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Fallas y problemática

Diego Nevado Martínez

Un año más la fiesta de las fallas es la excusa perfecta para el incivismo que ya estamos viendo estos días por las calles de Valencia y pueblos pese a que la gente como bien manifiesta por redes sociales no está para fiestas después de que el desastre climático que nos llevó a la DANA haya destrozado todo a su paso en muchas zonas que todavía están por recuperarse y cuyas familias siguen esperando ayuda de la administración. 



Sin duda, cada vez más gente toma conciencia del daño que ocasiona la pirotecnia o de lo innecesaria que es la tortura y humillación pública de los animales que tendrá lugar en la plaza de toros de Valencia, parasitando un año más las fallas.

Inmersos también en una grave crisis climática provocada por las actividades humanas, debemos tener en cuenta el gran impacto medioambiental de la pirotecnia o de la quema de fallas.

Por seguir con el tema de la pirotecnia, la diversión y adrenalina no pueden estar por encima de los derechos de los animales que conviven como miembros de la familia en nuestras casas, personas con autismo, bebés, ancianos, personas con enfermedades, la fauna o la grave crisis climática que atravesamos.

Una de las primeras cosas que destaca la bióloga de la plataforma Defensa Animal, Rosa Mas, es el contexto que envuelve la pirotecnia hoy en día. Este contexto lo ejemplifica situándolo en su Valencia natal, donde es algo “totalmente normalizado”.

En Valencia, al igual que en otros muchos lugares, los niños crecen con petardos como un elemento más. Cuando los niños tienen una mínima edad, empiezan a utilizar petardos y se convierte en “algo con lo que se crece aquí y que se asocia siempre a la celebración. Hay que celebrar algo, petardos”, señala la bióloga en una entrevista con lanza digital.

Lo primero que produce la pirotecnia es un ruido repentino. Este ruido, explica al citado medio, provoca reacciones de pánico y angustia, que se traducen en dificultades respiratorias, aumento de la frecuencia respiratoria y cardíaca, y que incluso puede causar la muerte. 

«Se han dado casos de animales que han huido despavoridos. Perros, por ejemplo, en sus casas al oír los petardos no podían soportarlos y han acabado muertos tras lanzarse al vacío, saltar vallas muy altas o quedar estrangulados en algún tipo de reja», denuncia la bióloga.

«Hasta ahora, solamente habíamos tenido en cuenta que a algunas personas podía resultar divertido, pero no hemos considerado a otras criaturas con las que convivimos, no solo animales, sino personas con alta sensibilidad, como aquellas dentro del espectro autista», aclara.


ANTEPONER LA DIVERSIÓN A LOS DERECHOS DE LOS DEMÁS 


"Tenemos que valorar si la diversión que provoca un espectáculo pirotécnico vale la pena cuando estamos causando la muerte de animales. Es frecuente ver animales muertos después de estos eventos, porque han sufrido una parada cardíaca. Si estamos evolucionando y adquiriendo conocimientos, antes desconocidos, sobre estos efectos, no podemos seguir actuando de la misma manera. De lo contrario, de nada sirve la investigación y el conocimiento adquirido", valora Más.

Rosa Más propone soluciones imaginativas, como ocurre en Castellón, donde se llevó a cabo un espectáculo con hologramas, lo que representa una alternativa viable.

«Estos espectáculos proyectan imágenes en tres dimensiones, acompañadas de música, evitando el estruendo de la pirotecnia. Es decir, sí existen opciones para evitar causar estos daños».

Además de los daños a los animales y a las personas con alta sensibilidad, también se debe considerar el impacto ambiental. La pirotecnia utiliza sustancias como el perclorato, un contaminante reactivo que se usa para disparar los cohetes y que permanece en el aire, pudiendo afectar la tiroides humana.

