Desde el 27 de noviembre, se est谩 produciendo un ataque masivo desde la provincia de Idlib liderado por el grupo islamista Hayat Tahrir al-Sham. El saldo provisorio es de 242 muertos, entre ellos algunos civiles. P. Bahjat: la gente est谩 "cansada", de noche "no puede dormir" y "no tienen fuerzas para enfrentar otra batalla". La escalada est谩 relacionada con un estancamiento pol铆tico "insostenible" a largo plazo.
Alepo, Siria (AsiaNews) – "En la ciudad se oyen claramente los ca帽onazos, la gente tiene miedo, las escuelas est谩n cerradas y se suspendieron las clases, hay un clima de gran aprensi贸n e incluso el catecismo en las parroquias se ha suspendido", dice a AsiaNews el padre Bahjat Karakach, p谩rroco de la iglesia de San Francisco de As铆s en Alepo, comentando los ataques de los 煤ltimos d铆as por parte de grupos yihadistas y rebeldes de la provincia de Idlib, que ya se encuentran a las puertas de la ciudad. "La gente - sigue diciendo el sacerdote - est谩 cansada y siente que no tiene fuerzas suficientes para afrontar otra batalla, el comienzo de otra guerra. El miedo es real, el miedo est谩 en el aire y los ruidos de estos bombardeos se escuchan con toda claridad, tanto que desde hace tres noches la gente ni siquiera ha podido dormir. Hace meses que se hablaba de un posible ataque de grupos yihadistas, pero parec铆a m谩s una amenaza que un peligro real: desgraciadamente incluso sus dimensiones, que estamos observando en estos d铆as con preocupaci贸n, nos han sorprendido".
El 27 de noviembre las fuerzas anti gubernamentales lanzaron una imponente ofensiva en el noroeste y conquistaron territorios controlados por las fuerzas del presidente Bashar al-Assad por primera vez despu茅s de a帽os de "congelamiento" del conflicto con las milicias rebeldes, y los yihadistas "confinados" en la provincia de Idlib. El grupo islamista Hayat Tahrir al-Sham (HTS) y facciones aliadas dijeron que hab铆an tomado el control de varias ciudades y pueblos en las provincias de Alepo e Idlib. El Ej茅rcito sirio confirma el ataque "a gran escala" de los "terroristas", que siguen avanzando tras conquistar zonas perif茅ricas y ahora parecen dirigirse hacia el centro de la ciudad.
Seg煤n el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (SOHR), una organizaci贸n con sede en el Reino Unido y una densa red de informantes, el saldo de la ofensiva de rebeldes y yihadistas en el noroeste es de al menos 242 muertos. De ellos, cuatro son civiles que murieron esta ma帽ana por las bombas que cayeron sobre Alepo, una metr贸polis del norte que en otros tiempos fue una capital econ贸mica y comercial antes de convertirse en un s铆mbolo de la devastaci贸n causada por un conflicto ya olvidado. Por otro lado, 19 civiles murieron en ataques a茅reos de las fuerzas a茅reas sirias y rusas en zonas controladas por la oposici贸n.
M谩s de medio mill贸n de personas han muerto en la guerra civil siria, que estall贸 cuando el gobierno de Damasco reprimi贸 brutalmente las protestas a favor de la democracia en 2011. Ahora Idlib es el 煤ltimo basti贸n que controla la oposici贸n, con m谩s de cuatro millones de habitantes, muchos de los cuales fueron desplazadas durante el conflicto y se ven obligados a vivir en condiciones terribles. El enclave est谩 mayoritariamente en manos del grupo HTS, pero tambi茅n hay facciones rebeldes apoyadas por Ankara que operan bajo la bandera del Ej茅rcito Nacional Sirio (SNA) y las fuerzas turcas. Rami Abdel Rahman, director del Observatorio, se帽ala que las fuerzas de Assad "no estaban preparadas de ninguna manera" para el ataque. "Es extra帽o -a帽ade- ver que est谩n sufriendo golpes tan duros a pesar de la cobertura a茅rea rusa y de los indicios previos de que el HTS lanzar铆a esta operaci贸n". Plantea la posibilidad de que se debe a la "falta de apoyo" de Hezbollah, involucrado en la guerra con Israel.
En 2020 Turqu铆a y Rusia - el principal aliado de Assad - negociaron un alto el fuego para detener la ofensiva gubernamental hacia Idlib y frenaron la escalada de violencia, pero los enfrentamientos espor谩dicos, los ataques a茅reos y los bombardeos continuaron en estos a帽os. El mes pasado, el enviado especial de la ONU para Siria advirti贸 que las guerras en Gaza y L铆bano estaban "catalizando peligrosamente el conflicto en el noroeste de Siria". Geir Pedersen agreg贸 que Rusia hab铆a reanudado los ataques a茅reos por primera vez en meses y que las fuerzas progubernamentales hab铆an acelerado significativamente los ataques con drones y los bombardeos. En respuesta, Hayat Tahrir al-Sham y sus aliados lanzaron una ofensiva masiva para "disuadir la agresi贸n" y "frustrar los planes del enemigo". Por su parte, el vice-coordinador humanitario regional de la ONU para Siria, David Carden, dijo estar "profundamente alarmado", mientras que el Comit茅 Internacional de Rescate habla de casi 7.000 familias desplazadas y algunos centros de salud y escuelas obligados a suspender los servicios.
"Esta ma帽ana – cuenta el padre Bahjat Karakach – nos hemos despertado con la noticia de cuatro estudiantes muertos por una bomba que cay贸 cerca de la residencia universitaria. Por supuesto, no hay que alimentar el p谩nico, pero es igualmente claro que la gente tiene raz贸n en preocuparse". La escalada, seg煤n el sacerdote, tambi茅n est谩 relacionada con el "estancamiento pol铆tico que se ha producido en los 煤ltimos a帽os en Siria, cuando estaba claro para todos que no ser铆a sostenible a largo plazo". Sin embargo, prosigue, "nunca se lleg贸 a una soluci贸n real y definitiva, sino s贸lo a acuerdos fr谩giles que no pod铆an durar mucho tiempo" y ahora es m谩s urgente que nunca una intervenci贸n decisiva de la comunidad internacional. El clima de tensi贸n y miedo afecta tambi茅n a la comunidad cristiana, que comenzaba a prepararse para las semanas de Adviento previas a la Navidad: "El esp铆ritu -concluye el p谩rroco- ha cambiado de un d铆a para otro. Tratamos de vivir la situaci贸n con alegr铆a, pero el clima se ha vuelto inevitablemente m谩s pesado y tal vez no nos permita ser tan libres para desplazarnos y celebrar. Esperamos, y rezamos, para que todo mejore".