ESPAÑA
•elmercuriodigital ▫ Agencia Sputnik.- El juez José Castro de Palma de Mallorca rechazó hoy admitir el recurso de la defensa de la infanta Cristina, hermana del rey Felipe VI, contra la apertura de juicio oral por el caso Nóos, un escándalo de corrupción en el que está imputado también su marido Iñaki Urdangarin.En su recurso de 24 páginas presentado el pasado 2 de enero, los abogados criticaban la "absolutamente desproporcionada e injustificada" fianza impuesta a Cristina de casi 2,7 millones de euros.
Castro decidió el 22 de diciembre abrir juicio contra 17 acusados por el caso Nóos, un escándalo de corrupción política que se inició en 2010 y que afecta a Urdangarin y su ex socio Diego Torres.
El juez consideró que el papel de la infanta fue "imprescindible" para que se marido pudiese defraudar a Hacienda 337.138 euros por medio de Aizoon, una firma pantalla de la que el matrimonio era propietaria.
En el auto recurrido, el magistrado resolvió no aplicar la denominada doctrina Botín, que impide juzgar a alguien si únicamente le acusa la acción popular, en este caso Manos Limpias, que pide ocho años de cárcel para Cristina.
Ni la Fiscalía Anticorrupción ni la Agencia Tributaria, la perjudicada por los delitos presuntamente cometidos, no ven indicios criminales sobre la hija del rey Juan Carlos.
El auto acusa a Urdangarin y Torres por "prevaricación administrativa, malversación de caudales públicos, fraude a la Administración, tráfico de influencias, blanqueo y dos delitos contra la Hacienda Pública".
Urdangarin y Torres conseguían de las administraciones autonómicas contratos millonarios, dinero que luego desviaban a sus empresas. Urdangarin se enfrenta a penas que van de los 19 a los 26 años de cárcel y una multa de 3,5 millones de euros
En el auto el juez recordó que "lo que tú defraudas, lo pagamos todos", como señala la propia Agencia Tributaria que promueve "eslóganes" y campañas como "Hacienda somos todos" para frenar conductas ilícitas.
Cristina se convierte en el primer miembro de la realeza española en sentarse en el banquillo de los acusados desde la restauración de la monarquía en 1975.