Asimismo, los metales pesados utilizados para dar color a los petardos (rojo, azul, etc.) quedan como contaminantes en el medioambiente. Una vez explotado el cohete, las cenizas y partículas resultantes permanecen en el aire como aerosoles contaminantes. Además, los residuos sólidos de los petardos, como los casquillos y el papel, contaminan los alrededores del espectáculo.

Por lo tanto, lo mínimo que se debe hacer es dejar de utilizar pirotecnia y que esos empresarios reciban las ayudas correspondientes para reconvertir el sector. 

Igualmente, quemar fallas es insostenible y dañino para la fauna, además de que gran parte de la misma suele contener diferentes plásticos, como ha ocurrido en diferentes colegios donde las fallas ya han sido quemadas.

También es frecuente montar carpas pegadas con la fachada de colegios que luego acaban llenos de basura en el patio cuando vuelven los niños a clase.

Aunque en su día las fallas me gustaban, valorar los efectos dañinos que causa ha hecho que me produzcan rechazo, más en la situación de grave crisis climática que estamos con fenómenos cada vez más peligrosos y que cada vez será peor como no cambiemos rápido nuestros hábitos, especialmente sustituyendo desde ya los productos de origen animal por proteína vegetal, pues las fallas también suelen ser la excusa perfecta para darse “atracones” sin miramiento. 

Por ejemplo, la horchata, que es muy famosa y típica de Valencia, es de origen vegetal, al igual que dulces típicos de las fallas como los churros, buñuelos o porras, pero los de chocolate e incluso el propio chocolate también se podrían hacer con bebida vegetal y no con leche de una vaca lactante, separada de sus hijos, inseminada una y otra vez por la fuerza, encerrada, manipulada genéticamente y rajada en un matadero cuando ya no puede más.

Nuevas formas de contabilización de las emisiones de gases de efecto invernadero desplazan la mayor parte de la responsabilidad de la crisis climática a la ganadería, si bien hasta ahora esta recaía en los combustibles fósiles sobre los que se centran la mayoría de las políticas contra la emergencia climática. Así lo recoge una investigación publicada en Environmental Research Letter.

El estudio sostiene que la ganadería ha sido la responsable, en un 53%, del aumento de la temperatura media global entre 1.750 y 2.020, lo que equivale a 0’64ºC de calentamiento. En cambio, los combustibles fósiles han sido responsables del 19% del calentamiento global (0’21ºC).

Por otra parte, un estudio de Metabody y Rebeldes Indignadas presenta la pesca como industria más destructiva de la historia, seguida de la acuicultura, la ganadería y la avicultura como principal fuente de destrucción de los océanos, que son vitales para el sostenimiento de la vida en la Tierra y están actualmente al borde del colapso, con una amenaza renovada de océanos muertos y extinción humana.

El estudio expone la urgencia de transicionar a dietas vegetales para salvar los océanos y la vida terrestre, y denuncia el silenciamiento del problema y las soluciones, no solo por parte de los gobiernos sino también de las principales organizaciones ecologistas, debido en gran parte al LOBBY pesquero y de la industria alimentaria, y hace una llamada a la acción.

Estudio completo:

https://metabody.eu/es/los-oceanos-se-salvan-en-tu-plato/ .

Cualquier receta de toda la vida la puedes hacer igual o mejor con productos vegetales de proximidad, además de que el especismo está definido por la RAE como la discriminación por especie a los animales a los que hay que excluir de la alimentación, vestimenta, entretenimiento, experimentación o cualquiera de las formas en las que son usados. 


TORTURA EN LA PLAZA


El Partido Animalista PACMA y la organización internacional PETA han puesto en marcha una campaña de protesta contra la tauromaquia durante las Fallas de Valencia, haciendo circular un camión con pantallas LED por las principales calles de la ciudad durante este fin de semana.

El diseño del cartel muestra una comparación de un torero matando a un toro y un bombero rescatando a una niña, acompañado del mensaje «¿A dónde quieres que vayan tus impuestos?». 

