Ir al contenido principal

Una salud enferma

La mitad de la humanidad sin acceso a la atenci贸n b谩sica

Sergio Ferrari


El a帽o 2024 cerr贸 con casi ninguna buena noticia para la humanidad. A los gastos militares crecientes se le suman presupuestos decrecientes para la salud.

La vacunaci贸n masiva contra enfermedades que azotan la ni帽ez constituye uno de los pilares de la prevenci贸n y de la asistencia primaria. Foto OPS

El 煤ltimo Informe 2024 de la Organizaci贸n Mundial de la Salud (OMS) sobre el gasto mundial en ese rubro, publicado en diciembre pasado, concluye que los gobiernos destinaron en 2022 a la salud disminuy贸 con respecto a las cifras de 2021.  La conclusi贸n de la OMS es resultado de un cuidadoso procesamiento de la m谩s abundante y confiable informaci贸n disponible desde 2000 procedente de 190 pa铆ses. El informe anual de esta organizaci贸n de Naciones Unidas se publica regularmente desde 2017 y es una referencia imprescindible para el an谩lisis de la situaci贸n sanitaria en el mundo (https://www.who.int/es/news/item/12-12-2024-new-who-report-reveals-governments-deprioritizing-health-spending).


La prevenci贸n juega un rol clave en la atenci贸n primaria de salud. Foto OPS


Por su parte, en abril 2024, el Instituto Internacional de Estudios para la Paz de Estocolmo (SIPRI, por sus siglas en ingl茅s) inform贸 que el gasto militar mundial en 2023 aument贸 un 6,8% en t茅rminos reales con respecto a 2022, la subida m谩s pronunciada de los 煤ltimos 15 a帽os. Tendencia que se contrapone con la ca铆da constante de los presupuestos destinados a la salud.

Radiograf铆a desoladora

Seg煤n el Informe 2024 de la Organizaci贸n Mundial de la Salud, 4.500 millones de personas --m谩s de la mitad de la poblaci贸n del planeta-- no tienen acceso a servicios b谩sicos de salud y 2.000 millones se confrontan con mayores dificultades financieras porque deben asumir de forma privada una parte importante de esos costos. La paradoja develada por este organismo de las Naciones Unidas es de fondo: aunque el acceso a los servicios de salud ha mejorado con el paso del tiempo, su encarecimiento representa una carga financiera muy problem谩tica para un vasto sector de la poblaci贸n. Al punto que muchas personas caen en la pobreza por tener que financiar su atenci贸n m茅dico-sanitaria.

Seg煤n la OMS, el gasto directo (personal y privado) sigue siendo la principal forma de financiamiento de la salud en 30 pa铆ses de bajos y medianos ingresos. En 20 de ellos, “m谩s de la mitad del gasto total en salud lo pagaron directamente los pacientes, lo que supone un factor desencadenante del ciclo de pobreza y vulnerabilidad”.

Las dificultades que plantea la falta de protecci贸n financiera para la salud no se limitan a los pa铆ses pobres. Tambi茅n en los de altos ingresos los pagos directos en concepto de salud generan serias dificultades. Como consecuencia, no se puede dar respuesta a toda la atenci贸n m茅dico-sanitaria necesaria, especialmente en los hogares con menos ingresos.

Los datos no mienten: en m谩s de un tercio de los pa铆ses ricos, es decir, aquellos que cuentan con altos ingresos, por lo menos un 20% del gasto total en salud lo asumen directamente los pacientes. En muchas ocasiones, esta situaci贸n fuerza a los pacientes a reducir al m铆nimo sus costos m茅dicos o de medicamentos para evitar que sus presupuestos familiares exploten.

