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Organizaciones piden el fin de la detenci贸n arbitraria de activistas y que se investiguen las denuncias de tortura

SUD脕N - Centro Africano para Estudios de Justicia y Paz (ACJPS), Amnist铆a Internacional, Human Rights Watch, Federaci贸n Internacional de los Derechos Humanos (FIDH) y REDRESS

•elmercuriodigital ▫ "El gobierno sudan茅s debe acusar de inmediato o poner en libertad a los activistas pol铆ticos detenidos recientemente, y debe investigar todas las denuncias que indican que han sido sometidos a tortura y malos tratos", han manifestado hoy el Centro Africano para Estudios de Justicia y Paz (ACJPS), Amnist铆a Internacional, Human Rights Watch, la Federaci贸n Internacional de los Derechos Humanos (FIDH) y REDRESS.
El presidente Omar al-Bashir prometi贸
en abril de 2014 para liberar a todos
los "presos pol铆ticos"
© P脥O UTOMI EKPEI / AFP / Getty Images

Ante un trasfondo general de restricciones a la libertad de expresi贸n y de organizaci贸n pol铆tica, las autoridades sudanesas han cargado en los 煤ltimos meses contra figuras de la oposici贸n pol铆tica por criticar los abusos cometidos por Sud谩n en las zonas de conflicto. El presidente Omar al-Bashir prometi贸 en abril de 2014 que liberar铆a a todos los “detenidos pol铆ticos”. Sin embargo, el Servicio de Inteligencia y Seguridad Nacional sudan茅s ha seguido deteniendo arbitrariamente a activistas pol铆ticos y miembros de partidos de oposici贸n, en fechas tan recientes como mediados de junio, seg煤n han manifestado las organizaciones.

“Sud谩n debe poner fin a las t谩cticas represivas y brutales que emplea para silenciar las cr铆ticas”, ha manifestado Daniel Bekele, director de Human Rights Watch en 脕frica. “El presidente Al-Bashir ha prometido liberar a los detenidos pol铆ticos, pero debe refrenar a sus agentes de inteligencia y polic铆a.”

Sud谩n debe poner fin a las detenciones arbitrarias de opositores pol铆ticos e investigar todas las denuncias de tortura de acuerdo con el derecho internacional, han manifestado los grupos.

Existe una preocupaci贸n inmediata por tres activistas juveniles que pueden haber sido torturados. El 12 de mayo, unos agentes del Servicio de Inteligencia y Seguridad Nacional detuvieron a Mohammed Salah, de 25 a帽os, Taj Elsir Jaafar, de 26, y Moammer Musa Mohammed, de 27, cerca de la Universidad de Jartum. Los tres eran unos conocidos activistas que hab铆an participado en campa帽as de protesta por el homicidio de un estudiante darfur铆, Ali Abaker Musa Idris, muerto a manos de las fuerzas de seguridad gubernamentales en la Universidad de Jartum el 11 de marzo.

“Existen motivos fundados para sentir preocupaci贸n por el bienestar de los tres j贸venes”, ha manifestado Sarah Jackson, directora regional adjunta del Programa para 脕frica Oriental de Amnist铆a Internacional. “Las autoridades sudanesas deben garantizar la seguridad de todas las personas privadas de libertad, y deben asegurarse de que toda persona detenida es acusada de un delito penal reconocible o puesta en libertad sin demora.”

Las autoridades recluyeron a los j贸venes sin cargos en un centro del Servicio de Inteligencia y Seguridad Nacional en el barrio de Bahri, donde, seg煤n la informaci贸n recibida, se ha sometido como castigo a detenidos a palizas y a temperaturas de fr铆o extremo.

La familia de Salah, que no pudo verle hasta un mes despu茅s su detenci贸n, ha informado de que el joven parec铆a tener lesiones graves causadas por palizas en todo el cuerpo, incluido el ojo derecho. La familia de Jaffar tambi茅n ha informado de que 茅ste parec铆a haber sido golpeado. Seg煤n han dicho, ten铆a la cara y las manos hinchadas, parec铆a tener dificultades para ponerse de pie y le temblaban las manos.

“El Servicio de Inteligencia y Seguridad Nacional tiene antecedentes de detener arbitrariamente y torturar a activistas pol铆ticos y de derechos humanos con total impunidad, y esta pr谩ctica debe cesar”, ha manifestado Carla Ferstman, directora de REDRESS. “Sud谩n ha ratificado tanto la Carta Africana como el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Pol铆ticos, tratados ambos que proh铆ben la tortura, y ya es hora de que demuestre que esos compromisos son algo m谩s que una r煤brica en un papel.”

