Alba paga 500 euros por un estudio de 25 metros cuadrados en Sóller y su contrato vence a finales de mes
La vivienda es uno de los problemas sociales a los que actualmente se enfrentan muchas personas. Precios muy altos, escasez de construcciones y abuso de alquileres turísticos son una ecuación que destroza lugares como Baleares. Es el caso de Alba Sánchez, mallorquina de 28 años que ha vivido prácticamente toda su vida en Sóller, un pueblo de 14.000 habitantes situado en la Serra de Tramuntana, en Mallorca. Aunque es quiromasajista, trabaja de camarera en el sector turístico. Toda su vida la tiene en Sóller. Decidió independizarse y ahora paga 500 euros por un alquiler de un estudio de 25 metros cuadrados; el 28 de febrero finaliza su contrato y no encuentra una alternativa habitacional. Lleva pegando carteles por todo el pueblo durante dos meses.
Atlas