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De la mona al conejo pasando por el huevo de pascua

La mona de Pascua es un alimento t铆pico de la reposter铆a espa帽ola que se prepara tradicionalmente en las regiones murciana, valenciana, catalana, aragonesa y castellano-manchega. En Galicia se preparar un alimento similar, denominado rosc贸n o "rosco" de Pascua, en Ja茅n recibe el nombre de hornazo y en Asturias se denomina peragata o "bolla".

El nombre proviene de la munna o mouna, t茅rmino 谩rabe que significa «provisi贸n de la boca», regalo que los musulmanes hac铆an a sus se帽ores.






El huevo
Se considera que el origen de la tradici贸n de comer huevos al finalizar el invierno es una reminiscencia de la Edad de Hielo. Tras el duro invierno, y cuando apenas quedaban provisiones, con la llegada de la primavera volv铆an las aves desde el sur al hemisferio norte y empezaban a poner huevos, de los que se alimentaban los seres humanos hasta que pod铆an volver a cazar con la llegada de mejores temperaturas.


El Origen remoto de la Pascua viene de la Diosa de la fertilidad mesopot谩mica Ishtar, (Astart茅, Asera, Astaroth, Inanna), adorada por los babilonios, asirios, fenicios, cananeos e incluso los hebreos. En ingl茅s Pascua se nombra Easter y en alem谩n Oestern.

El huevo de pascua aparece en la jarra de vino etrusca de Tragliatella (aproximadamente 700 a. C.), en el que se representa al rey sagrado y su sucesor escapando de un laberinto. El otro lado de este jarr贸n ilustra un desfile a pie en la direcci贸n del Sol, encabezada por el rey sagrado desarmado. Siete hombres le escoltan y cada uno de ellos lleva tres jabalinas y un gran escudo con el dibujo de un jabal铆, y el sucesor armado con una lanza va a la retaguardia. El jabal铆 ser铆a la insignia familiar del rey sucesor, y los siete hombres representar铆an los siete meses gobernados por el sucesor, que caen entre la cosecha de manzanas y las fiestas de la fertilidad.
La escena tiene lugar el d铆a de la muerte ritual del rey, y la diosa Luna (en este caso Pas铆fae) ha salido a su encuentro (una terrible figura con t煤nica y con un amenazante brazo en jarras, mientras que con el otro brazo extendido le ofrece una manzana, que es su pasaporte para el Para铆so); las tres jabalinas que lleva cada hombre significan la muerte.

Sin embargo, el rey es acompa帽ado por una peque帽a figura femenina con t煤nica como la otra; quiz谩 sea la princesa Ariadna (que ayud贸 al h茅roe Teseo a salir del laberinto mortal en Cnosos). El rey muestra audazmente, como un contra hechizo de la manzana, un huevo de Pascua, el huevo de la resurrecci贸n. La Pascua era la estaci贸n en que se realizaban las danzas «Ciudad de Troya» en los laberintos hechos sobre el c茅sped (quiz谩 como una coreograf铆a) en Gran Breta帽a prehist贸rica y tambi茅n en Etruria.

En el frente de la jarra hay un dibujo laber铆ntico que se encuentra no s贸lo en ciertas monedas de Cnosos, sino tambi茅n en los intrincados dibujos hechos en el c茅sped y que hasta el siglo XIX pisaban los escolares brit谩nicos en la Pascua de Resurrecci贸n.

Un huevo sagrado etrusco de traquita negra pulimentada, encontrado en Perusa (Italia), con una flecha en relieve a su alrededor, es este mismo huevo sagrado.

Entre los siglos IX y XVIII, la Iglesia prohibi贸 el consumo de huevos durante la cuaresma por considerarlo equivalente a la carne, y por ello la gente los coc铆a y los pintaba para diferenciarlos de los frescos y poder consumirlos el d铆a de Pascua de Resurrecci贸n.

