ESPA脩A
Pablo Cano / Luis Gonz谩lez.- M谩s de 300 sindicalistas de nuestro pa铆s est谩n procesados por organizar huelgas y piquetes. A la inmensa mayor铆a se les aplica el art铆culo 315, apartado 3 del C贸digo Penal.
El pasado 20 de noviembre se celebr贸 en el Centro «Abogados de Atocha» de Madrid un acto de constituci贸n de una comisi贸n internacional en defensa de los 300 procesados por defender el derecho de huelga en el estado espa帽ol y por la derogaci贸n del art铆culo 315.3 del c贸digo penal.
Una legislaci贸n franquista
El 315.3 deriva del antiguo art铆culo 496, introducido en julio de 1976, en el ocaso del franquismo, y que pretend铆a “hacer frente a la creciente actividad agresiva de grupos organizados que se autodenominan piquetes de extensi贸n de huelga”, es decir, perseguir a los sindicatos –entonces a煤n clandestinos– y a los activistas sindicales m谩s comprometidos en la organizaci贸n de piquetes de huelga.
Todo el 315.3 destila franquismo. Prev茅 mayor condena para las supuestas coacciones de un piquete de huelga que para el mismo delito que se produjera en otras circunstancias. Es incre铆ble que se incluyera en el “C贸digo Penal de la democracia”, aprobado en 1995, con los votos de todos los partidos a favor, salvo la abstenci贸n del PP. A partir de 2010, tras la huelga general contra la reforma laboral de Zapatero, comienza a utilizarse a fondo, y luego, con el gobierno del PP, se profundiza una verdadera campa帽a judicial contra el derecho de huelga, azuzando a los fiscales y a la polic铆a, y al propio aparato judicial con un objetivo: volver a convertir la huelga en un delito.
Destaquemos la dignidad de los cientos de procesados, que se han negado a pactar con los fiscales sentencias “menores” que eludieran ir al c谩rcel, porque no aceptan reconocer que estaban coaccionando a trabajadores para hacer huelga. Al hacerlo est谩n defendiendo, tambi茅n, el derecho de huelga. Imaginemos lo que supondr铆a que en nuestro pa铆s hubiera 300 sentencias dictaminando que los piquetes coaccionan a los trabajadores. La prohibici贸n de los piquetes estar铆a servida.
El r茅gimen de 1978, la libertad sindical y el derecho de huelga
El r茅gimen franquista prohibi贸 las huelgas y a los sindicatos obreros. En los 煤ltimos a帽os del franquismo, esta prohibici贸n fue desafiada por la clase trabajadora, que organiz贸 miles de huelgas “ilegales” y organiz贸 y reconstruy贸 sus sindicatos.
Obligado a admitir la presencia de organizaciones obreras y la imposici贸n de los derechos de manifestaci贸n y huelga, el r茅gimen no ha dejado de atacar a esos derechos. Tanto por v铆a penal como por v铆a reglamentaria (servicios m铆nimos abusivos impuestos por la Administraci贸n).
La lucha contra la represi贸n sindical es inseparable de la lucha por los plenos derechos sindicales, por el derecho de huelga sin limitaciones.
Hay que exigir a todas las candidaturas que se presentan como defensoras de los derechos de los trabajadores el compromiso de derogar el art铆culo 315.3 del CP, anular todos los procesos a sindicalistas, a establecer la plena libertad sindical y de huelga, incluyendo el derecho a organizar piquetes.
Llamamos a profundizar la campa帽a por la derogaci贸n del art铆culo 315.3, desarrollando las actividades decididas en el acto del pasado d铆a 20 de noviembre.
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Por la derogaci贸n del art铆culo 315.3
Acuerdos del acto del 20 de noviembre
1.- Constituir la comisi贸n internacional en defensa de los 300 encausados por huelga y por la derogaci贸n del art铆culo 315.3 del c贸digo penal, de la que formar谩n parte compa帽eros de varios pa铆ses y por el estado espa帽ol, varios procesados, abogados, sindicalistas y representantes pol铆ticos.