Un camión de bomberos que está en medio de una inundación ¿Les suena?, en referencia a las inundaciones de la pasada #DANA en Valencia

La iniciativa busca generar un debate público sobre la inversión de dinero público en la tauromaquia, cuestionando la legitimidad de seguir subvencionando espectáculos basados en el maltrato animal mientras se reducen recursos en servicios esenciales como el de bomberos, un hecho especialmente grave tras la catástrofe de la #DANA en Valencia, donde se evidenció la falta de recursos para atender emergencias y proteger vidas humanas y animales.

El camión circulará por las calles de Valencia durante la festividad de las Fallas y coincidirá este sábado con una protesta convocada por Animal Save, cuyo objetivo es también denunciar los espectáculos taurinos, especialmente los que se celebran durante estas fiestas.

Ambas organizaciones han insistido en que la tauromaquia es una práctica «cruel y obsoleta que no debería recibir ni un solo euro de las arcas públicas»: «Mientras se destinan fondos a perpetuar el sufrimiento y la muerte de animales, se recortan recursos en servicios como el de emergencias. Es una cuestión de prioridades y de ética», han declarado desde PACMA.

Por su parte, Mimi Bekhechi, vicepresidenta de PETA en Europa, sostiene que «en la plaza, los toros son atormentados, agotados, apuñalados repetidamente y brutalmente asesinados ante una multitud que los vitorea», y por ello, PETA insta a la ciudadanía a «alzar la voz cuando las autoridades intenten mantener estos crueles espectáculos en lugar de invertir los fondos públicos en servicios que realmente beneficien a toda la comunidad».




Ambas organizaciones aseguran que «la mayoría de la sociedad española rechaza la tauromaquia» y consideran que los recursos públicos «deben destinarse a servicios que garanticen la seguridad y bienestar de las personas y los animales, no despilfarrarse en ocio para unos pocos».


TAUROMAQUIA Y SADISMO 


Como la mayoría de la sociedad ya sabe de sobra y comparte, la tauromaquia es una sanguinaria tradición que ha quedado obsoleta y que consiste en gozar viendo sangrar y retorcerse de dolor a un ser indefenso, herbívoro y pacífico, además de que detrás de este oscuro mundo hay grandes empresarios e intereses muy perversos. 

¿Como es posible que la tauromaquia esté hasta por encima de las emergencias y de los santuarios de animales que dedican todos sus esfuerzos a rescatar y fomentar la empatía?

Teniendo en cuenta estadísticamente que muchísima gente ni siquiera ha conocido la iniciativa de la ILP antitaurina, más de medio millón de personas han firmado para quitar la tauromaquia de patrimonio cultural y muchas no han podido hacerlo por la injusta discriminación que existe a las personas inmigrantes aunque paguen sus impuestos y hagan vida aportando aquí.

La víctima de una corrida de toros no solamente es el propio toro, también los caballos sometidos a una tremenda angustia y la infancia expuesta a la violencia a la que se le inculca la maldad y el sadismo bien pronto aprovechándose de su inocencia.

Sobre la tauromaquia callejera, Albal y muchos otros pueblos cuyas familias siguen angustiadas por la DANA, están haciendo "Bous al Carrer", poniendo así en peligro a todo el pueblo, torturando animales, despilfarrando los recursos, ensuciando mucho más el pueblo ya embarrado y exponiendo a la infancia a la violencia.

Os dejo parte de la reflexión que hacía hace unos meses Raquel Aguilar mediante un artículo de opinión: 

Sin embargo, a ti que acudes a los toros, si estás leyendo este artículo, sí voy a pedirte una reflexión.

Una compañera de trabajo me comentaba que ella asistía a corridas de toros hasta que un día se fijó en la mirada de uno de ellos y vio en sus ojos a su perra. Nunca más regresó.

Es posible que asistir a estos actos te recuerde al momento que compartías con tu padre cuando eras joven, o que simplemente lo plantees como una actividad compartida con amigos.

