Benjam铆n Montesinos
Imagen de la estrella 碌 Arae. El campo de estrellas ocupa 10 x 10 minutos cuadrados de arco
En un rinc贸n de la constelaci贸n del Altar (Ara en lat铆n), a unos 49 a帽os luz de la Tierra, brilla una estrella con una importancia simb贸lica inmensa: 渭 Arae, ahora oficialmente conocida, entre otras denominaciones, como “Cervantes”. Este nombre no es producto del azar, sino el resultado de una iniciativa internacional de gran envergadura, en la que Espa帽a se vio involucrada, que culmin贸 con la inclusi贸n del nombre de uno de nuestros mayores escritores en el cat谩logo oficial de la Uni贸n Astron贸mica Internacional. Este hito representa un ejemplo notable de c贸mo la ciencia puede conectar con la cultura y de c贸mo una comunidad nacional puede movilizarse para dejar una huella en el cielo.
Planetas orbitando otras estrellas
Para poner en contexto el contenido de este art铆culo, es interesante hacer notar que en 2025 se cumplen 30 a帽os desde el anuncio de la detecci贸n del primer planeta orbitando una estrella distinta de nuestro Sol. A d铆a de hoy se ha confirmado la existencia de alrededor de 5900 planetas extrasolares -tambi茅n denominados exoplanetas– y de 980 sistemas planetarios. Este campo de investigaci贸n es uno de los m谩s activos de la astronom铆a, y entre sus objetivos destaca contestar preguntas que llevan intrigando a cient铆ficos, fil贸sofos y pensadores desde hace siglos: ¿hay vida m谩s all谩 de la Tierra?, ¿estamos solos en el universo?
El profesor Michel Mayor, junto a miembros de la Sociedad Cervantina Alcazare帽a durante su visita en octubre de 2021
Uno de los descubridores de ese primer exoplaneta, Michel Mayor, profesor en la Universidad de Ginebra, y Premio Nobel de F铆sica 2019, visit贸 nuestra Sociedad en 2021 donde disfrutamos de su compa帽铆a, amabilidad y ciencia en uno de los tradicionales almuerzos de Don Quijote. Al atardecer, desde el cerro de los molinos, pudo contemplar el infinito horizonte manchego que Don Quijote recorri贸.
渭 Arae: la estrella y sus planetas
渭 Arae es una estrella ligeramente m谩s grande, masiva y luminosa que nuestro Sol. En el a帽o 2001, un equipo de astr贸nomos detect贸 un planeta orbitando esta estrella. Posteriormente se descubrieron tres planetas m谩s. Desde su descubrimiento, los planetas alrededor de la estrella fueron bautizados con identificadores t茅cnicos: 渭 Arae b, c, d y e, siguiendo el sistema tradicional de a帽adir letras min煤sculas en orden alfab茅tico al nombre de la estrella, a partir de la “b”, conforme se descubren planetas orbit谩ndola. Aunque 煤tiles para la ciencia, estos nombres eran poco inspiradores para el p煤blico general. Fue entonces cuando una propuesta cultural y cient铆fica, nacida en Espa帽a a ra铆z de una iniciativa de la Uni贸n Astron贸mica Internacional, buscar铆a dotar a estos cuerpos celestes de nombres con significado humano y universal.
La oportunidad de la Uni贸n Astron贸mica Internacional: NameExoWorlds
En 2015, la Uni贸n Astron贸mica Internacional – IAU en sus siglas en ingl茅s- organismo responsable, entre otras tareas, de la nomenclatura oficial de cuerpos celestes, lanz贸 una iniciativa sin precedentes, denominada NameExoWorlds, nombre que contiene de forma sint茅tica su objetivo principal: dar nombres a esos mundos externos. Por primera vez, se invitaba al p煤blico de todo el mundo a participar en la elecci贸n de nombres oficiales para 20 sistemas planetarios extrasolares previamente descubiertos.