Un mal ejemplo  

Por ejemplo en Suiza –que goza de un sistema de salud propio de un pa铆s de alto desarrollo--, lo que cada habitante abona mensualmente en concepto de seguro m茅dico obligatorio (unos 500 d贸lares por adulto) var铆a seg煤n el monto de la franquicia (es decir, lo que el asegurado debe abonar antes de que su seguro comience a funcionar). Cuanto m谩s baja la franquicia, m谩s alta la mensualidad. De m谩s en m谩s, existe un amplio sector de la poblaci贸n, especialmente j贸venes y personas de bajos ingresos, que optan por una franquicia alta de 2.750 d贸lares (2.500 francos) por a帽o y de esta forma buscan reducir la mensualidad. Esto significa que los gastos m茅dicos hasta ese monto tendr谩n que abonarlos individualmente los propios asegurados.

Todo habitante de Suiza debe tener un seguro de salud contra铆do con una Caja privada. Anualmente aumenta entre un 5 y un 10% seg煤n los diferentes cantones alcanzando los 6 mil d贸lares anuales. SSP

De ah铆 que la salud est茅 hoy en el centro de la preocupaci贸n de los sectores medios y bajos de la poblaci贸n helv茅tica dado el aumento continuo de la mensualidad, de entre un 5 y un 10% anual seg煤n cada Cant贸n (provincia, Estado) y dependiendo de cada una de las decenas de cajas m茅dicas, todas privadas. Los sindicatos y organizaciones sociales suizas se movilizan desde a帽os a favor de una Caja M茅dica 脷nica, con fuerte participaci贸n del Estado, en la perspectiva de reducir los costos en el sector. La mayor铆a parlamentaria de derecha y extrema derecha, con fuerte presencia e intensivo cabildeo de representantes de las aseguradoras privadas y de la gran industria de medicamentos, se opone a tal propuesta que reducir铆a sustancialmente sus actuales ganancias astron贸micas en el sector salud.

Reforzar la salud p煤blica

La OMS propone que los gobiernos prioricen a nivel nacional la Cobertura Sanitaria Universal (CSU) y reduzcan el empobrecimiento generado por los gastos relacionados con atenci贸n m茅dico-sanitaria. De esta manera, se estar铆a cumpliendo con los Objetivos del Desarrollo del Milenio y alcanzando soluciones de fondo hacia 2030. Esta prioridad en la salud p煤blica en todas sus esferas es condici贸n fundamental para el logro de dichos objetivos.

Las organizacines internacionales llaman a los Estados a aumentar sus presupuestos para la salud. La media de Am茅rica Latina y el Caribe apenas super贸 en 2021 el 4% del PIB destinado a la salud

Ya a fines de 2023 la OMS alertaba que m谩s de 1.000 millones de personas en el mundo podr铆an caer en la pobreza debido a los gastos directos de salud, que representan aproximadamente un 10%, o m谩s, de sus presupuestos familiares. El organismo onusiano aboga por ampliar la atenci贸n primaria de salud, lo que hacia 2030 podr铆a salvar 60 millones de seres humanos en los pa铆ses de bajos y medianos ingresos y aumentar铆a la esperanza de vida en 3,7 a帽os.

Entre las estrategias eficaces para fortalecer la protecci贸n legal y financiera de la salud, la OMS enfatiza en la necesidad de minimizar o eliminar las franquicias para los usuarios m谩s necesitados (incluidas las personas con bajos ingresos y/o enfermedades cr贸nicas) y establecer mecanismos de financiaci贸n de la salud a trav茅s de fondos p煤blicos que beneficiaran a toda la poblaci贸n.

Seg煤n la OMS, salud p煤blica implica definir presupuestos para los “servicios de salud esenciales que vayan desde la promoci贸n hasta la prevenci贸n, el tratamiento, la rehabilitaci贸n y los cuidados paliativos, utilizando un enfoque de atenci贸n primaria de salud”. Este concepto “incluye a toda la sociedad y tiene por objeto garantizar el mayor nivel posible de salud y bienestar y su distribuci贸n equitativa mediante la atenci贸n centrada en las necesidades de las personas”.