Tal vez, pese a tenerlo delante, nunca te hayas puesto en la piel del toro, nunca hayas sentido su dolor y nunca hayas mirado a sus ojos.

Cierra los tuyos y con la mano en el corazón, valora si está bien provocar tanto dolor y sufrimiento a un animal indefenso. Si tienes un mínimo de empatía, sé cuál ha sido tu respuesta. No sigas excusándote y haz caso a tu conciencia.

Y si eres de quienes piensan que la tauromaquia no va contigo, que quien no quiera no vaya, recuerda que, hay quien no quiere participar, sin embargo es protagonista obligado: el toro al que torturan hasta su agónica muerte. Y el caballo, que también sufre, muchas veces con su propia vida, las consecuencias de estos actos de violencia y linchamiento público de inocentes.

Y si no te importa el sufrimiento de los animales, debes saber que la tauromaquia a ti también te perjudica.

Cuando estés 5 días esperando en urgencias a que te asignen una cama en la correspondiente planta de un hospital, recuerda que la atención sanitaria que no cubren los seguros de actos taurinos, los asume la sanidad pública.

Cuando tus hijos empiecen curso y en lugar de aulas, lo hagan en barracones, recuerda que las escuelas taurinas se pagan con tus impuestos.

Y cuando desmantelen servicios, como la Unidad Valenciana de Emergencias, por ser supuestamente un gasto innecesario, recuerda que en la Comunitat Valenciana, sólo en 2023, de las cuentas municipales se gastaron 37 millones de euros en actos taurinos.

Las estadísticas son demoledoras. En las anuales publicadas por el ministerio de cultura, se refleja un descenso continuado de asistencia a espectáculos taurinos, siendo los últimos valores publicados, correspondientes a 2022, inferiores al 2% de la población. El 26%, con entradas gratuitas.


CONCLUSIONES: DEBEMOS CAMBIAR NUESTRAS DIVERSIONES 


Nadie dice que no tengamos que divertirnos, pero todas las tradiciones y formas de diversión obsoletas y dañinas hay que sustituirlas por otras y educar a las futuras generaciones o esto ya no tiene fin. 

Como ya hemos comprobado, la mayoría de los políticos no van a hacer nada por ti, es el momento de que actúes tú en lo que puedes y debes hacer. 

¿Qué se puede esperar, por ejemplo, de una Generalitat Valenciana que mantiene al indecente y negligente Carlos Mazón o ha tenido de vicepresidente a un torero?

La crisis climática con catástrofes que estamos sufriendo ya decía antes que cada vez será peor, y mientras tanto la pirotecnia, la quema de fallas y la industria de explotación animal siguen aumentando la contaminación mientras la gente se divierte sin pensar.

Partiendo de la base de que las tradiciones lo que deben hacer es evolucionar, es más que necesario que hoy mismo dejes de apoyar a la industria que explota animales y optes por disfrutar de manera compasiva mediante alternativas vegetales, pues durante las fiestas es cuando más se consume sin miramiento alguno ni remordimiento, pero todo ello tiene unas consecuencias y es por ello que lo principal que debes hacer desde ya es descubrir la larga lista de proteínas vegetales que existen, además de dejar de comprar cosas que no te hacen falta para tu día a día y otras formas dañinas con los animales y el único planeta que tenemos.

La educación a la infancia, en valores antiespecistas y en la verdadera sostenibilidad, es algo primordial para poder tener un futuro algo decente.

Durante las fallas también vemos todo tipo de imprudencias que puedes documentar y mandar por privado a la página de Instagram "Putas Fallas", que publica durante estos días las diferentes problemáticas y recoge firmas al respecto.

Por lo tanto, es el momento de evolucionar y dejar a un lado las tradiciones tan dañinas con los animales, el planeta y las propias personas en las que no pensamos, salvo si nos toca de cerca, pues esto es una cuestión de respeto y empatía.

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