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Cambian los papas, sigue la Iglesia Cat贸lica de siempre

OPINI脫N

Adolfo Santos

Finalmente, el 8 de mayo surgi贸 el humo blanco de la chimenea montada sobre el tejado de la Capilla Sixtina en el Vaticano. En transmisi贸n directa para todo el mundo, el cardenal franc茅s Dominique Mamberti pronunci贸 la frase "Habemus papam" desde el balc贸n de la Bas铆lica de San Pedro y confirm贸 el elegido: el cardenal estadounidense-peruano Robert Prevost, que llevar谩 el nombre de Le贸n XIV.

De todo esto, podemos sacar algunas conclusiones iniciales. Fue uno de los c贸nclaves papales m谩s cortos de la historia, demostrando que m谩s all谩 de las diferencias entre ultra conservadores y “progresistas” que anunciaban un posible cisma de la Iglesia Cat贸lica en el futuro, los cardenales optaron por curvarse ante una figura que estar铆a “lejos del confort y al servicio de las periferias”, como algunos definen al nuevo Papa. La continuidad del papado de Francisco, qued贸 asegurada. 

La Iglesia Cat贸lica vive una profunda crisis al calor de la decadencia del capitalismo imperialista y el creciente descreimiento de las masas en sus dirigentes pol铆ticos patronales tradicionales, incluidas las autoridades eclesi谩sticas. En ese marco desde hace a帽os crecen las denuncias de esc谩ndalos financiero y de corrupci贸n, como el famoso caso del fraude (1982) del Banco Ambrosiano que manejaba los fondos del Vaticano. En los 煤ltimos a帽os crecieron las denuncias contra casos de abuso sexual y pedofilia en el seno de la Iglesia Cat贸lica.

Esta crisis llev贸 a que en 2013 de produjera un hecho casi in茅dito, que fue la renuncia del papa Joseph Ratzinger, Benedicto XVI, y que fuera reemplazado por Francisco. El Papa alem谩n, no solo se tornaba insustentable por defender los valores y la liturgia cat贸lica tradicionales como el uso del lat铆n en el oficio de las misas o la reintroducci贸n de las antiguas vestimentas papales. Su papado fue relacionado con los esc谩ndalos financieros del Vaticano y se puso en evidencia su pasado junto a la juventud hitleriana. Eso, sumado a la m谩s profunda crisis del capitalismo imperialista, abierta en 2008, que movilizaba a millones de trabajadores y trabajadoras en todo el mundo contra los planes de ajuste de los gobiernos, generaron un combo que oblig贸 a la Iglesia Cat贸lica a renunciar a Benedicto XVI y a imponer a Francisco. 

La designaci贸n en el 2013 del argentino y jesuita Jorge Bergoglio fue un intento de producir un cambio designando a un papa no europeo, sino latinoamericano para que pose de progresista. Busc贸 lavar la cara del Vaticano y recuperar algo de los amplios espacios perdidos por la Iglesia Cat贸lica. En la misma l铆nea se elige a Le贸n XIV. Necesitan evitar la continua emigraci贸n de fieles, un problema que est谩 dejando a la iglesia sin p谩rrocos por la falta de vocaci贸n religiosa de los j贸venes. Pero, adem谩s, porque la crisis del capitalismo mundial, no solo contin煤a, como se agrava, sobre todo con el surgimiento de personajes como Donald Trump, el jefe del imperialismo mundial que, con sus medidas, est谩 causando un caos sin soluci贸n para las masas explotadas del mundo. Por eso no eligieron al cardenal Raymond Burke, el preferido de Trump y si al estadounidense-peruano Robert Prevost, nombrado por Francisco obispo de Chiclayo, al noroeste del Per煤. M谩s tarde, el propio Francisco, preparando el recambio lo traslad贸 a Roma en 2023, design谩ndolo en puestos importantes para garantizar su continuidad.

No hay un nuevo modelo de iglesia

Eso no significa que estamos frente a la “Iglesia de los pobres”, un concepto introducido por el Papa Juan XXIII en el Concilio Vaticano II en 1962 y que retom贸 el papa Francisco con la enc铆clica Evangelii Gaudium. Es una adaptaci贸n a los tiempos de una instituci贸n que hace mas de 500 a帽os acompa帽a sin fisuras al capitalismo. Tambi茅n el nombre de Le贸n XIV fue pensado para los tiempos actuales. En 1891, Le贸n XIII (papa entre 1878 y 1903), escribi贸 la enc铆clica Rerum novarum con la cual fund贸 la Doctrina Social de la Iglesia que denunciaba, en el auge del capitalismo, los niveles de explotaci贸n a la clase trabajadora y reclamaba por mejores salarios y condiciones de vida. Pero, a su vez, denunciaba el avance del socialismo. 

