado de sus padres directamente como consecuencia de los terremotos. Además, la falta de datos sobre estos niños y niñas, como su género, discapacidad y condición de refugiados, hace que sean en gran medida invisibles.
Estos niños y niñas no acompañados y separados son cada vez más vulnerables al trabajo infantil, al matrimonio infantil y a severos problemas de salud mental, agravados por medidas de protección inadecuadas y lagunas significativas en los servicios disponibles.
El acogimiento por familiares, sigue siendo la principal forma de acogimiento alternativo en ambas regiones. A pesar de su papel fundamental, este modelo de cuidado recibe un reconocimiento y un apoyo mínimo. Los familiares cuidadores no reciben ayuda estatal, y las respuestas humanitarias a menudo se quedan cortas. Esta falta de apoyo ha provocado un aumento de la acogida residencial no regulada, de las situaciones de vida sin supervisión y de los hogares encabezados por niños, que les exponen a mayores riesgos de protección.
World Vision hace un llamamiento para que se tomen medidas urgentes, entre ellas:
- Mejorar la recopilación y el intercambio de datos sobre los niños y niñas no acompañados y separados, haciendo hincapié en su diversidad y en los diversos sistemas de cuidado alternativo informales y formales, en particular los que están basados en la comunidad.
- Dar prioridad a la prevención de la separación familiar en situaciones de emergencia y mejorar el apoyo a la reunificación familiar.
- Impulsar el apoyo a los padres, las familias y los cuidadores mediante contribuciones financieras y en especie, así como proporcionando apoyo a la salud mental.
- Mejorar el acceso de los menores no acompañados y separados de sus familias a servicios esenciales de calidad, equitativos y específicos, especialmente salud mental y apoyo psicosocial, protección infantil y educación.
- Reforzar las aptitudes y la capacidad del personal de protección de la infancia en ámbitos clave como la prevención de la separación, la gestión de casos, la localización de familias, la reunificación y el fomento de la coordinación intersectorial.
- Garantizar la participación significativa de los menores no acompañados y separados, los cuidadores y los miembros de la comunidad en la planificación y aplicación de políticas y programas.
Emmanuel Isch, director de Respuesta de World Vision en Siria, ha declarado: “El informe integra las percepciones de un amplio espectro de colaboradores, incluidos los cuidadores, los miembros de la comunidad y, sobre todo, los propios niños y niñas sirios no acompañados y separados, que se encuentran entre los más afectados por los terremotos. Esta perspectiva integral subraya la urgencia de nuestro llamamiento a la acción para los responsables políticos y los organismos humanitarios. Debemos priorizar y responder eficazmente a las profundas necesidades de estos niños y niñas vulnerables, garantizando que estén en primera línea de los esfuerzos humanitarios en el conflicto sirio”.
Relatos de algunos de los niños y niñas afectados por los terremotos:
- Una niña de 8 a 12 años de Idleb, compartió: «Antes de los terremotos, me preocupaban los cortes de electricidad y la falta de alimentos. Ahora, temo los derrumbes de edificios y perder a mis abuelos que cuidan de mí».
- Un chico de 13 a 17 años de Gaziantep, compartió: «Trabajé en muchos empleos, como fábricas y talleres, para asegurarnos el sustento para mis hermanos y para mi. No pude seguir estudiando del todo y mi experiencia laboral fue horrible. Trabajaba muchas horas como obrero, pero el sueldo era la mitad que el de un adulto».
- Compartió un niño de 8 a 12 años de Hatay: «Algunos niños han empezado a trabajar recogiendo chatarra de donde se vierten los escombros de la construcción. Estos niños van todos los días a recoger hierro, cobre y aluminio».
- Una chica de 13 a 17 años de Gaziantep: «El miedo se ha convertido en mi compañero. Tengo miedo de cualquier movimiento o sonido. Tengo miedo de perder a mis nuevos seres queridos, mis vecinos y mis amigos, y mi nueva escuela, después de haberme esforzado por encajar en un nuevo lugar al que no pertenezco, sola sin mi madre y mi padre.»