La convocatoria ten铆a como meta acercar la astronom铆a al gran p煤blico y reconocer el v铆nculo cultural que los humanos han establecido con el cielo desde tiempos inmemoriales. Asociaciones astron贸micas, instituciones cient铆ficas, escuelas, museos y ciudadanos de todo el mundo fueron invitados a proponer nombres y participar en la votaci贸n.
Cada pa铆s pod铆a centrar su atenci贸n en un sistema propuesto. Espa帽a, con una vibrante comunidad astron贸mica y cultural, no tard贸 en organizarse para dejar su impronta.
Espa帽a propone: Cervantes y sus personajes
La iniciativa espa帽ola surgi贸 de forma coordinada entre varias entidades cient铆ficas y culturales, lideradas por la Sociedad Espa帽ola de Astronom铆a (SEA), el Planetario de Pamplona, con el respaldo del Instituto Cervantes. Su propuesta fue clara, poderosa y con gran carga simb贸lica: dar el nombre “Cervantes” a la estrella 渭 Arae, y bautizar a sus planetas con nombres de personajes del Quijote, la obra cumbre de la literatura espa帽ola y una de las m谩s influyentes de la historia universal: “Quijote”, “Dulcinea” “Rocinante” y “Sancho” ser铆an los nuevos nombres de los cuatro planetas b, c, d, e, del sistema.
Los nombres fueron asignados escogiendo personajes clave: “Quijote” simboliza la “Dulcinea” representa el amor idealizado e inalcanzable, “Rocinante” recuerda la lealtad del fiel corcel, y “Sancho” act煤a como fiel escudero del sistema, y como el car谩cter m谩s terrenal de los cuatro.
Ilustraci贸n de Almudena M. Castro (@puratura), y de Forges, para apoyar la candidatura espa帽ola para nombrar a la estrella 碌 Arae y a sus planetas con denominaciones cervantinas
La campa帽a no tard贸 en tomar impulso. Diversos medios de comunicaci贸n, personalidades del mundo de la ciencia y la cultura, y miles de ciudadanos se volcaron en la promoci贸n y la votaci贸n. El respaldo fue tan masivo que pronto se convirti贸 en una de las candidaturas favoritas a nivel internacional. Entre los apoyos que recibi贸 no puedo dejar de citar el dibujo que amablemente nos proporcion贸 Antonio Fraguas, nuestro tambi茅n inmortal Forges, que se public贸 en El Pa铆s pocos d铆as antes de que se abriera el periodo de votaciones.
La victoria: Cervantes en el cielo
En diciembre de 2015, tras meses de votaci贸n p煤blica y verificaci贸n por parte de la IAU, se anunciaron los resultados oficiales del programa NameExoWorlds. Espa帽a fue el tercer pa铆s en participaci贸n, despu茅s de Estados Unidos e India. La propuesta espa帽ola fue aceptada en su totalidad despu茅s de recibir m谩s de 38.000 votos: la estrella 渭 Arae ser铆a conocida oficialmente como “Cervantes”, y sus cuatro exoplanetas pasar铆an a llamarse “Quijote”, “Dulcinea”, “Rocinante” y “Sancho”.
La noticia tuvo un eco extraordinario. No solo fue celebrada por la comunidad astron贸mica, sino tambi茅n por medios culturales y literarios de todo el mundo. Era la primera vez que el nombre de un autor literario, en este caso, Miguel de Cervantes Saavedra, se un铆a de forma oficial a un sistema estelar en el cielo nocturno. En un sentido simb贸lico, la inmortalidad literaria de Cervantes alcanzaba as铆 una dimensi贸n c贸smica.
Un precedente para la ciencia participativa
El 茅xito de la propuesta Cervantes fue tambi茅n una victoria para la divulgaci贸n cient铆fica. Mostr贸 c贸mo la ciencia puede abrirse a la participaci贸n ciudadana sin sacrificar rigor, c贸mo la cultura y la astronom铆a pueden converger, y c贸mo los grandes referentes hist贸ricos pueden inspirar a las nuevas generaciones bajo el mismo cielo que inspir贸 a civilizaciones antiguas.
