El grupo francés se presenta este fin de semana en el Stade de France, tras la salida de su último trabajo “Black City Parade”
Estos dos conciertos prometen ser de los más concurridos en toda la historia del grupo, con 130.000 fanáticos que bailarán y cantarán el largo historial de canciones que Indochina ha popularizado en 33 años de existencia.
El último trabajo musical de Indochine, “Black City Parade” es de hecho una promesa de fidelidad al "new wave", estilo que le ha permitido perdurar en la escena francesa y conquistar a varias generaciones de fanáticos.
Para este duodécimo disco de Indochine, el grupo se paseó por varias ciudades: París, Berlín, Bruselas y Tokio. En el grupo de canciones se cuenta a “Wuppertal”, un homenaje a la coreógrafa alemana ya fallecida, Pina Bausch, personaje que Nicola Sirkis, el cantante y fundador de Indochine admiró profundamente."Black City Parade" ha sido considerado por algunos críticos como una de los discos más “negros” en la historia del grupo. Sin embargo, Sirkis asegura que se inspiró para componer las canciones de este disco de los acontecimientos de la actualidad mundial. Las letras hacen referencia por ejemplo a las manifestaciones de estudiantes en Quebec o a los discursos homófobos que generó el debate en Francia sobre el matrimonio homosexual.
Más de 30 años después de su creación, "Indochine” sigue siendo una referencia tanto para el público como para una generación de músicos que reivindican la influencia del new wave. Tras su salida, en 2013, "Black City Parade" acaparó el primer lugar entre los más vendidos en ITunes.
