Por Jorge Zavaleta Alegre.-
Personas, instituciones y organizaciones del Perú que destacaron por su compromiso en la construcción de una Cultura de Paz han recibido del Estado peruano el “Premio por la Paz 2012”.
Los ganadores de la sexta edición de un concurso nacional son Rufina Rivera y el sacerdote Franz Windischhofer. Cáritas del Cusco y el Programa “Red Teresa Colque”. El policía Maximiliano Villalobos y la Unidad de Gestión Educativa Local Lucanas, de Puquio. Entre los Medios de Comunicación: el IDL, Yolanda Julia Ahumada Machicado y José Carlos Turrín.
Tales personas e instituciones merecen un amplio y generoso reconocimiento ciudadano, porque el fallo del jurado debe haber tomado en cuenta la dimensión de la labor social de cada premiado, y la información de CONASEC – Comisión Nacional de Seguridad Ciudadana: cada año la violencia contra la mujer, niños, niñas, adolescentes, adultos mayores y personas que conviven en el hogar y los espacios cotidianos, superan la tasa de 101 casos por cada 100 mil habitantes y la violencia delincuencial 77 casos por cada 100 mil habitantes.
La mayoría de las ciudades del Perú al igual que las del Sur del planeta han crecido sin desarrollo económico, sin industrialización ni aumento de la producción agrícola. Pues la experiencia internacional indica que es muy importante la labor preventiva frente a la violencia delincuencial.
La ministra de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, Ana Jara, considera que la acción represiva no es la solución de largo plazo para acabar con el narcoterrorismo, sino la respuesta más seria se encontrará en la formación de las personas, estímulo de valores, actitudes y comportamientos donde prevalezca el respecto, la cooperación, la solidaridad, la no discriminación, el rechazo a la violencia y el apego al cumplimiento de la ley.
Los avances de un país no solo se aprecian por la obra física sino por sus reformas invisibles. El Plan de Igualdad de Género 2012-2017 y el Plan Nacional de Acción por la Infancia 2012-2021 son dos plataformas, entre otras, que merecen un meticuloso seguimiento de la prensa para evitar que la violencia se imponga en la apuesta por la paz, por la vida y no por la muerte.
Alphonse Allais, escritor y periodista francés es recordado por el humor que introducía a sus artículos. Una de las bromas más celebradas fue la propuesta de trasladar las ciudades al campo, con la inserción de espacios de jardinería, de pequeña ganadería, de apicultura, en los tejados de las ciudades, como se ha hecho en algunos lugares.
Algo de eso ocurre con la información que ofrece el Sistema Nacional de Seguridad Ciudadana. Algunos medios de comunicación vuelcan su iniciativa al sensacionalismo y el amarillismo, soslayando la importancia de la doctrina orientada a la protección del libre ejercicio de los derechos y libertades, el cumplimiento y respeto de las garantías individuales y sociales del país y de la comunidad internacional.
Personas, instituciones y organizaciones del Perú que destacaron por su compromiso en la construcción de una Cultura de Paz han recibido del Estado peruano el “Premio por la Paz 2012”.
Los ganadores de la sexta edición de un concurso nacional son Rufina Rivera y el sacerdote Franz Windischhofer. Cáritas del Cusco y el Programa “Red Teresa Colque”. El policía Maximiliano Villalobos y la Unidad de Gestión Educativa Local Lucanas, de Puquio. Entre los Medios de Comunicación: el IDL, Yolanda Julia Ahumada Machicado y José Carlos Turrín.
Tales personas e instituciones merecen un amplio y generoso reconocimiento ciudadano, porque el fallo del jurado debe haber tomado en cuenta la dimensión de la labor social de cada premiado, y la información de CONASEC – Comisión Nacional de Seguridad Ciudadana: cada año la violencia contra la mujer, niños, niñas, adolescentes, adultos mayores y personas que conviven en el hogar y los espacios cotidianos, superan la tasa de 101 casos por cada 100 mil habitantes y la violencia delincuencial 77 casos por cada 100 mil habitantes.
La mayoría de las ciudades del Perú al igual que las del Sur del planeta han crecido sin desarrollo económico, sin industrialización ni aumento de la producción agrícola. Pues la experiencia internacional indica que es muy importante la labor preventiva frente a la violencia delincuencial.
La ministra de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, Ana Jara, considera que la acción represiva no es la solución de largo plazo para acabar con el narcoterrorismo, sino la respuesta más seria se encontrará en la formación de las personas, estímulo de valores, actitudes y comportamientos donde prevalezca el respecto, la cooperación, la solidaridad, la no discriminación, el rechazo a la violencia y el apego al cumplimiento de la ley.
Los avances de un país no solo se aprecian por la obra física sino por sus reformas invisibles. El Plan de Igualdad de Género 2012-2017 y el Plan Nacional de Acción por la Infancia 2012-2021 son dos plataformas, entre otras, que merecen un meticuloso seguimiento de la prensa para evitar que la violencia se imponga en la apuesta por la paz, por la vida y no por la muerte.
Alphonse Allais, escritor y periodista francés es recordado por el humor que introducía a sus artículos. Una de las bromas más celebradas fue la propuesta de trasladar las ciudades al campo, con la inserción de espacios de jardinería, de pequeña ganadería, de apicultura, en los tejados de las ciudades, como se ha hecho en algunos lugares.
Algo de eso ocurre con la información que ofrece el Sistema Nacional de Seguridad Ciudadana. Algunos medios de comunicación vuelcan su iniciativa al sensacionalismo y el amarillismo, soslayando la importancia de la doctrina orientada a la protección del libre ejercicio de los derechos y libertades, el cumplimiento y respeto de las garantías individuales y sociales del país y de la comunidad internacional.