Desde el punto de vista institucional, la iniciativa demostr贸 que Espa帽a contaba con una comunidad cient铆fica s贸lida y capaz de movilizar apoyos amplios, tanto nacionales como internacionales. La campa帽a fue un modelo de colaboraci贸n entre astr贸nomos profesionales, divulgadores, periodistas y ciudadanos comunes, todos impulsados por una pasi贸n compartida por el conocimiento y el patrimonio cultural.
Cervantes, s铆mbolo universal
La elecci贸n de Cervantes y sus personajes no fue solo una celebraci贸n del autor del Quijote. Fue tambi茅n una declaraci贸n de principios sobre el lugar de la literatura, el idealismo y el ingenio humano en un universo cada vez m谩s explorado por la ciencia. En un mundo dominado por datos, algoritmos y redes –no siempre 煤tiles a la sociedad- recordar a Cervantes en el firmamento es recordar que el ser humano es tambi茅n narrador, so帽ador y buscador de sentido.
Diagrama con todos los sistemas planetarios participantes en NameExoWorlds 2015. La estrella Cervantes y sus planetas, aparecen en el cuadrante superior izquierdo
La historia de Cervantes y su estrella encarna esa fusi贸n de raz贸n y emoci贸n que caracteriza a lo mejor del esp铆ritu humano. En cierto modo, representa una respuesta moderna al sue帽o cl谩sico de las constelaciones: nombrar el cielo no solo para orientarse en 茅l, sino para encontrarse a uno mismo en medio de la inmensidad.
Ep铆logo: mirar al cielo con otros ojos
Desde 2015, cuando se observa la estrella Cervantes, visible con telescopios modestos desde el hemisferio sur y regiones ecuatoriales, ya no se est谩 viendo simplemente a 渭 Arae, se est谩 viendo un pedazo del alma cultural de la humanidad reflejado en el cosmos. Se podr铆a decir, parafraseando al propio Cervantes, que “el cielo es la patria del alma noble”, y que, con esta iniciativa, la ciencia y la cultura han demostrado ser caballeros andantes del conocimiento, cabalgando juntos hacia nuevas fronteras.

En un rinc贸n de la constelaci贸n del Altar (Ara en lat铆n), a unos 49 a帽os luz de la Tierra, brilla una estrella con una importancia simb贸lica inmensa: 渭 Arae, ahora oficialmente conocida, entre otras denominaciones, como “Cervantes”. Este nombre no es producto del azar, sino el resultado de una iniciativa internacional de gran envergadura, en la que Espa帽a se vio involucrada, que culmin贸 con la inclusi贸n del nombre de uno de nuestros mayores escritores en el cat谩logo oficial de la Uni贸n Astron贸mica Internacional. Este hito representa un ejemplo notable de c贸mo la ciencia puede conectar con la cultura y de c贸mo una comunidad nacional puede movilizarse para dejar una huella en el cielo.
Planetas orbitando otras estrellas
Para poner en contexto el contenido de este art铆culo, es interesante hacer notar que en 2025 se cumplen 30 a帽os desde el anuncio de la detecci贸n del primer planeta orbitando una estrella distinta de nuestro Sol. A d铆a de hoy se ha confirmado la existencia de alrededor de 5900 planetas extrasolares -tambi茅n denominados exoplanetas– y de 980 sistemas planetarios. Este campo de investigaci贸n es uno de los m谩s activos de la astronom铆a, y entre sus objetivos destaca contestar preguntas que llevan intrigando a cient铆ficos, fil贸sofos y pensadores desde hace siglos: ¿hay vida m谩s all谩 de la Tierra?, ¿estamos solos en el universo?

