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J贸venes embarcados en busca de un futuro sostenible para el mar y la Tierra


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Con la ciencia en el papel protag贸nico durante inaugural de la Tercera Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Oc茅anos (UNOC3), Noticias ONU abord贸 un velero noruego de 111 a帽os de antig眉edad en la Riviera Francesa para reunirse con 50 estudiantes de ciencias, numerosos conferenciantes y cient铆ficos reci茅n llegados de una expedici贸n de 46 d铆as. Combinadas con los datos satelitales de la Agencia Espacial Europea (ESA), las ninvaluables observaciones in situ de estos navegantes son un llamado urgente a comprender y proteger los oc茅anos del mundo.

El barco de 98 metros de eslora y tres m谩stiles lleg贸 la semana pasada a Puerto Lympia, ubicado en el casco antiguo de la ciudad francesa de Niza, donde se lleva a cabo la UNOC3.

Construido en 1914 y propiedad de Noruega desde 1921, el Statsraad Lehmkuhl —llamado as铆 por el exministro noruego Kristofer Lehmkuhl— fue reacondicionado el a帽o pasado con instrumentos oce谩nicos de 煤ltima generaci贸n, que lo transformaron en una universidad flotante. Hoy, m谩s de un siglo despu茅s de su construcci贸n, el buque se ha convertido en una plataforma de investigaci贸n de vanguardia, que re煤ne a cient铆ficos, estudiantes y exploradores para desentra帽ar los secretos del oc茅ano.

Esta transformaci贸n es fundamental para su segunda expedici贸n, que empez贸 el 11 de abril en Bergen, Noruega, con la misi贸n de conectar las ciencias oce谩nicas, la educaci贸n y la sostenibilidad. La expedici贸n busca concienciar y compartir conocimientos sobre el papel crucial del oc茅ano en un futuro sostenible para todos. Se espera que regrese a Bergen dentro de un a帽o.

Como parte del Decenio de las Naciones Unidas de las Ciencias Oce谩nicas para el Desarrollo Sostenible -una iniciativa global destinada a revertir el deterioro de la salud de los oc茅anos-, esta expedici贸n se asoci贸 con el Curso de Formaci贸n Avanzada de la ESA sobre teledetecci贸n de sinergia oce谩nica. Esta asociaci贸n reuni贸 a j贸venes de 28 pa铆ses para cruzar datos de observaciones oce谩nicas desde el espacio y el mar, acortando la distancia entre los datos satelitales y la investigaci贸n in situ.

Sinergia espacio-oc茅ano

“Unir… la ciencia, la oceanograf铆a y la tradici贸n n谩utica es la mejor manera de adentrarse en el oc茅ano desde la superficie”, afirm贸 Craig Donlon, ocean贸grafo de la ESA, quien dirigi贸 la expedici贸n.

Donlon explic贸 que se utilizan datos satelitales en tiempo real para guiar la investigaci贸n a bordo y orientar a los estudiantes hacia 谩reas que requieren m谩s y mejores mediciones.

Diariamente, la ESA transmite al barco los datos recopilados desde el espacio, entreg谩ndolos unas tres horas y media despu茅s de su procesamiento. “Entonces, nos acercamos al capit谩n y lo contrariamos al decirle: ‘Acabamos de descubrir algo nuevo, ¿podemos trasladarnos aqu铆, por favor?’”, dice entre risas Donlon.

El arduo trabajo estudiantil rinde frutos

Donlon precis贸 que los instrumentos oceanogr谩ficos de vanguardia, incluyendo un perfilador ac煤stico de corrientes Doppler (ADCP) para medir el movimiento del agua, conjuntos de hidr贸fonos para capturar paisajes sonoros submarinos y sensores de Conductividad, Temperatura y Profundidad (CTD) para analizar las propiedades del agua de mar, trabajan en conjunto para descifrar la din谩mica oculta del oc茅ano.

Aprovechando esto, los estudiantes pueden intercambiar sus hallazgos en f铆sica, biolog铆a e interacci贸n aire-mar, trabajando individualmente o en grupo en proyectos que incluyen olas solitarias internas, trayectorias a la deriva y estudios de la biodiversidad oce谩nica.

“Es bastante dif铆cil, porque tienen que trabajar ocho horas al d铆a en cubierta, y el tiempo restante lo dedican a comer y dormir, pero tambi茅n encuentran maneras de colaborar”, detall贸 Dolon. “Realizaron una gran cantidad de mediciones [...] es un viaje incre铆ble. Tenemos casi 15 terabytes de observaciones in situ hechas a bordo de este buque cient铆fico”.

El ocean贸grafo destac贸 el valor de estos trabajos como herramientas basadas en la evidencia que pueden garantizar que los conjuntos de datos sustenten pol铆ticas con sensatez y promuevan la ratificaci贸n.

