2025: Un año con el planeta en la cuerda floja

Balance de Greenpeace

“El año 2025 nos ha enseñado que el riesgo de traspasar la línea roja del planeta ya no es una advertencia futura, sino nuestra realidad cotidiana. Hemos sentido el fuego y el calor golpearnos con dureza debido al cambio climático, hemos asistido con horror al genocido cometido por Israel, hemos visto cómo se cuestionan derechos adquiridos desde hace ya mucho tiempo… pero también hemos sido testigos del poder de la gente cuando se une: tribunales que dan prioridad a las personas frente al cambio climático, macroproyectos que caen ante la resistencia vecinal, tratados mundiales que parecía imposible verlos hechos realidad y millones de personas defendiendo la paz”, ha declarado Eva Saldaña, directora de Greenpeace España.

“Como decía Robe Iniesta, ‘la vida es un ratito’ en el que gritas contra la injusticia. El futuro se escribirá con las acciones del presente. Para 2026 y más allá, no basta con gestionar las crisis; necesitamos poner el cuidado de la vida en el centro de la economía y la política. Tenemos la tecnología, tenemos la ciencia y tenemos la razón. Ahora falta la valentía política para romper con la inercia de los combustibles fósiles. Greenpeace seguirá luchando por un futuro verde, justo y en paz”, ha concluido Saldaña.

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Un año marcado por la intensificación de la emergencia climática y la persistencia de proyectos destructivos.

1. La continuidad del genocidio en Gaza: Tras dos años de destrucción masiva, el alto el fuego de octubre de 2025 no ha frenado la violencia sistemática. Las violaciones del acuerdo son constantes, la presencia militar persiste y la población palestina sigue confinada en condiciones humanitarias extremas. El genocidio continúa, evidenciando que no habrá paz sin justicia ni sin el fin de la ocupación.
2. Temperaturas récord en el mundo y en España: 2025 ha sido el segundo año más cálido jamás registrado a escala global (1,48 ºC de calentamiento medio, igual que en 2023). En España, el verano de 2025 fue el más cálido de la serie histórica, marcando un nuevo récord de 2.1 °C por encima del promedio de 1991-2020, en un año en el que, además, la temperatura media en nuestro país superó 1 °C la media de 1991-2020, todo ello como consecuencia del uso de petróleo, gas y carbón en todo el mundo.
3. El resultado de la COP30 de cambio climático no estuvo a la altura de la urgencia que reclama la ciencia: no incluyó una hoja de ruta para la eliminación de los combustibles fósiles -a pesar de que estuvo sobre la mesa-, ni un plan concreto para detener la deforestación, ni pasos significativos en la financiación climática ni para hacer que las industrias más contaminantes paguen por sus daños y dejen de recibir subvenciones tóxicas.
4. Apagón. España y Portugal sufrieron el primer apagón completo de la historia. Aunque las causas se siguen investigando, informes oficiales confirman que hubo centrales de gas de las grandes compañías eléctricas que no cumplieron su obligación de controlar la tensión, servicio por el que han cobrado más de 2.225 millones de euros entre 2020 y 2024. Las centrales nucleares no solo no evitaron el apagón, sino que no contribuyeron en nada a la recuperación del suministro.
5. La confirmación de la “década extrema” en España: El informe “10 años, 10 eventos extremos” reveló que 10 de los eventos meteorológicos extremos más severos de la última década (tres olas de calor, tres sequías repentinas, dos grandes episodios de incendios, una ola de frío y una DANA) han sido influidos por el cambio climático, confirmando la aceleración en la frecuencia e intensificación de estos eventos y agravando sus dramáticas consecuencias. Se estiman 5.000 personas fallecidas, más de 370.000 afectadas y más de 23.000 millones de euros en daños.
6. La crisis incendiaria marca un récord histórico en el siglo XXI: Los megaincendios incontrolables impulsados por el cambio climático (olas de calor y sequía extrema) y agravados drásticamente por la falta de prevención real y los recortes presupuestarios provocaron, solo en España, el fallecimiento de 8 personas y 400.000 hectáreas calcinadas.
7. Amenaza tóxica sobre Doñana y el Guadalquivir: A pesar de la oposición social, avanzaron los planes para la reapertura de la mina de Aznalcóllar y la construcción de una tubería para verter aguas tóxicas al estuario del Guadalquivir, reavivando el fantasma del desastre de 1998.
8. Escalada de la gripe aviar y la peste porcina: La expansión de los virus puso en jaque la salud pública y animal, evidenciando una vez más el peligro sanitario y ambiental del modelo de ganadería industrial, especialmente de las macrogranjas.
9. El proyecto de la macrocelulosa de Altri en A Ulloa (Galicia): Con numerosasirregularidades denunciadas y un enorme rechazo social, se consolidó como uno de los mayores ataques a la biodiversidad y el tejido socioeconómico gallego.
10. Aumento de la criminalización de la protesta: Un jurado de Dakota del Norte (EE. UU.) dictó un veredicto en el que demanda a Greenpeace el pago de 660 millones de dólares a la empresa de oleoductos Energy Transfer. Este tipo de demandas estratégicas contra la participación pública (SLAPP, en sus siglas en inglés) pretenden desmovilizar a la sociedad y suponen un ataque contra la libertad de expresión y el derecho a la protesta pacífica en todo el mundo. 

La movilización social y la acción judicial han logrado frenar abusos y conseguir hitos históricos.

