EFE | París - 7 septiembre, 2024
La afgana Zakia Khudadadi se ha convertido en la primera refugiada en lograr una medalla en unos Juegos Paralímpicos al conseguir en París el bronce en taekwondo, en la categoría K44 de -47 kilos.
Zakia Khudadadi, afectada de polio, compite sin parte del brazo izquierdo. Para evitar que la acosaran, desde los siete hasta los quince años solía cubrirse la mano con un pañuelo grande para ocultar su discapacidad, algo que la llevó a pensar en el suicidio.
Representó a Afganistán en los Juegos Paralímpicos de Tokio y quedó novena. Ese mismo año se marchó a Francia y comenzó a residir en París. Entrena junto a atletas franceses y el entrenador Haby Niare.
En el tatami del Grand Palais de París ha conseguido ahora un hito histórico al subir al podio para recoger un bronce junto con la marroquí Naoual Laarif. El oro ha sido para la peruana Leonor Angelica Espinoza y la plata para la uzbeka Ziyodakhon Isakova.
El equipo de refugiados más grande de la historia
El Equipo Paralímpico de Refugiados (RPT) de los Juegos de París está integrado por ocho deportistas y un guía, el más grande de la historia al contar con nueve miembros, representando a más de 120 millones de personas que se han visto obligadas a huir de la guerra, la persecución y los abusos de los derechos humanos.
Por tercera edición consecutiva tras su debut en los Juegos de Río 2016, un equipo paralímpico de refugiados compite en la mayor cita del deporte internacional de personas con discapacidad. Radicados en seis países, éstos atletas compiten en seis disciplinas: atletismo, halterofilia, tenis de mesa, taekwondo, triatlón y esgrima en silla de ruedas.