Uno de los descubridores de ese primer exoplaneta, Michel Mayor, profesor en la Universidad de Ginebra, y Premio Nobel de F铆sica 2019, visit贸 nuestra Sociedad en 2021 donde disfrutamos de su compa帽铆a, amabilidad y ciencia en uno de los tradicionales almuerzos de Don Quijote. Al atardecer, desde el cerro de los molinos, pudo contemplar el infinito horizonte manchego que Don Quijote recorri贸.
渭 Arae: la estrella y sus planetas
渭 Arae es una estrella ligeramente m谩s grande, masiva y luminosa que nuestro Sol. En el a帽o 2001, un equipo de astr贸nomos detect贸 un planeta orbitando esta estrella. Posteriormente se descubrieron tres planetas m谩s. Desde su descubrimiento, los planetas alrededor de la estrella fueron bautizados con identificadores t茅cnicos: 渭 Arae b, c, d y e, siguiendo el sistema tradicional de a帽adir letras min煤sculas en orden alfab茅tico al nombre de la estrella, a partir de la “b”, conforme se descubren planetas orbit谩ndola. Aunque 煤tiles para la ciencia, estos nombres eran poco inspiradores para el p煤blico general. Fue entonces cuando una propuesta cultural y cient铆fica, nacida en Espa帽a a ra铆z de una iniciativa de la Uni贸n Astron贸mica Internacional, buscar铆a dotar a estos cuerpos celestes de nombres con significado humano y universal.
La oportunidad de la Uni贸n Astron贸mica Internacional: NameExoWorlds
En 2015, la Uni贸n Astron贸mica Internacional – IAU en sus siglas en ingl茅s- organismo responsable, entre otras tareas, de la nomenclatura oficial de cuerpos celestes, lanz贸 una iniciativa sin precedentes, denominada NameExoWorlds, nombre que contiene de forma sint茅tica su objetivo principal: dar nombres a esos mundos externos. Por primera vez, se invitaba al p煤blico de todo el mundo a participar en la elecci贸n de nombres oficiales para 20 sistemas planetarios extrasolares previamente descubiertos.
La convocatoria ten铆a como meta acercar la astronom铆a al gran p煤blico y reconocer el v铆nculo cultural que los humanos han establecido con el cielo desde tiempos inmemoriales. Asociaciones astron贸micas, instituciones cient铆ficas, escuelas, museos y ciudadanos de todo el mundo fueron invitados a proponer nombres y participar en la votaci贸n.
Cada pa铆s pod铆a centrar su atenci贸n en un sistema propuesto. Espa帽a, con una vibrante comunidad astron贸mica y cultural, no tard贸 en organizarse para dejar su impronta.
Espa帽a propone: Cervantes y sus personajes
La iniciativa espa帽ola surgi贸 de forma coordinada entre varias entidades cient铆ficas y culturales, lideradas por la Sociedad Espa帽ola de Astronom铆a (SEA), el Planetario de Pamplona, con el respaldo del Instituto Cervantes. Su propuesta fue clara, poderosa y con gran carga simb贸lica: dar el nombre “Cervantes” a la estrella 渭 Arae, y bautizar a sus planetas con nombres de personajes del Quijote, la obra cumbre de la literatura espa帽ola y una de las m谩s influyentes de la historia universal: “Quijote”, “Dulcinea” “Rocinante” y “Sancho” ser铆an los nuevos nombres de los cuatro planetas b, c, d, e, del sistema.
Los nombres fueron asignados escogiendo personajes clave: “Quijote” simboliza la “Dulcinea” representa el amor idealizado e inalcanzable, “Rocinante” recuerda la lealtad del fiel corcel, y “Sancho” act煤a como fiel escudero del sistema, y como el car谩cter m谩s terrenal de los cuatro.

La campa帽a no tard贸 en tomar impulso. Diversos medios de comunicaci贸n, personalidades del mundo de la ciencia y la cultura, y miles de ciudadanos se volcaron en la promoci贸n y la votaci贸n. El respaldo fue tan masivo que pronto se convirti贸 en una de las candidaturas favoritas a nivel internacional. Entre los apoyos que recibi贸 no puedo dejar de citar el dibujo que amablemente nos proporcion贸 Antonio Fraguas, nuestro tambi茅n inmortal Forges, que se public贸 en El Pa铆s pocos d铆as antes de que se abriera el periodo de votaciones.