Con el tiempo, estas tradiciones se incorporaron a la festividad de Pascua de Resurrecci贸n y hoy en d铆a el huevo de Pascua es un s铆mbolo universal. Para muchos, el huevo se asemeja a la resurrecci贸n como un s铆mbolo de vida nueva.


En la actualidad, la tradici贸n contin煤a con algunas variaciones. En Europa se mantiene la costumbre que data desde la Edad Media de adornar huevos con te帽idos y pintados. Aunque parece que la pr谩ctica de huevos ornamentales era principalmente elaborada por clases altas o de recursos, se difundi贸 a decoraciones m谩s sencillas, como con el empleo de hojas de 谩rbol para crear patrones sobre el cascar贸n.

El comercio y la modernidad por su parte se ha encargado de incorporar los huevos de chocolate, y los huevos de pl谩stico para ser llenos de dulces, y que seg煤n la leyenda son escondidos por el conejo de Pascua para que los ni帽os los busquen, y por consiguiente, los encuentren y se los coman. En Argentina, Chile y Uruguay, se conserva la tradici贸n de regalar huevos de Pascua decorados artesanalmente con glas茅 multicolor o bien en chocolate. Mientras, en el norte de M茅xico huevos rellenados de confeti, conocidos como cascarones, son decorados y cubiertos con papel.


El conejo de Pascua

Aunque sus or铆genes no est谩n muy definidos, se supone que la elecci贸n del conejo se debe a su conocida capacidad de procreaci贸n, de gran valor simb贸lico en una temporada de fiestas dedicadas a la fertilidad de la tierra tras el invierno.

Su uso se remonta a pueblos antiguos del norte europeo, que ve铆an en la liebre un s铆mbolo: sus fuertes patas traseras le permiten moverse siempre hacia arriba con facilidad, mientras que sus d茅biles patas delanteras le dificultan el descenso.

Desde antes de Cristo, el conejo era un s铆mbolo de la fertilidad e inmadurez gonadal asociado con la diosa fenicia Astart茅, a quien adem谩s estaba dedicado el mes de abril. En alusi贸n a esa diosa, en algunos pa铆ses centroeuropeos a la festividad de Pascua se la denomina "Easter". Ya en 1835 en Deutsche Mythologie, Jacob Grimm afirmaba la posible relaci贸n con Ostara, propuesta que fue recogida repetidamente por otros autores, incluyendo a Charles Isaac Elton y Charles J. Billson.

The Westminster Dictionary of the Bible (El diccionario Westminster de la Biblia) recoge que Easter era «originalmente la festividad de la primavera para honrar a la diosa teut贸nica de la luz y de la primavera, a quien se conoc铆a en anglosaj贸n como Easter».

El conejo como s铆mbolo de la fertilidad y la renovaci贸n en la regi贸n alemana se transform贸 en una tradici贸n en torno al Osterhase.

Dentro de esta tradici贸n, exist铆a una leyenda alemana en la que una mujer pobre, incapaz de ofrecer dulces a sus hijos, escondi贸 en el jard铆n huevos decorados. Los ni帽os, al ver a un conejo, creyeron que hab铆a puesto huevos. Desde entonces, los ni帽os fabricaban un nido que se encontraba en el jard铆n a la espera de los huevos del conejito de Pascua, que se llena durante la noche.

Otro posible origen del conejo de Pascua ser铆a Sajonia, donde se honraba a la diosa Eostre en primavera. La liebre es el animal emblem谩tico de la diosa, y se mantuvo asociada con la Pascua. Del mismo modo, en las tradiciones celtas y escandinavas, la liebre era el s铆mbolo de la diosa madre.

A partir del siglo XIX, se empezaron a fabricar los mu帽ecos de chocolate y az煤car en Alemania.
Hoy en d铆a, adem谩s de los huevos de chocolate, tambi茅n se elaboran conejos de chocolate, que se suelen regalar por Pascua, y son tambi茅n un producto de pasteler铆a que puede verse en muchas de las tiendas de los pa铆ses del norte de Europa.






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