OPINIÓN de Teodoro Rentería Arróyave.- La carrera transcendente mi hermano Fortino Ricardo Rentería Arróyave, se profesionalizó en una tienda departamental a la cual fue invitado por un prima política Hortensia Estada y luego entró de lleno a la industria de la construcción en una empresa que vendía y alquilaba equipo pesado.
Mientras nosotros entrábamos de lleno al periodismo, en la primera redacción periodística radiofónica en la XEDF, como reportero de policía, que creara Emilio Azcárraga Milmo en 1956, el consanguíneo en la empresa que se llamaba Telesistema Mexicano, hoy Televisa, se contrato en la primera agencia de investigación de audiencias que dirigía el mexicano-estadounidense Charles Anderson. En poco tiempo se ganó la confianza en base a su trabajo y se convirtió en jefe de grupo.
Mientras tanto, Gustavo Olguín, mi primer director de noticiarios, fue relevado por Jesús Humberto Juárez. Ambos Anderson y Juárez, en la idea de independizarse, crearon el complejo de carritos que vendían “Las Banderillas”, invento de Anderson: una salchicha clavada en un palito de paleta y adornado con cátsup y mostaza, lo que resultaba una banderilla de colores.
Ese fue el pie de cría de la cadena de restaurantes Anderson, mi hermano conservó esa amistad a tal grado que cuando llegaba, sobre todo al Anderson de Paseo de la Reforma, lo atendían a cuerpo de rey y el propio Charles lo halagaba y no le permitían pagar.
Nosotros después de seguir en el proyecto con más radiodifusoras y de crearse la primera agencia de noticia, SIME, Servicios Informativos Mexicanos y que el bachiller, como director general y luego como dueño, la cambio a INFORMEX, La primera Agencia Noticiosa de México de la que fui director periodístico y administrativo y renuncié para convertirme en el primer director de la primera redacción periodística de la televisión en Telesistema Mexicano, hoy Televisa, por exceso de cumplimiento y por intereses existentes emigre a la primera competencia sería de la televisión contra los Azcárraga, me fui como gerente de noticias especiales de Televisión Independiente de México, TIM, Canal 8, como se le identificada.
Aquí una anécdota, en aquel tiempo la Ford, dio por sacar al mercado los automóviles del año y del año y medio. Según ellos, por ser figura de la televisión me daban –prestado- un automóvil del año y luego del año y medio con la condición de que lo condujera.
El trabajo era abrumador, salía a pantalla un promedio de 3 horas y media diarias, por lo tanto quien disfrutaba los automóviles era Fortino. Por nuestro parecido nadie cayó en la sustitución, a todos saludaba sentado al volante de los Ford último modelo. CONTINUARÁ.
Mientras nosotros entrábamos de lleno al periodismo, en la primera redacción periodística radiofónica en la XEDF, como reportero de policía, que creara Emilio Azcárraga Milmo en 1956, el consanguíneo en la empresa que se llamaba Telesistema Mexicano, hoy Televisa, se contrato en la primera agencia de investigación de audiencias que dirigía el mexicano-estadounidense Charles Anderson. En poco tiempo se ganó la confianza en base a su trabajo y se convirtió en jefe de grupo.
Mientras tanto, Gustavo Olguín, mi primer director de noticiarios, fue relevado por Jesús Humberto Juárez. Ambos Anderson y Juárez, en la idea de independizarse, crearon el complejo de carritos que vendían “Las Banderillas”, invento de Anderson: una salchicha clavada en un palito de paleta y adornado con cátsup y mostaza, lo que resultaba una banderilla de colores.
Ese fue el pie de cría de la cadena de restaurantes Anderson, mi hermano conservó esa amistad a tal grado que cuando llegaba, sobre todo al Anderson de Paseo de la Reforma, lo atendían a cuerpo de rey y el propio Charles lo halagaba y no le permitían pagar.
Nosotros después de seguir en el proyecto con más radiodifusoras y de crearse la primera agencia de noticia, SIME, Servicios Informativos Mexicanos y que el bachiller, como director general y luego como dueño, la cambio a INFORMEX, La primera Agencia Noticiosa de México de la que fui director periodístico y administrativo y renuncié para convertirme en el primer director de la primera redacción periodística de la televisión en Telesistema Mexicano, hoy Televisa, por exceso de cumplimiento y por intereses existentes emigre a la primera competencia sería de la televisión contra los Azcárraga, me fui como gerente de noticias especiales de Televisión Independiente de México, TIM, Canal 8, como se le identificada.
Aquí una anécdota, en aquel tiempo la Ford, dio por sacar al mercado los automóviles del año y del año y medio. Según ellos, por ser figura de la televisión me daban –prestado- un automóvil del año y luego del año y medio con la condición de que lo condujera.
El trabajo era abrumador, salía a pantalla un promedio de 3 horas y media diarias, por lo tanto quien disfrutaba los automóviles era Fortino. Por nuestro parecido nadie cayó en la sustitución, a todos saludaba sentado al volante de los Ford último modelo. CONTINUARÁ.
