Por Mauricio Casta帽o H
Historiador
Colombiakr铆tica
Los sentidos modelan nuestro cuerpo, ellos captan y nos informan del mundo exterior. La vista y el o铆do nos entregan el arte con las pinturas y la m煤sica. Poco a poco la degustaci贸n ha ido ganando, en los buenos paladares una experiencia est茅tica, sensitiva. El tacto y el olfato no son tan protag贸nicos en nuestra cultura, no han sido explotados para entregar sensaciones art铆sticas.
La est茅tica tiene la posibilidad de transformar los estados del cuerpo en alegr铆a, en disfrute, por ejemplo. La piel del cuerpo es membrana, borde com煤n que comunica el adentro y el afuera. Una experiencia exterior nos afecta para bien o para mal en el interior de nuestro cuerpo, nos alegra con est铆mulos placenteros o nos paraliza con hechos de miedo. La piel misma es lienzo, es mapa t谩ctil, es el sello propio en en que un hombre o una mujer modelan frente al espejo la imagen para presentarse ante los dem谩s.
Estesia quiere decir sentir y por tanto 茅xtasis quiere decir fuera de s铆 mismo. Interactuamos con el afuera en la variedad, multiplicidad, en la mezcla que conlleva la experimentaci贸n, la vida misma. No es gratuito que homo sapiens quiere decir hombre que gusta. La cultura se compone de cuerpo y sentidos. El gusto fundamenta la existencia, lo sensorial es fondo emp铆rico, est茅tica es el placer de los sentidos. Variedad continua es la mezcla. La vida avanza negociando multiplicidades.
Contrario al sentir, a la estesia, es la anestesia, el no sentir, privaci贸n de los sentidos y sus sensaciones. Nuestra cultura con sus mass media embotan a diario nuestros o铆dos y la vista con publicidad, im谩genes o informaci贸n a favor o en contra seg煤n sean los intereses, la manipulaci贸n es cosa de diario vivir. Esto es anestesiar los cuerpos, privarlos de sentidos, de sentir, de vivir. Otro tanto sucede con los drogos que de tanto consumir endurecen su piel con sus poros taponados, se enajenan, evaden la realidad que les ha tocado vivir.
As铆 las cosas, se precisa de sentir, experimentar, captar el mundo, vivirlo con los cinco sentidos. La cultura se compone de cuerpos y sus sensaciones entregados por los sentires.