Porque si ellos no pagan:
- Lo paga el clima: los combustibles fósiles contribuyen al cambio climático, que provoca sufrimiento, enfermedades y muertes provocadas por desastres como la dana de Valencia y Letur.
- Lo pagan los hogares: el precio de los combustibles fósiles depende de mercados especulativos y volátiles, con un coste que siempre se acaba trasladando a nuestra factura.
- Lo pagan las víctimas: la lucha por los combustibles fósiles alimenta conflictos, genera violencia, corrupción y desplazamientos forzados.
- Lo paga la naturaleza: la extracción de combustibles fósiles agrava la crisis de la biodiversidad y la climática.
- Lo paga la salud: la contaminación del aire, debido a la quema de combustibles fósiles, se considera el mayor riesgo ambiental para la salud.

# 18.000 millones de euros.
# 306.000 personas afectadas.
# 11.000 inmuebles dañados.
Servicios básicos afectados:
# 106 centros educativos.
# 61 centros de salud.
# 3 hospitales.
# 1.400 kilómetros de carretera.

Mientras las grandes empresas de combustibles fósiles como Repsol se llenan los bolsillos, la ciudadanía de a pie está pagando la factura climática con su salud y con su dinero: desde la subida de los precios de los alimentos y de la luz hasta el desvío del dinero de los impuestos para subvencionar a la industria fósil. Si los que tienen que pagar no lo hacen, lo pagaremos todos. Muchas personas ya están exigiendo justicia. Hazlo tú también.
Desgraciadamente, episodios de lluvias torrenciales como este de la dana no ha sido el primero ni será el último. ¿Dana = cambio climático?