La victoria: Cervantes en el cielo
En diciembre de 2015, tras meses de votaci贸n p煤blica y verificaci贸n por parte de la IAU, se anunciaron los resultados oficiales del programa NameExoWorlds. Espa帽a fue el tercer pa铆s en participaci贸n, despu茅s de Estados Unidos e India. La propuesta espa帽ola fue aceptada en su totalidad despu茅s de recibir m谩s de 38.000 votos: la estrella 渭 Arae ser铆a conocida oficialmente como “Cervantes”, y sus cuatro exoplanetas pasar铆an a llamarse “Quijote”, “Dulcinea”, “Rocinante” y “Sancho”.
La noticia tuvo un eco extraordinario. No solo fue celebrada por la comunidad astron贸mica, sino tambi茅n por medios culturales y literarios de todo el mundo. Era la primera vez que el nombre de un autor literario, en este caso, Miguel de Cervantes Saavedra, se un铆a de forma oficial a un sistema estelar en el cielo nocturno. En un sentido simb贸lico, la inmortalidad literaria de Cervantes alcanzaba as铆 una dimensi贸n c贸smica.
Un precedente para la ciencia participativa
El 茅xito de la propuesta Cervantes fue tambi茅n una victoria para la divulgaci贸n cient铆fica. Mostr贸 c贸mo la ciencia puede abrirse a la participaci贸n ciudadana sin sacrificar rigor, c贸mo la cultura y la astronom铆a pueden converger, y c贸mo los grandes referentes hist贸ricos pueden inspirar a las nuevas generaciones bajo el mismo cielo que inspir贸 a civilizaciones antiguas.
Desde el punto de vista institucional, la iniciativa demostr贸 que Espa帽a contaba con una comunidad cient铆fica s贸lida y capaz de movilizar apoyos amplios, tanto nacionales como internacionales. La campa帽a fue un modelo de colaboraci贸n entre astr贸nomos profesionales, divulgadores, periodistas y ciudadanos comunes, todos impulsados por una pasi贸n compartida por el conocimiento y el patrimonio cultural.
Cervantes, s铆mbolo universal
La elecci贸n de Cervantes y sus personajes no fue solo una celebraci贸n del autor del Quijote. Fue tambi茅n una declaraci贸n de principios sobre el lugar de la literatura, el idealismo y el ingenio humano en un universo cada vez m谩s explorado por la ciencia. En un mundo dominado por datos, algoritmos y redes –no siempre 煤tiles a la sociedad- recordar a Cervantes en el firmamento es recordar que el ser humano es tambi茅n narrador, so帽ador y buscador de sentido.

La historia de Cervantes y su estrella encarna esa fusi贸n de raz贸n y emoci贸n que caracteriza a lo mejor del esp铆ritu humano. En cierto modo, representa una respuesta moderna al sue帽o cl谩sico de las constelaciones: nombrar el cielo no solo para orientarse en 茅l, sino para encontrarse a uno mismo en medio de la inmensidad.
Ep铆logo: mirar al cielo con otros ojos
Desde 2015, cuando se observa la estrella Cervantes, visible con telescopios modestos desde el hemisferio sur y regiones ecuatoriales, ya no se est谩 viendo simplemente a 渭 Arae, se est谩 viendo un pedazo del alma cultural de la humanidad reflejado en el cosmos. Se podr铆a decir, parafraseando al propio Cervantes, que “el cielo es la patria del alma noble”, y que, con esta iniciativa, la ciencia y la cultura han demostrado ser caballeros andantes del conocimiento, cabalgando juntos hacia nuevas fronteras.
Benjam铆n Montesinos
Centro de Astrobiolog铆a, Madrid
Sociedad Cervantina, Alc谩zar de San Juan