“Es nuestro 煤nico oc茅ano, y debemos aprender a vivir en armon铆a con su majestuosidad porque es hermoso pero fr谩gil. No es un vertedero global. Nuestros futuros embajadores oce谩nicos, los estudiantes a bordo de este barco, liderar谩n este esfuerzo”, insisti贸.

La ambici贸n azul de un astronauta

Entre los j贸venes exploradores se encuentra Pablo 脕lvarez, inscrito en el entrenamiento de la ESA para ser astronauta e incorporarse a la Estaci贸n Espacial Internacional para 2030. Antes de su lanzamiento a 贸rbita, Pablo perfecciona sus habilidades y profundiza sus conocimientos a bordo de este gran buque, cambiando la inmensidad del espacio por los misterios del mar.

Se especializa en la teledetecci贸n de la superficie oce谩nica. Mediante el an谩lisis de im谩genes satelitales, como los patrones formados por la luz solar al reflejarse en las olas -conocidos como “brillo solar”-, descubre informaci贸n sobre la rugosidad de la superficie, el comportamiento del viento y la din谩mica oce谩nica. Estos datos clave ayudan tanto a los cient铆ficos marinos como a los astronautas que estudian la Tierra a distancia, ofreciendo valiosas pistas que pueden ayudar a predecir el movimiento del oc茅ano.

“En ambos campos [Ciencias Oce谩nicas y Ciencias del Sistema Terrestre], con lo que hacemos estamos llevando el conocimiento humano un paso m谩s all谩”, apunt贸 Pablo 脕lvarez. “Creo que explorar y aprender m谩s sobre nuestro entorno y el universo en el que vivimos est谩 en nuestro ADN”.

M谩s mujeres en las ciencias oce谩nicas

Entre los estudiantes a bordo, Lena Schaffeld, de Alemania, encontr贸 la expedici贸n particularmente inspiradora. Se sinti贸 empoderada al saber que las estudiantes superaban en n煤mero a sus compa帽eros hombres, un cambio inusual y significativo en un campo a menudo dominado por hombres.

“Creo que necesitamos muchas mujeres en la ciencia, especialmente en las ciencias oce谩nicas. Por eso, es un placer ser una de ellas”, afirm贸 con orgullo.

Enfoc谩ndose en la creciente abundancia y distribuci贸n de la contaminaci贸n por micropl谩sticos en el oc茅ano, Lena Schaffeld considera que el viaje tambi茅n ha beneficiado sus estudios. “Hemos estado cruzando diferentes mares. Vinimos del Mar de Noruega y el Mar 脕rtico, hacia el Oc茅ano Atl谩ntico abierto, y ahora el Mediterr谩neo”, detall贸.

Recopilando datos a lo largo del camino, la estudiante investigadora coment贸 que ha encontrado pl谩sticos m谩s visibles en muestras tomadas del Mediterr谩neo.

“Los micropl谩sticos son fragmentos de pl谩stico de menos de cinco mil铆metros, y la mayor铆a son invisibles”, se帽al贸, e hizo hincapi茅 en que su trabajo apenas comienza y que es demasiado pronto para sacar conclusiones.

“Solo despu茅s del proceso de filtraci贸n y cuando observe con el microscopio, lo cual ocurrir谩 al final de este viaje, sabremos cu谩nto pl谩stico hay realmente”.

Con ganas de seguir estudiando estas muestras, adelant贸 que tambi茅n intentar谩 explorar formas de usar datos satelitales para detectar micropl谩sticos en el agua y para comprender mejor c贸mo se mueve el pl谩stico con las corrientes.

“El agua est谩 en constante movimiento y el pl谩stico en la superficie se mueve con estas corrientes. Por lo tanto, tambi茅n aplicaremos modelos num茅ricos para predecir o incluso rastrear el origen de ese pl谩stico. Ser谩 interesante”, agreg贸 con esperanza.

Es necesario un oc茅ano sostenible

Muchos estudiantes a bordo del Statsraad Lehmkuhl expresaron su gratitud por participar en el curso de capacitaci贸n y poder compartir sus historias y experiencias como parte de la UNOC3.

“Acercar el oc茅ano a la gente es una tarea que hemos encomendado a nuestros estudiantes”, enfatiz贸 Donlon. “Han colaborado con Peter Thomson, el enviado especial de la ONU para el oc茅ano. 脡l nos encarg贸 impartir este curso, y lo hemos cumplido”.

Para Donlon, “la UNOC3 es el lugar donde nos reunimos. Debatimos los temas m谩s relevantes y aportamos un componente ministerial para ratificar decisiones basadas en la evidencia”.

El ocean贸grafo puntualiz贸 que est谩 convencido de que las decisiones y los debates con base cient铆fica que se llevan a cabo en la Conferencia “fortalecer谩n las vidas y las sociedades”, adem谩s de que contribuir谩n a proteger el medio ambiente para las generaciones futuras. “Un oc茅ano sostenible no es un lujo; es una necesidad absoluta. No puede haber [econom铆a] verde sin un oc茅ano azul pr贸spero”, asever贸.





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