2.- Proponemos a las organizaciones y los compa帽eros de otros pa铆ses la realizaci贸n de delegaciones o concentraciones, donde sea posible, frente a las Embajadas espa帽olas, coincidiendo con la celebraci贸n del juicio de los 8 de Airbus, anunciada para el 9-12 febrero de 2016.
3.- Proponemos organizar un mitin internacional durante el juicio a los 8 de Airbus en Madrid o en Getafe, en unidad con las confederaciones sindicales, al que asistan representantes sindicales y pol铆ticos de varios pa铆ses que est谩n participando en la campa帽a.
4- Publicar un nuevo bolet铆n con los nuevos apoyos recogidos, comunicados de distintas entidades sindicales, informes de delegaciones a embajadas, realizados en varios pa铆ses y difundirlo entre el movimiento obrero y entreg谩rselo a las confederaciones de CCOO y UGT que organizan la campa帽a “Huelga no es delito”.
5.- En el 谩mbito estatal, nos dirigimos a los partidos pol铆ticos que se presentan a las elecciones generales del pr贸ximo 20 de diciembre para que en el marco de la campa帽a electoral se comprometan p煤blicamente con la derogaci贸n del art铆culo 315.3 del C贸digo Penal, con la anulaci贸n de los procesos y sentencias a trabajadores por este tema y por tanto con la defensa plena del derecho de huelga y la libertad sindical.
6.- Realizar un informe y un video resumen del acto del 20 de noviembre, as铆 como de una nota de prensa para difundir los acuerdos que adoptamos y organizar una campa帽a econ贸mica para cubrir estas actividades.
Pablo Garc铆a Cano, sindicalista de CCOO Industria, uno de los procesados por huelga de John Deere, caso ya archivado en el juzgado.
Luis Gonz谩lez, de la Coordinadora del Comit茅 por la Alianza de los Trabajadores y los Pueblos (CATP): http://bit.ly/1Nqcc6K
•elmercuriodigital•
Hay que exigir a todas las candidaturas anular todos los procesos a sindicalistas a establecer la plena libertad sindical y de huelga
Pablo Cano / Luis Gonz谩lez.- M谩s de 300 sindicalistas de nuestro pa铆s est谩n procesados por organizar huelgas y piquetes. A la inmensa mayor铆a se les aplica el art铆culo 315, apartado 3 del C贸digo Penal.
El pasado 20 de noviembre se celebr贸 en el Centro «Abogados de Atocha» de Madrid un acto de constituci贸n de una comisi贸n internacional en defensa de los 300 procesados por defender el derecho de huelga en el estado espa帽ol y por la derogaci贸n del art铆culo 315.3 del c贸digo penal.
Una legislaci贸n franquista
El 315.3 deriva del antiguo art铆culo 496, introducido en julio de 1976, en el ocaso del franquismo, y que pretend铆a “hacer frente a la creciente actividad agresiva de grupos organizados que se autodenominan piquetes de extensi贸n de huelga”, es decir, perseguir a los sindicatos –entonces a煤n clandestinos– y a los activistas sindicales m谩s comprometidos en la organizaci贸n de piquetes de huelga.
Todo el 315.3 destila franquismo. Prev茅 mayor condena para las supuestas coacciones de un piquete de huelga que para el mismo delito que se produjera en otras circunstancias. Es incre铆ble que se incluyera en el “C贸digo Penal de la democracia”, aprobado en 1995, con los votos de todos los partidos a favor, salvo la abstenci贸n del PP. A partir de 2010, tras la huelga general contra la reforma laboral de Zapatero, comienza a utilizarse a fondo, y luego, con el gobierno del PP, se profundiza una verdadera campa帽a judicial contra el derecho de huelga, azuzando a los fiscales y a la polic铆a, y al propio aparato judicial con un objetivo: volver a convertir la huelga en un delito.
