OPINIÓN de Franco Gamboa Rocabado , Bolivia.- El famoso giro a la izquierda que comenzó en América Latina a comienzos de los años 2000 llegó a su fin. Primero porque casi todos los partidos de izquierda en América Latina como el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), cayeron en un profundo desprestigio debido a las estrategias autoritarias que practicaron, y en segundo lugar, porque decepcionaron a sus bases con la promesa populista de un socialismo que terminó reviviendo una conducta irresponsable donde destaca la violencia, intolerancia e ineficiencia secular en el manejo de un Estado, exhausto frente al gasto público e inerme ante una burocracia que jamás derrotó la corrupción. Difundieron el socialismo del siglo XXI sin considerar la solidaridad democrática, ni el compromiso con los principios de humanidad igualitaria, anulando así la reinterpretación utópica de la política porque se negaron a ver el largo plazo como un sistema democrático abierto a ideas distintas y demanda