La atenci贸n primaria, pilar esencial de la salud p煤blica, incluye tres componentes interdependientes y sin茅rgicos. Primero, el conjunto de servicios de salud integrados e integrales que engloban ese nivel b谩sico de la atenci贸n. Segundo, pol铆ticas e iniciativas multisectoriales para abordar la salud de forma amplia y global. Tercero, un elemento esencial basado en la participaci贸n ciudadana y que la OMS define como “la movilizaci贸n y el empoderamiento de las personas, las familias y las comunidades para lograr una mayor participaci贸n social y mejorar la autoasistencia y la autosuficiencia en materia de salud (https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/primary-health-care).

Am茅rica Latina y el Caribe: el d茅ficit de la medicina p煤blica

Aunque en la inversi贸n p煤blica en la salud en Am茅rica Latina y el Caribe experiment贸 un aumento en la primera parte del siglo, no fue suficiente para alcanzar las metas propuestas. En 2021 se destin贸 un 4,5% del Producto Interior Bruto (PIB) cuando se proyectaba por lo menos un 6,0%. Seg煤n la Organizaci贸n Panamericana de la Salud (OPS) y la Comisi贸n Econ贸mica para Am茅rica Latina y el Caribe (CEPAL), ese mismo a帽o solo un 61% de lo que se invirti贸 en salud en la regi贸n correspondi贸 a recursos financieros p煤blicos.

La Organizaci贸n Panamericana de la Salud y las Naciones Unidas llaman a aumentar la participaci贸n de los Estados para reforzar la salud p煤blica. Afiche OPS

Como se帽alan ambos organismos en su informe conjunto de octubre de 2024, las contribuciones directas –es decir, pagadas del bolsillo de los usuarios-- alcanzaron el 28%. En 14 pa铆ses, los pagos directos, o de bolsillo, superaron el 30% de sus respectivas inversiones nacionales en salud. Cuba fue el pa铆s del continente con m谩s cobertura p煤blica y menos gasto de bolsillo (8,4%). Los hogares guatemaltecos, en el otro extremo, debieron soportar m谩s del 60% de sus gastos en salud. En Argentina y Brasil, m谩s del 22% de los recursos familiares fueron para la salud (https://www.paho.org/es/noticias/21-10-2024-cepal-ops-llaman-priorizar-inversion-salud-para-reducir-desigualdad-alcanzar).

La OPS y la CEPAL afirman que estas cifras “resultan preocupantes, ya que los gastos de bolsillo reproducen las desigualdades en acceso y calidad de la atenci贸n y pueden traducirse en gastos catastr贸ficos o empobrecedores”. Para estas dos organizaciones rectoras en materia sanitaria del continente, dichas desigualdades dejan en evidencia la necesidad urgente “de incrementar el gasto p煤blico en salud, de la mano de una gesti贸n eficiente de los recursos”.

A menos que se bregue con los principales problemas estructurales del sector de la salud p煤blica --fundamentalmente el subfinanciamiento cr贸nico y la fragmentaci贸n y segmentaci贸n de los sistemas de salud-- estas desigualdades y el resultante empobrecimiento de un vasto sector latinoamericano y caribe帽o seguir谩n agrav谩ndose irremediablemente, seg煤n la OPS y la CEPAL.

Los gastos para la guerra conspiran contra los presupuestos p煤blicos destinados a la salud. La paz es la mejor medicina. Afiche de la OMS

Panorama mundial en el que se instala el sube y baja de la irracionalidad planetaria. En uno de los asientos del balanc铆n global, la salud que cae, despreciando as铆 el esfuerzo humano a su cuidado y sobrevivencia. Y en el otro, m谩s armas sofisticadas, municiones y la industria militar en pleno progreso para alimentar las guerras esparcidas en todo el planeta, responsables de millones de v铆ctimas y causa del retroceso ambiental y civilizatorio.

 

 



Sergio Ferrari

ARCHIVOS

Mostrar m谩s


OTRA INFORMACI脫N ES POSIBLE

Informaci贸n internacional, derechos humanos, cultura, minor铆as, mujer, infancia, ecolog铆a, ciencia y comunicaci贸n

El Mercurio (elmercuriodigital.es), editado por mercurioPress/El Mercurio de Espa帽a bajo licencia de Creative Commons
©Desde 2002 en internet
Otra informaci贸n es posible