Sudan ha detenido a varias figuras m谩s de oposici贸n pol铆tica en las 煤ltimas semanas. El 17 de mayo, las autoridades detuvieron a Sadiq Al Mahdi, l铆der del Partido Nacional Umma, despu茅s de que 茅ste acusara p煤blicamente a las milicias gubernamentales, conocidas como Fuerzas de Apoyo R谩pido, de cometer abusos tales como violaci贸n y saqueo contra los derechos humanos de los civiles en Darfur. Sadiq Al Mahdi fue acusado de minar la Constituci贸n, pero qued贸 en libertad al cabo de un mes.

El 8 de junio, Ibrahim al-Sheikh, l铆der del partido de oposici贸n Congreso Nacional, fue detenido tras realizar, en un seminario en Al Nuhood, Kordof谩n del Sur, declaraciones similares sobre los abusos cometidos por la Fuerza de Apoyo R谩pido en las zonas de conflicto, seg煤n fuentes dignas de cr茅dito. Al-Sheikh se enfrenta a seis cargos, entre ellos incitaci贸n y actuaci贸n contra el r茅gimen constitucional. Si es declarado culpable, podr铆a ser condenado a muerte.

En los d铆as siguientes, las autoridades de Al-Nuhood hicieron redadas en las oficinas del Congreso Nacional y detuvieron al menos a cinco estudiantes miembros del partido, a un periodista y a otro activista juvenil de la localidad. Uno de los detenidos, liberado al cabo de una semana, dijo que los agentes de seguridad lo hab铆an golpeado con tal brutalidad que necesit贸 tratamiento m茅dico.

Las organizaciones sudanesas han documentado casos adicionales de detenci贸n prolongada sin cargos de activistas a causa de sus opiniones o presuntas opiniones pol铆ticas; algunos de ellos llevan detenidos m谩s de cinco meses.

El Dr. Sidig Noreen Ali Abdalla, catedr谩tico de universidad detenido el 16 de enero, lleva recluido sin cargos bajo custodia del Servicio de Inteligencia y Seguridad Nacional en la localidad de El Obeid, Kordof谩n del Sur, mucho m谩s que el periodo legal de hasta cuatro meses y medio permitido incluso por la Ley de Seguridad Nacional de 2010. Aunque a煤n no se han presentado cargos formales, se cree que ha sido detenido a causa de su activismo sobre la situaci贸n en Darfur.

“Estas detenciones de activistas pol铆ticos forman parte de una crisis de derechos humanos m谩s amplia en Sud谩n, donde el espacio para la libertad de expresi贸n, asociaci贸n y reuni贸n se ha restringido severamente y los activistas pol铆ticos que disienten son censurados con una fuerza brutal”, ha manifestado Katherine Perks, directora de programa del Centro Africano para Estudios de Justicia y Paz.

La tortura est谩 prohibida en todas las circunstancias tanto por el derecho internacional como por la legislaci贸n sudanesa. Si Sud谩n quiere cumplir sus obligaciones, debe adoptar una postura de tolerancia cero respecto a la tortura y los malos tratos infligidos por cualquier funcionario o agente gubernamental, seg煤n han manifestado los grupos. Sud谩n debe hacer cumplir esta prohibici贸n absoluta, investigar todas las denuncias de tortura y hacer rendir cuentas a los agentes que cometan abusos, ya sean de la polic铆a, del ej茅rcito o del Servicio de Inteligencia y Seguridad Nacional. Sud谩n debe adem谩s ratificar la Convenci贸n de la ONU contra la Tortura. As铆 lo han manifestado los grupos.

“Sud谩n sigue reprimiendo severamente las voces discrepantes con total impunidad. La comunidad internacional debe adoptar una postura de firmeza contra la actual oleada de detenciones de opositores pol铆ticos y contra los constantes actos de tortura de los 贸rganos de seguridad contra activistas”, ha manifestado Sheila Muwanga Nabachwa, vicepresidenta de la FIDH. “La Uni贸n Africana y las Naciones Unidas no s贸lo deben pedir a Sud谩n que cumpla plenamente sus obligaciones de derechos humanos, sino que adem谩s deben emprender acciones concertadas para garantizar que lo hace.”





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