‘Tu memoria colectiva’ reivindica el papel de EFE en la construcción del imaginario colectivo a través de las miles de fotografías que publica a diario y que alimentan un archivo con más de 25 millones de imágenes.
Entre esas fotos ya figuran las de la catástrofe ocasionada por la lluvia en las provincias de Valencia y Albacete, que, dos semanas después, sigue generando instantáneas de gran impacto.
“Hemos querido poner la mirada en la tragedia que han sufrido los afectados por la dana, como homenaje a las víctimas mortales, a los desaparecidos y a sus familias; a todos aquellos que lo han perdido todo”, ha afirmado el presidente de la Agencia EFE, Miguel Ángel Oliver, quien ha recordado que, en coherencia, “EFE, como servicio público, ha servido en abierto todos sus contenidos para España y el mundo”.
Cientos de coches arrastrados por el agua y amontonados en las calles; viviendas engullidas por el caudal; la marcha de miles de voluntarios hacia los pueblos incomunicados con palas, cepillos y víveres o la gran tensión vivida durante la visita institucional a la zona, son algunas de las instantáneas que presiden esta exposición.
De todos estos momentos hablará el equipo de la Agencia EFE, que continúa relatando la tragedia en primera persona: la fotógrafa Ana Escobar y el delegado autonómico Adolfo Ibarra charlarán con la directora del departamento de Audiovisual, Marta Cerame, y la fotógrafa Sáshenka Gutiérrez (Premio Ortega y Gasset), que ha cubierto otras tragedias naturales, como el terremoto que sacudió el centro de México en 2017.
El acto continuará con un breve conversatorio del presidente de EFE, Miguel Ángel Oliver, con los expresidentes de la primera agencia de noticias del mundo en español durante el S.XX Luis María Anson y Alfonso Sobrado Palomares.
Un recorrido de imágenes que invitan a la participación
La exposición, que acogerá el espacio Larra-Laboratorio de Periodismo entre el 15 y el 30 de noviembre, en Madrid, propone un recorrido no lineal por diferentes espacios que invitan a la participación del espectador mediante asociaciones visuales, composiciones cromáticas e impresiones fotográficas sobre textil de grandes dimensiones.
Comienza en España, con una crónica visual de la posguerra que oscila entre la vida rural y la urbana, entre el éxodo forzado del campo y el desarrollo de las grandes capitales, todo ello bajo el eco omnipresente de la dictadura.

Retratos intimistas en pequeñas aldeas y capturas añejas en el centro Madrid (como la del servicio de transporte ‘Línea de Microburros’); paseos de ‘Los amigos de la capa’ por la misma calle donde la Policía Armada persigue a manifestantes, o instantáneas apenas conocidas de John Wayne en el aeropuerto de Barajas, entre otras, componen este primer segmento.
Prosigue por la Transición, narrada a través de dos líneas paralelas -una social y otra política-, que remiten a instantes y sensaciones, a los álbumes de fotos en color y blanco y negro que resisten en las estanterías familiares.
Las fotos más inesperadas de los protagonistas políticos, culturales y deportivos de este periodo (desde Calvo-Sotelo hasta Johan Cruyff, pasando por Lola Flores) y sus momentos más trascendentes contados desde una perspectiva inusual y unos formatos (suelos y paredes viniladas) que buscan generar un ambiente inmersivo.
Las dos caras del muro
A continuación, la exposición, que cuenta con un filtro de realidad aumentada propio en Instagram y Facebook, abre su sección más amplia al resto del mundo con una sala dividida por el Muro de Berlín, representado en dos lonas impresas de diez metros de longitud con fotografías de su construcción, por uno de sus lados, y de su caída, por el otro.
La parte oriental del muro aborda la lucha global entre el comunismo y el capitalismo a través de composiciones geométricas sobre la carrera espacial o la guerra de Vietnam.
En la occidental, frente a grandes imágenes de su caída, cobran protagonismo los temas sociales que comenzaron a surgir entonces y que ahora marcan la actualidad: el feminismo (con una serie de Sáshenka Gutiérrez que recibió el premio Ortega y Gasset), la diversidad sexual, la degradación del medio ambiente y la inmigración, entre otros.
Por último, el gran mural del siglo XXI, un mosaico de 150 fotografías que retrata la inmediatez, el esplendor y el caos de nuestro tiempo desde todos los ángulos posibles con una doble propuesta de observación: general, como composición cromática, y en detalle, a través de cada una de sus capturas.
“Desde escenas costumbristas de la posguerra, protagonizadas por personas anónimas, que recuerdan esfuerzo, resiliencia y las ganas de vivir, y que es tan importante no olvidar, hasta momentos claves y curiosos de la Transición Española, junto a algunos de los hitos de la historia mundial. Todo está recogido en esta gran exposición con la intención de viajar en el tiempo, de sumergirse en nuestra memoria colectiva, gracias a la mirada de los fotoperiodistas de EFE”, ha explicado Oliver.
La exposición cuenta también con un espacio que permite a las personas con discapacidad visual conocer e interactuar con algunas de las fotografías más icónicas del Archivo de EFE, gracias a una nueva tecnología de procesado de imágenes en relieve, acompañadas de braille y relatos en audio.
Antes de finalizar el recorrido, el visitante encontrará una colección de 1.000 fotografías adhesivas. Podrá escoger una y pegarla sobre un mural que, al concluir la muestra, quedará como legado común de esta exposición.
El acto y la muestra que conmemora el 85 aniversario de EFE está patrocinada por Iberdrola. Cuenta además con el copatrocinio de Moeve y Larra-Laboratorio de Periodismo, y con la colaboración de Meta, Canon, LG, BBVA, El Pozo y la Escuela Madrileña de Decoración.