Destaquemos la dignidad de los cientos de procesados, que se han negado a pactar con los fiscales sentencias “menores” que eludieran ir al c谩rcel, porque no aceptan reconocer que estaban coaccionando a trabajadores para hacer huelga. Al hacerlo est谩n defendiendo, tambi茅n, el derecho de huelga. Imaginemos lo que supondr铆a que en nuestro pa铆s hubiera 300 sentencias dictaminando que los piquetes coaccionan a los trabajadores. La prohibici贸n de los piquetes estar铆a servida.
El r茅gimen de 1978, la libertad sindical y el derecho de huelga
El r茅gimen franquista prohibi贸 las huelgas y a los sindicatos obreros. En los 煤ltimos a帽os del franquismo, esta prohibici贸n fue desafiada por la clase trabajadora, que organiz贸 miles de huelgas “ilegales” y organiz贸 y reconstruy贸 sus sindicatos.
Obligado a admitir la presencia de organizaciones obreras y la imposici贸n de los derechos de manifestaci贸n y huelga, el r茅gimen no ha dejado de atacar a esos derechos. Tanto por v铆a penal como por v铆a reglamentaria (servicios m铆nimos abusivos impuestos por la Administraci贸n).
La lucha contra la represi贸n sindical es inseparable de la lucha por los plenos derechos sindicales, por el derecho de huelga sin limitaciones.
Hay que exigir a todas las candidaturas que se presentan como defensoras de los derechos de los trabajadores el compromiso de derogar el art铆culo 315.3 del CP, anular todos los procesos a sindicalistas, a establecer la plena libertad sindical y de huelga, incluyendo el derecho a organizar piquetes.
Llamamos a profundizar la campa帽a por la derogaci贸n del art铆culo 315.3, desarrollando las actividades decididas en el acto del pasado d铆a 20 de noviembre.
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Por la derogaci贸n del art铆culo 315.3
Acuerdos del acto del 20 de noviembre
1.- Constituir la comisi贸n internacional en defensa de los 300 encausados por huelga y por la derogaci贸n del art铆culo 315.3 del c贸digo penal, de la que formar谩n parte compa帽eros de varios pa铆ses y por el estado espa帽ol, varios procesados, abogados, sindicalistas y representantes pol铆ticos.
2.- Proponemos a las organizaciones y los compa帽eros de otros pa铆ses la realizaci贸n de delegaciones o concentraciones, donde sea posible, frente a las Embajadas espa帽olas, coincidiendo con la celebraci贸n del juicio de los 8 de Airbus, anunciada para el 9-12 febrero de 2016.
3.- Proponemos organizar un mitin internacional durante el juicio a los 8 de Airbus en Madrid o en Getafe, en unidad con las confederaciones sindicales, al que asistan representantes sindicales y pol铆ticos de varios pa铆ses que est谩n participando en la campa帽a.
4- Publicar un nuevo bolet铆n con los nuevos apoyos recogidos, comunicados de distintas entidades sindicales, informes de delegaciones a embajadas, realizados en varios pa铆ses y difundirlo entre el movimiento obrero y entreg谩rselo a las confederaciones de CCOO y UGT que organizan la campa帽a “Huelga no es delito”.
5.- En el 谩mbito estatal, nos dirigimos a los partidos pol铆ticos que se presentan a las elecciones generales del pr贸ximo 20 de diciembre para que en el marco de la campa帽a electoral se comprometan p煤blicamente con la derogaci贸n del art铆culo 315.3 del C贸digo Penal, con la anulaci贸n de los procesos y sentencias a trabajadores por este tema y por tanto con la defensa plena del derecho de huelga y la libertad sindical.
6.- Realizar un informe y un video resumen del acto del 20 de noviembre, as铆 como de una nota de prensa para difundir los acuerdos que adoptamos y organizar una campa帽a econ贸mica para cubrir estas actividades.
Pablo Garc铆a Cano, sindicalista de CCOO Industria, uno de los procesados por huelga de John Deere, caso ya archivado en el juzgado.
Luis Gonz谩lez, de la Coordinadora del Comit茅 por la Alianza de los Trabajadores y los Pueblos (CATP): http://bit.ly/1Nqcc6K
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