El crecimiento del marxismo a finales del siglo XIX, que en 1917 iba a parir la Revoluci贸n Rusa, la m谩s grande revoluci贸n del siglo XX, puso en alerta al capitalismo. La iglesia mont贸 un escudo protector con la doctrina social para tratar de evitar que los explotados y oprimidos del mundo vayan hacia el socialismo. No fue contra el capitalismo y el socialismo por igual, como muchos presentan esta doctrina. Ten铆a un solo objetivo, la defensa del capitalismo.

Ahora la llamada “iglesia de los pobres” no pasa de un doble discurso adaptado a los tiempos. Y los tiempos actuales de caos y desorden necesitan como nunca esta fachada. Son solo posturas pol铆ticas, adoptadas en cada momento, para perpetuar el poder al servicio de la preservaci贸n del capitalismo. La forma que adopta la iglesia en cada momento no puede ser confundida con su contenido hist贸rico, con su esencia, que es profundamente reaccionaria.

La Iglesia Cat贸lica y el Vaticano no han cambiado, por m谩s que Francisco se haya negado a usar los zapatos rojos tradicionales o se haya hospedado en la “sencilla” Casa de Santa Marta en lugar del Palacio Apost贸lico, que tradicionalmente ha sido la residencia de los papas. Tampoco va cambiar la iglesia porque el obispo de Chiclayo, ahora Papa, se sienta “un peruano”, juegue al tenis o haya recorrido su di贸cesis de Chiclayo a caballo. 

Mantenemos una posici贸n cr铆tica a la Iglesia Cat贸lica como instituci贸n

Las gui帽adas progresistas, no pueden ocultar el papel de la Iglesia Cat贸lica. Con el Papa Francisco a la cabeza neg贸 los derechos m谩s b谩sicos de las mujeres, como la legalizaci贸n del aborto, una conquista en Argentina obtenida contra la campa帽a de todo el aparato eclesi谩stico. Los “cambios” de Francisco fueron tan superficiales que los curas ped贸filos o abusadores siguen siendo cobijados por las autoridades de la iglesia. Apenas son “trasladados” para evitar un mayor esc谩ndalo. Las mujeres, no solo estuvieron absolutamente ausentes del c贸nclave de cardenales, sino que siguen teniendo vedado el acceso al sacerdocio. Los divorciados y las disidencias sexuales contin煤an siendo “pecadores”, como expres贸 el p谩rroco de Chiclayo Jorge Mill谩n Cotrina, disc铆pulo del nuevo Papa. 

La Iglesia Cat贸lica se sigue oponiendo a la legalizaci贸n del matrimonio igualitario y en muchos pa铆ses se aferran a los recursos econ贸micos y a los privilegios que le dan los distintos gobiernos, neg谩ndose a la separaci贸n de la Iglesia y el Estado. Eso sin traer a cuento el papel siniestro que hist贸ricamente desempe帽贸. Fue ejecutora de musulmanes y jud铆os en la Edad Media, apoy贸 un genocidio sistem谩tico de los pueblos originarios en Am茅rica, llev贸 mujeres a la hoguera acusadas de brujer铆a, el Papa Pio XII, fue colaborador directo del nazismo y en Argentina la c煤pula de la iglesia fue c贸mplice de la dictadura genocida. 

Es claro que hubo sectores de la iglesia que defendieron a los y las trabajadores o enfrentaron dictaduras, como los curas tercermundistas de Brasil o el obispo Oscar Romero de El Salvador o Enrique Angelelli en el caso de la dictadura Argentina. Pero fueron excepciones, la regla de la c煤pula cat贸lica que representa el Vaticano, ha sido mantener una pol铆tica reaccionaria al servicio del sistema capitalista-imperialista.

Desde Izquierda Socialista y la Unidad Internacional de Trabajadoras y Trabajadores Cuarta Internacional (UIT-CI), a la vez que respetamos las posturas y creencias religiosas de cada compa帽era y compa帽ero porque entendemos que es una decisi贸n de 铆ndole 铆ntimo y personal, mantenemos una posici贸n cr铆tica a la Iglesia Cat贸lica como instituci贸n. Opinamos diferente de los que definen a Bergoglio como el “Papa de los pobres” o de los que empiezan a verter elogios en el mismo sentido en relaci贸n a Le贸n XIV. Como hemos afirmado tantas veces, los socialistas revolucionarios estamos convencidos que la justicia social, la dignidad para los miles de millones de pobres, marginados y oprimidos de este planeta, s贸lo se lograr谩 luchando, contra la explotaci贸n en cada lugar del mundo y tirando abajo este sistema inhumano que es el capitalismo e instaurando el socialismo con plena democracia para el pueblo trabajador. 


Adolfo Santos

Miembro de la direcci贸n  de Izquierda Socialista (Secci贸n argentina de la UIT-CI) 


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