Israel dice estar promoviendo planes para construir 400 nuevas viviendas en la ocupada Cisjordania, por un supuesto ataque palestino a sus colonos.
El ministro israelí de asuntos militares, Avigdor Lieberman, ha dicho hoy viernes haber dado orden a la cartera que dirige de adelantar planes para la construcción de 400 nuevas unidades habitacionales en el asentamiento de Adam (también conocido como Geva Binyamin), en el sureste de Ramalá (norte de Cisjordania).
A su juicio, impulsar el plan israelí de expansión en la región oriental de Palestina será “la mejor respuesta” a lo que ha llamado “el terrorismo”.
“La mejor respuesta al terrorismo es ampliar los asentamientos de Judea y Samaria”, ha escrito Lieberman en su cuenta de Twitter, usando el nombre bíblico de Cisjordania. “Por eso, esta mañana he ordenado llevar adelante planes para construir 400 unidades habitacionales en el asentamiento de Adam”, añade.
Esta decisión, que según el ministro israelí se aprobará en las próximas semanas, se adoptó después de informar el jueves los medios israelíes de la muerte de un colono en un supuesto ataque con arma blanca en el mencionado asentamiento. En el incidente hubo además dos heridos, uno de los cuales mató a tiros al presunto atacante.
La mejor respuesta al terrorismo es ampliar los asentamientos de Judea y Samaria (nombres bíblicos de Cisjordania) Por eso, esta mañana he ordenado llevar adelante planes para construir 400 unidades habitacionales en el asentamiento de Adam”, ha tuiteado el ministro israelí de asuntos militares, Avigdor Lieberman.
El régimen de Tel Aviv ya había iniciado la construcción de 150 de las 400 nuevas viviendas en cuestión, que se sumarán a las 1000 ya existentes en Adam.
Israel ocupó Cisjordania, incluido el este Al-Quds (Jerusalén), en la Guerra de los 6 Días, en 1967. Actualmente, más de medio millón de israelíes viven en unos 120 asentamientos ilegales construidos en la zona.
Las colonias israelíes de esos territorios palestinos son rechazadas por su ilegalidad por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la Unión Europea (UE) y la gran mayoría de la comunidad internacional, ya que la Convención de Ginebra prohíbe construir en terrenos ocupados.