1. El Tratado de los Océanos ya es una realidad: Se alcanzaron las 60 ratificaciones necesarias para que el Tratado Global de los Océanos entre en vigor, una victoria histórica tras años de campaña para proteger el 30 % de las aguas internacionales.
2. Acuerdo de financiación en la COP16 de Biodiversidad: Se logró lanzar el “Fondo Cali” y un acuerdo para garantizar financiación directa a los pueblos indígenas y comunidades locales para la protección de la biodiversidad.
3. COP 30: Aunque el texto final fue decepcionante, más de 90 países se pronunciaron en favor de un plan para acabar con la deforestación antes de 2030 y más de 80 apoyaron una hoja de ruta para eliminar los combustibles fósiles, lo que supone un gran impulso a la conferencia que se celebrará en Colombia en abril de 2026.
4. Movilizaciones masivas en la COP30 de Brasil: Greenpeace se unió a más de 40.000 personas en las calles de Belém (Portugal) y a los pueblos indígenas, demostrando que el movimiento climático global sigue vivo y fuerte exigiendo el fin de la era fósil y la protección de los bosques. 
5. Justicia climática: La Corte Interamericana de Derechos Humanos y el Tribunal de Justicia de Naciones Unidas establecieron que la lucha contra el cambio climático es una obligación para los Estados, dado que su falta de ambición supone una violación de los derechos humanos.
6. España limita el comercio de armas con Israel: El Congreso aprobó un Real Decreto-ley que limita el comercio de armas con Israel. Aunque la medida es mejorable, representa un avance importante fruto de la presión popular y un paso claro para reducir la implicación de nuestro país en el genocidio.
7. Fin del ataque a la Reserva de la Biosfera de Urdaibai. Tras una gran movilización social, el Patronato del Guggenheim descartó el proyecto de un segundo museo en una de las joyas naturales del País Vasco.
8. Abono único de transporte: El Gobierno español aprobó esta medida que supone un gran paso para incentivar el uso del transporte público y hacia un abono único que incluya todos los medios de transporte y al que deben sumarse el resto de Administraciones. Además, España cuenta por fin con una Ley de Movilidad Sostenible: Gracias a la presión de Greenpeace y otras 15 entidades, se incorporaron enmiendas vitales a la ley, como la financiación del transporte público, la movilidad eléctrica rural y el impulso a los trenes nocturnos.
9. Victorias de la sociedad civil contra la ganadería industrial. Fin definitivo de la macrogranja de Noviercas: El Tribunal Supremo enterró para siempre el proyecto de la que iba a ser la mayor vaquería de Europa, la macrogranja de Noviercas, en Soria. Además, se logró la condena por delito ambiental de dos directivos de la macrogranja Valle de Odieta de Caparroso (Navarra), sentando un precedente clave contra la impunidad de la industria bovina.
10. Freno a la minería submarina: Aunque la amenaza persiste, España ratificó su postura alineada con la precaución, y la presión internacional impidió que la industria minera obtuviera luz verde inmediata para arrasar los fondos marinos este año.

1. Cierre nuclear sin retrasos: Asegurar que no haya prórrogas a las centrales nucleares como la de Almaraz. El Gobierno debe mantenerse firme ante las presiones de las eléctricas y, con ello, evitar el freno a la transición energética, a las inversiones en renovables y al sobrecoste acumulado en la factura de la luz.
2. Implementación real del Tratado de los Océanos: Lograr la identificación y designación de los primeros santuarios marinos en aguas internacionales para cumplir el objetivo 30×30.
3. Adaptación y ambición ante la emergencia climática: Más ambición y acción para reducir las emisiones, impulsando una transición energética eficiente, suficiente, 100 % renovable y justa, que proteja la naturaleza y la salud de las personas, se base en la ciencia y cuente con una participación ciudadana real. Es clave avanzar en la adaptación urbana frente a los impactos del cambio climático con medidas transversales, locales y participadas que reduzcan la exposición al riesgo de personas y servicios esenciales y usen la biodiversidad como aliada.
4. Soluciones reales contra los grandes incendios forestales: Poner en marcha políticas eficaces de prevención frente a los incendios de alta intensidad con la financiación adecuada. La restauración de espacios degradados por el fuego y el fortalecimiento de la gestión del territorio son clave.
5. Defensa de la democracia y la protesta: Frenar la criminalización del activismo climático y proteger el derecho a la protesta pacífica.
6. Moratoria a las macrogranjas y apoyo a la agroecología: A la vista de los problemas ambientales y de salud, se debe transformar el modelo agroalimentario, prohibir nuevos proyectos de ganadería industrial y apostar por un sistema en el que la ganadería y la agricultura sean sostenibles económica, social y ambientalmente.
7. Calendario para el abandono de los combustibles fósiles, que incluya la eliminación de los enormes subsidios públicos que reciben, a presentar en la Primera Conferencia Internacional para la Eliminación Progresiva de los Combustibles Fósiles, que se celebrará en Colombia, y en la COP31.
8. Vivienda digna: Con políticas y medidas para garantizar viviendas dignas – asequibles y sostenibles- que eliminen las barreras existentes para la rehabilitación y aseguren que nadie queda atrás.
9. Enterrar el proyecto de Altri (Galicia) de forma definitiva: La Xunta de Galicia debe desestimar finalmente la construcción de la macrocelulosa en Galicia y proteger la comarca de A Ulloa.
10. Reforzar el dinero público y ponerlo al servicio del bienestar de las personas y el planeta, con impuestos que graven a las élites e industrias más contaminantes en línea con los compromisos asumidos en la Cumbre de Sevilla y la COP30, con la oportunidad histórica que suponen las negociaciones para alcanzar una Convención sobre Fiscalidad de Naciones Unidas.