Madrid, 18 de septiembre de 2024: Un nuevo informe de World Vision revela el profundo impacto de los terremotos de 2023 en los niños y niñas no acompañados y separados en el noroeste de Siria y el sur de Turquía. El exhaustivo estudio muestra lagunas críticas en los datos y servicios que agravan las vulnerabilidades de la infancia:
El informe ha revelado, como una de las principales conclusiones, un aumento significativo del número de niños y niñas no acompañados y separados, muchos de los cuales perdieron el cuidado de sus padres directamente como consecuencia de los terremotos. Además, la falta de datos sobre estos niños y niñas, como su género, discapacidad y condición de refugiados, hace que sean en gran medida invisibles.
Estos niños y niñas no acompañados y separados son cada vez más vulnerables al trabajo infantil, al matrimonio infantil y a severos problemas de salud mental, agravados por medidas de protección inadecuadas y lagunas significativas en los servicios disponibles.
El acogimiento por familiares, sigue siendo la principal forma de acogimiento alternativo en ambas regiones. A pesar de su papel fundamental, este modelo de cuidado recibe un reconocimiento y un apoyo mínimo. Los familiares cuidadores no reciben ayuda estatal, y las respuestas humanitarias a menudo se quedan cortas. Esta falta de apoyo ha provocado un aumento de la acogida residencial no regulada, de las situaciones de vida sin supervisión y de los hogares encabezados por niños, que les exponen a mayores riesgos de protección.
World Vision hace un llamamiento para que se tomen medidas urgentes, entre ellas:
- Mejorar la recopilación y el intercambio de datos sobre los niños y niñas no acompañados y separados, haciendo hincapié en su diversidad y en los diversos sistemas de cuidado alternativo informales y formales, en particular los que están basados en la comunidad.
- Dar prioridad a la prevención de la separación familiar en situaciones de emergencia y mejorar el apoyo a la reunificación familiar.
- Impulsar el apoyo a los padres, las familias y los cuidadores mediante contribuciones financieras y en especie, así como proporcionando apoyo a la salud mental.
- Mejorar el acceso de los menores no acompañados y separados de sus familias a servicios esenciales de calidad, equitativos y específicos, especialmente salud mental y apoyo psicosocial, protección infantil y educación.
- Reforzar las aptitudes y la capacidad del personal de protección de la infancia en ámbitos clave como la prevención de la separación, la gestión de casos, la localización de familias, la reunificación y el fomento de la coordinación intersectorial.
- Garantizar la participación significativa de los menores no acompañados y separados, los cuidadores y los miembros de la comunidad en la planificación y aplicación de políticas y programas.
Emmanuel Isch, director de Respuesta de World Vision en Siria, ha declarado: “El informe integra las percepciones de un amplio espectro de colaboradores, incluidos los cuidadores, los miembros de la comunidad y, sobre todo, los propios niños y niñas sirios no acompañados y separados, que se encuentran entre los más afectados por los terremotos. Esta perspectiva integral subraya la urgencia de nuestro llamamiento a la acción para los responsables políticos y los organismos humanitarios. Debemos priorizar y responder eficazmente a las profundas necesidades de estos niños y niñas vulnerables, garantizando que estén en primera línea de los esfuerzos humanitarios en el conflicto sirio”.
Relatos de algunos de los niños y niñas afectados por los terremotos:
- Una niña de 8 a 12 años de Idleb, compartió: «Antes de los terremotos, me preocupaban los cortes de electricidad y la falta de alimentos. Ahora, temo los derrumbes de edificios y perder a mis abuelos que cuidan de mí».
- Un chico de 13 a 17 años de Gaziantep, compartió: «Trabajé en muchos empleos, como fábricas y talleres, para asegurarnos el sustento para mis hermanos y para mi. No pude seguir estudiando del todo y mi experiencia laboral fue horrible. Trabajaba muchas horas como obrero, pero el sueldo era la mitad que el de un adulto».
- Compartió un niño de 8 a 12 años de Hatay: «Algunos niños han empezado a trabajar recogiendo chatarra de donde se vierten los escombros de la construcción. Estos niños van todos los días a recoger hierro, cobre y aluminio».
- Una chica de 13 a 17 años de Gaziantep: «El miedo se ha convertido en mi compañero. Tengo miedo de cualquier movimiento o sonido. Tengo miedo de perder a mis nuevos seres queridos, mis vecinos y mis amigos, y mi nueva escuela, después de haberme esforzado por encajar en un nuevo lugar al que no pertenezco, sola sin mi madre y mi padre.»